EDITORIAL

Asturias vive con estupor los últimos acontecimientos deportivos que, saliéndose de lo puramente deportivo, implican a todos los estamentos sociales, porque, en realidad, todos son un poco responsables de lo que pasa.
Y lo que pasa es lo mismo de siempre, o sea, que cuando las cosas revientan todos buscan culpables, pero cuando hay que pensar y prever no aparece nadie que lo sepa hacer.
Además, en el deporte actual sólo vale ganarlo todo. Hace tiempo estar entre los cinco primeros era un éxito. Hoy es un fracaso.
Y los políticos aprovechan para hacer campaña, siempre hacen campaña. Y los empresarios funcionan como empresas. Y los deportistas hacen lo que pueden o lo que saben, que a veces no se le puede pedir peras al olmo.
Y Asturias arrastra sus miserias también en lo deportivo, tal vez porque hace ya mucho tiempo que los asturianos se conformaron con militar en la 2ª división en todo, cuando tenemos una tierra de primera y unas gentes de primera.
El Oviedo y el Sporting, tanto monta, monta tanto, están donde están porque cuando había que hacer las cosas bien los dirigentes se liaron entre ellos. Ahora es tarde, por esta temporada. Pensemos en la próxima.
Pero la pregunta del millón es... ¿Alguien va a sacar enseñanzas de todo ello...? Tiempo al tiempo.