ABRIL 2008
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Campoo
Cántabros, romanos y visigodos ocuparon durante siglos estos valles
donde dejaron marcadas sus huellas en la historia y en la tierra. La
riqueza del patrimonio así nos lo muestra, sobre todo en Aguilar de
Campoo, una villa medieval declarada Conjunto Histórico. Es hora de
conocerla, desde sus callejuelas más estrechas hasta el paisaje que
la circunda. |
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Foto: Valvanera |
Aguilar
de Campoo
Imperio
Románico
E s Aguilar una villa dominada por
la piedra y por la historia medieval. En lo alto quedan restos del
Castillo que defendía este burgo, y entre las calles diversos
fragmentos de muralla y sus puertas de acceso. La mejor conservada
es la Puerta del Paseo Real, pero no desmerecen la Puerta de la
Tobalina, que muestra un trozo de muralla, la Puerta de Reinosa que
tiene insertada una lápida hebrea, ni los restos de la Puerta de la
Cascajera, entre otras. Ellas traen a la memoria los tiempos en los
que Aguilar estaba distribuida en barrios gremiales como Herradores,
Tenerías, Tochos, Marmoleros, Portazgo y Puebla, de los que aún se
conservan sus nombres en las rúas.
Pero aquí el verdadero amo es el arte románico, que ha dejado
señaladas con piedra cada una de las calles. Al final de la Avenida
de Cervera se levanta imponente el Monasterio de Santa María la
Real, restaurado a partir de 1978 con el impulso de los vecinos, que
continuaron otras asociaciones y personajes comprometidos con el
arte. El resultado es que hoy esta joya del románico se ha
convertido en algo vivo, puesto que en él se ubican un Centro de
ESO, el Museo Románico y un alojamiento turístico con la
clasificación de Posada. Nuestro paseo continúa con la Colegiata de
San Miguel, cuyo primer cuerpo pertenece al estilo románico de
transición de siglo XIII, la Ermita de Santa Cecilia y el Monasterio
de Santa Clara. No podemos olvidarnos de la Iglesia de San Andrés,
románica del siglo XII, que originalmente estaba en la falda del
Castillo. En 1909 se trasladó al Barrio del Soto, donde todavía
permanece.
Estas muestras arquitectónicas se completan con importantes
edificios civiles dominados por las nobles casonas y los palacios
barrocos. Entre ellos destaca el Palacio de los Marqueses de
Aguilar, la Casa de los VII Linajes, la Casa de los Velarde, la de
Marcos Gutiérrez o el Palacio de los Villalobos. Otra muestra de
arte reseñable es la Puerta de la Torrejona, que formaba parte de la
fachada de un palacio que intentó construir el Marqués de Villatorre
pero no llegó a buen término.
El Románico en la mesa
La influencia de esta época se traslada a los platos actuales
gracias a las I Jornadas Gastronómicas del Románico, que tendrán
lugar los fines de semana comprendidos entre el 4 y 20 de abril de
2008. Nuestros sentidos son estos días los protagonistas: ante la
mesa, saboreando manjares a los que entonces sólo tenían acceso
reyes y nobles medievales; pero también disfrutando la magia y el
arte que encierran los monasterios del medievo. Porque por 33 €
tendremos la posibilidad de degustar el menú elegido en uno de los
nueve restaurantes participantes y también acercarnos a visitar el
Museo Románico. Gracias a estas Jornadas se pretende dar a conocer
la riqueza gastronómica unida al patrimonio artístico. La
presentación de las mismas tendrá lugar el 3 de abril en el Centro
Tecnológico de Cereales de Palencia, donde cada restaurante llevará
uno de sus platos. Esto nos dejará un buen sabor de boca y nos
animará a continuar con toda la carta, porque los nombres no pueden
ser más sugerentes: Royal de Queso de Cabra con espuma de Miel,
Falda de Ternera asada con Trufa y Chalotas, Rape relleno de Cigala
y foie con salsa de Monacato, Crema de los Cangrejos del Río, Tosta
de Pisto de Verduras de la huerta y un largo etcétera de platos de
carne, pescados, verduras y postres. Muchas de estas recetas
provienen de monasterios y conventos, algunas de antiguos recetarios
que se pierden en el tiempo, y otras están inspiradas en aquellas
épocas. Pero sin duda todas estarán deliciosas y nos animarán a
volver una y otra vez a esta villa románica en busca de arte y
gastronomía.
Grupo de Acción Local "País Románico"
Naturaleza y patrimonio artístico se dan la mano en Aguilar de
Campoo y alrededores, y sus habitantes apuestan por cuidar e
impulsar a ambos. Eso es lo que guía las actuaciones del Grupo de
Acción Local "País Románico", que cada año sorprende con nuevas
sugerencias para el viajero y los ciudadanos del lugar. Pensando en
hacer más accesible el arte románico a los escolares recientemente
han publicado el cómic La Piedra del Tiempo, destinado a enseñar el
arte de forma amena y motivarles a conocer su patrimonio. Hablando
de publicaciones, "País Románico" tiene previsto editar próximamente
una guía de setas para incentivar el aprovechamiento de este
recurso, que puede ayudar a completar el turismo con la creación de
nuevas empresas alimentarias.
Fundamentalmente para los turistas, se han colgado en Internet unas
Rutas GPS para hacer senderismo y mountain bike. No hay más que
teclear en el ordenador www.paisromanico.org, y la buena
organización de la página te llevará sin problemas hasta estas
rutas. Quien busca una aventura diferente, puede alejarse un poco de
Aguilar. A unos ocho kilómetros nos espera Salinas de Pisuerga y su
ciclo-raíl que va hasta San Cebrián de Mudá. En Salinas, el Grupo de
Acción Local ha construido una estación que pronto se convertirá en
Centro de Interpretación del Ferrocarril.
Aquí no se para nada, así que si hace tiempo que no vienes
encontrarás nuevas opciones para emplear el tiempo libre. §
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Foto: Javier García Fernández |
Centro de Interpretación
de Barrio de Santa María
Una casa para la cigüeña blanca
En Barrio de Santa María, pueblo del municipio de Aguilar de
Campoo, se encuentra una de las colonias de cigüeña blanca más
numerosas de toda Palencia. Un nuevo centro de interpretación nos
permite conocer sus costumbres y modo de vida.
T ras pasar la parte más dura del
invierno en Africa, por fin las cigüeñas blancas han vuelto a Barrio
de Santa María. Esta ave zancuda y planeadora encuentra en este
pueblo buenos lugares para anidar. Al contrario de lo que suele
ocurrir, en vez de hacer sus pesados nidos en las iglesias, las
cigüeñas aquí se instalan en viejos olmos y sobre estructuras
artificiales de madera. De este modo en Barrio de Santa María se
benefician de las ventajas de convivir con las cigüeñas sin temor a
ver dañado su patrimonio. Ellas se comen langostas, ratones y
topillos que perjudican a la agricultura, y a la vez se alimentan en
los humedales como el embalse de Aguilar, en plantaciones y
vertederos.
De las diecinueve especies de cigüeñas distribuidas por el mundo, la
cigüeña blanca es la que habita en Barrio de Santa María y a la que
recientemente se ha dedicado un nuevo centro de interpretación, en
lo que era la antigua "Casa del pastor". En su interior veremos una
exposición permanente compuesta por doce paneles de gran formato, la
proyección de un documental rodado en las inmediaciones y una
maqueta a tamaño real de una cigüeña en vuelo. Como complemento, una
videocámara instalada en uno de los nidos lleva la imagen a una
serie de monitores de televisión, y nos muestra la vida más íntima
de estos pájaros de plumaje blanco rematado por plumas negras en los
extremos de sus alas. El visitante puede activar el zoom y elegir
entre una visión panorámica o detalles del nido y sus habitantes. El
Centro permanece abierto los fines de semana de 10.30 a 18.30 h. y a
diario se puede concertar una visita llamando al 979 84 23 98.
En las inmediaciones se ha habilitado una pequeña ruta entre
choperas y pastizales, que termina en un mirador desde donde se
aprecia la zona principal de la colonia de cigüeñas.
Esta es una bella historia de convivencia entre las cigüeñas y los
humanos, ya que gracias a los vecinos de Santa María -que se han
empeñado en sustituir los árboles muertos por postes artificiales-,
la colonia ha permanecido en la zona. Hoy esto puede convertirse en
un reclamo turístico para los amantes de los pájaros. Pero hay que
venir antes de que las cigüeñas se concentren para volver a los
cuarteles de invernada. §
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