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                                                                                                                                                                                                                           ABRIL 2008

Puente sobre el río Carrión
Foto: Valvanera


Fuentes Carrionas

Es la cuna donde nace el río Carrión, en la llamada Laguna de Fuentes Carrionas. Su recorrido comienza rodeado de impresionantes alturas como el Pico Murcia, el Curavacas, el Espigüete o Las Lomas. En cuanto sus aguas cogen fuerza, abandona la naturaleza agreste y se pasea entre pueblos como Velilla del Río Carrión y Guardo, llenando de vida todo a su paso.

   Fuentes Carrionas    La Peña    La Pernía    La Braña    Campoo   Valdivia

 

 Guardo  Características únicas

Su ubicación le convierte en la puerta a la Montaña Palentina. Así que Guardo nos da la bienvenida a la naturaleza con un núcleo urbano donde podemos disfrutar de todo tipo de servicios. El lugar tiene personalidad propia, que combina lo mejor del ambiente rural y de las ciudades pequeñas.

Para comenzar, diremos que Guardo es fusión, mezcla de gentes provenientes de toda España para trabajar en las minas de carbón en épocas de mayor esplendor. Aquí hay oriundos de Asturias, de Extremadura, de Andalucía..., lo que ha dado lugar a gentes abiertas, dispuestas a enriquecerse de otras culturas. La llegada de tantas personas ha convertido a Guardo en centro administrativo, cultural y de servicios de los alrededores. El turismo se suma ahora a los recursos de la villa, ya que posee múltiples monumentos que reflejan la historia de los pueblos que lo habitaron en un remoto pasado. Del Castillo de Guardo quedan sólo restos que van saliendo a la luz gracias a las excavaciones que se realizan cada año, pero nos hacen saber que éste fue un lugar estratégico. Lo que sí queda es una pila bautismal románica en la Iglesia de San Juan Bautista, ubicada en El Otero. En su interior está también una talla del patrón de Guardo, San Antonio de Padua. Más a la vista está el puente de piedra sobre el río Carrión con sus cinco arcos construidos en piedra de sillería. Los que vienen a Guardo en busca de buenos monumentos deben saber que la villa tuvo su época de esplendor en el siglo XVIII. De esa fecha datan notables construcciones como la torre de la Iglesia, el edificio de la actual casa de Cultura y la Casa Grande, un palacio barroco con veinticinco metros de fachada. Entre una y otra visita se puede intercalar un paseo por el Parque Fuentes Carrionas y el cercano Reloj de Sol, y si es viernes visitar el animado mercado semanal.

Destacan las fiestas dedicadas a San Antonio de Padua, donde los toros,
los deportes y la música se dan cita cada año.

A su vez, Guardo no pierde contacto con los pueblos que completan su municipio -Intorcisa, Muñeca y San Pedro de Cansoles-, con la naturaleza y con sus tradiciones. Así, sigue manteniéndose la alfarería que tanto renombre tuvo en el pasado, la artesanía en madera, la forja y la fabricación de instrumentos musicales tradicionales. En cuanto a la gastronomía, la cocina tradicional sigue basándose en productos procedentes de la matanza del cerdo como el cocido montañés, que ayuda a soportar los rigores del clima invernal. Otras recetas se basan en la carne de caza, en la trucha que se pesca en primavera y en las setas de otoño. La influencia de las gentes que han pasado por aquí nos han dejado el "cocido ferroviario" por parte de los trabajadores de la vía del ferrocarril, y de los pastores que venían de la Cañada Real se han heredado la chanfaina y la caldereta o guiso del pastor. En cuanto a las tradiciones, no podían faltar las fiestas patronales. Entre todas destacan las celebradas en honor a San Antonio de Padua, el 12 y 13 de junio, donde los toros, los deportes y la música se dan cita cada año. En julio tiene lugar la Romería de la Virgen del Carmen en el Cristo, y más tarde el Maratón de Fútbol Sala, con la participación de equipos nacionales. Para cerrar el año festivo, el 7 de septiembre hay que asistir a la Feria del Cristo del Amparo, la Feria de Alimentos y Artesanía, y el Encuentro de Encajeras de Bolillos. Mientras llegan y no las fiestas, aquí no se pierde el tiempo y se encuentra ocupación rápidamente, sobre todo desde que a finales del año pasado se inauguró el Centro Sociocultural de la calle Arroyal. Su ludoteca tiene ochenta niños inscritos, de entre tres y ocho años, mientras que paralelamente los jóvenes están realizando un curso de Monitor de Ocio y Tiempo Libre, que tiene muchas perspectivas de futuro en esta zona llena de posibilidades naturales. No faltan los bailes, gimnasia y otras actividades manuales que despiertan la creatividad. Incluso este año cuentan con Escuela de Danza. Si posamos la vista en las montañas, la Asociación Peña Torquilla organiza todos los fines de semana del año actividades de senderismo. No hay excusa para quedarse en casa. §

 

 

Dispersos

Música mayor de edad

Estos músicos de la montaña, impregnados de sonidos guitarreros y contundentes, celebran su Mayoría de Edad en la música con un nuevo disco. Esta primavera volveremos a ver a Daniel Azcano a la batería, a Eduardo Varela al bajo, a Ramón Vicente al mando de los teclados y a Chano García con la guitarra solista, mientras Javier Castrillo se ocupa de la guitarra rítmica y la voz. Hablamos con este último de la trayectoria del grupo. Texto: Marta Iglesias

Dispersos
Foto cedida por J. Castrillo

Beben de las influencias del pop rock español de la época dorada de los ochenta y noventa. Sus sonidos fuertes y letras trabajadas no dejan indiferentes al público, pero tampoco renuncian a ritmos populares como los tangos. Hacen notar su presencia sobre el escenario, donde se oye la voz con potencia y los solos de batería. Pronto sacarán su nuevo disco plagado de distorsiones y guitarras contundentes, donde les acompañarán en todos los temas la Big Band de Guardo. Esperamos verlos a todos sobre el escenario en las Fiestas de San Antonio el 13 de junio.

-¿Cómo ha evolucionado la música de Dispersos?
-Cuando sigues oyendo música y tocando adquieres una experiencia mayor. En cuanto a sonidos e influencias, somos dieciocho años más maduros que cuando empezamos, y eso nos hace ser más exigentes con lo que hacemos. Pensamos que la música que hacemos ahora es más profesional y, en conjunto, mejor música.

-¿Cómo ha cambiado el mercado musical en estos años?
-Como nosotros nunca hemos vivido de la música, no nos ha afectado el problema del pirateo. Paralelamente la música tiende a ser como era antes: el que se quiere ganar la vida como músico tiene que hacerlo en directo, porque las grabaciones no son el chollo que fueron para algunos, que luego en directo eran incapaz de demostrar su valía. Lo que no se saca en ventas discográficas se está obteniendo en porcentaje de entradas. Y también observo que cada vez empieza a haber más interés por los grupos independientes, la gente se está dando cuenta de que lo que ofrece el mercado español deja mucho que desear y busca cosas que satisfagan su inquietud musical.

 

"La música es ahora mismo el concepto artístico más devaluado que hay. Y eso es muy triste porque lleva mucho trabajo y cuesta mucho dinero"

-¿Crees que las nuevas tecnologías permite impulsar los grupos pequeños?
-Si tienes mucha dedicación y eres capaz de montarte una buena página que se escuche, las discográficas pueden contratarte, porque están captando todo lo que se produce en Internet. También ahora se puede disfrutar de la música lo que no se disfrutaba antes, porque ¿quién puede estar al día de los cientos de discos que salen? En ese sentido está de enhorabuena la gente a la que le gusta la música. Pero, a la vez, como lo que es gratis no se valora, ya no se escuchan las canciones como antes cuando era un acontecimiento comprar un disco. Eso a nosotros nos ha perjudicado porque nos autofinanciamos y sabemos lo que vale sacar adelante un disco. En cambio lo vendes a cinco euros y la gente no te lo compra porque dice que lo puede grabar por treinta céntimos. Hay poca solidaridad. La música es ahora mismo el concepto artístico más devaluado que hay. Eso es muy triste, porque lleva mucho trabajo y cuesta mucho dinero en instrumentos y equipo.

-¿Qué os ha mantenido tocando juntos tanto tiempo, sin el apoyo de las ventas?
-Que nuestra ambición ha sido exclusivamente musical. O sea, nuestro objetivo ha sido hacer buenas canciones, intentar transmitir a otros las emociones que a nosotros nos dieron en su día nuestros maestros musicales. Eso lo vivimos todos los componentes, que rápidamente supimos que no había que poner demasiadas ilusiones en vivir de la música. Así que dijimos "vamos a demostrar que somos capaces de seguir haciendo música ante la adversidad, y seguir disfrutando en cada concierto, sea encima de un remolque de un tractor o sea en la escuela de un pueblo". Tenemos anécdotas muy bonitas de gente que nos ha llamado del mapa nacional, sin conocernos, simplemente para decirnos que les llegó un disco o maqueta nuestra que le acompañó durante toda su vida, se echó novia con ella... Con eso las expectativas están colmadas. Lo demás es materialismo.

-Has escrito "Estamos altamente contaminados con el virus de la música". ¿Cómo se vive en permanente contagio de ese virus?
-El virus de la música -que es una invención mía- es el que nunca abandona el cuerpo que ocupa, y para nosotros es una realidad. De repente, no sabes por qué, te das cuenta de que siempre estás tarareando canciones, que siempre tienes la cabeza llena de notas musicales y de que no puedes evitarlo. Estás repleto de música, sabes que estás enganchado totalmente y que así te vas a morir. Lo expresarás a lo largo de tu proceso vital de una manera o de otra, pero eres una víctima de la música. §

 

Velilla del Río Carrión
Foto: Spiral. Jesús Piélagos

 Velilla del Río Carrión  

Agua, Tierra y Fuego

En Velilla los elementos de la naturaleza se combinan para dar lugar a un turismo sorprendente, que nos lleva por fuentes, altas montañas y fiestas cuyo origen se pierde en el tiempo.

 • Agua  Es la reina de la zona, como bien sabían los romanos y otros pueblos más antiguos que conocían lo que hoy se llama La Reana, en Velilla. Es un estanque rectangular de sillería que alberga tres surgencias de agua que brotan de modo intermitente. De sus muros parten tres arcos de piedra de los que sólo uno es original -romano- y no tiene argamasa que una sus piedras. Debido a los escritos que hablan de esta curiosa fuente se sabe que tiene más de dos mil años, que las tribus indígenas la empleaban para sus augurios y que se puede identificar con las Fontes Tamarici de los cántabros y las Fuentes Tamáricas de las que habló Plinio el Viejo. Así que, hechas las presentaciones, nos acercamos a La Reana, en cuya cabecera podemos apreciar un ara romana de forma troncopiramidal con restos de una inscripción dedicada posiblemente a la Ninfa de la fuente.
Es un comienzo mágico para nuestro recorrido de la mano del agua, que puede proseguir en la Ruta de los Pantanos. Esta nos llevará a los embalses de Compuerto y de Camporredondo. Entre uno y otro se encuentra el pueblo Camporredondo de Alba, de carácter tranquilo y levantado sobre rocas cuarcitas. Sus casas típicas se entremezclan con joyas arquitectónicas ubicadas en la zona conocida como "El Barrio". Aquí había una casa fuerte de la que sólo se conserva un capitel medieval con escudo heráldico que hoy está en la fachada de una antigua vivienda. Y muy cerca, el "Pórtico del Tío Perico", con una inscripción de 1690 en su arco. Alejados de las casas, destacan los colmenares, que abastecen de miel a la zona. Muchos de ellos son verdaderas obras de ingenio popular, para proteger la miel del goloso oso pardo. Si sale adelante la negociación del Ayuntamiento de Velilla con la Confederación Hidrográfica del Duero, para permitir el uso recreativo de ambos embalses, este pueblo verá aumentar el turismo considerablemente. Este proyecto se completa con la próxima construcción de un Centro de Interpretación de la Naturaleza en Alba de los Cardaños, que se encuentra a la orilla del pantano de Camporredondo. Su casco urbano posee dos barrios -Barrio Castro y Barrio Campo- separados por las aguas del embalse, que en su día cubrió el tercer barrio que existía. En recuerdo de la zona hundida está la ermita del Santo Cristo del Río, de gran popularidad. El paseo nos lleva a Barrio Campo, a su iglesia de San Juan con ábside y pila bautismal románicos y al final al mirador.

A principios de abril se inaugurará el Centro de Interpretación de la Trucha,
abundante en los ríos de la zona.

Seguimos conociendo el municipio, siguiendo el rumor del agua, que nos lleva por rutas que permiten pescar, admirar cascadas o bañarse en aguas frescas. Se puede elegir para ello la Senda de los Pescadores, la Senda de Mazobre o el camino que lleva al Pozo de Las Lomas. Las posibilidades aquí son infinitas y sorprendentes. Por ejemplo, en Otero de Guardo el Ayuntamiento está gestionando los permisos para la instalación de una planta embotelladora de agua, empresa privada que generará puestos de trabajo y servirá para fijar población. Y en la propia Velilla se disfruta de este elemento cada catorce de agosto, con la celebración del Descenso Internacional de Piraguas del Carrión, que este año alcanzará la XLIII edición.
Además de sus posibilidades turísticas y de ocio, no hay que olvidar que el agua es fuente de vida y hábitat de cientos de especies de aves y peces, aunque aquí se rinde culto en especial a la trucha. Este inteligente pez garantiza que las aguas donde vive son puras, así que el municipio quiere honrarle como se merece inaugurando el Centro de Interpretación de la Trucha. Será los días 12 y 13 de abril de 2008 durante la I Feria de Caza, Pesca y Medio Ambiente. La antigua casa del guarda a orillas del río Carrión está dedicada ahora a la trucha, para ello se ha dotado de paneles e incluso cámaras subacuáticas que permiten ver el río en tiempo real.
Como punto final, desde el Ayuntamiento han pensado que la nieve es un importante foco de turismo y por ello están apoyando la creación de la Estación de Esquí de San Glorio.

 • Tierra  En esta zona la tierra se ha plegado para dar lugar a grandes alturas. Velilla es la puerta de acceso a la Montaña Palentina, declarada Espacio Natural protegido por la Junta de Castilla y León. Así que es paso obligado para quien quiere disfrutar del senderismo, la mountain bike, la espeleología o el esquí de travesía en un paisaje único. Las opciones son muchas, desde el imponente Espigüete (2.450 m) -que es hueco en su interior y está surcado por ríos subterráneos- hasta el atractivo Pico Murcia (2.341 m). Pensando en los aficionados a los deportes en la naturaleza, que les gusta estar en contacto con la tierra, se está construyendo un camping de primera categoría en Velilla del Río Carrión. Otra opción es quedarse en alguno de los alojamientos de los pueblos del municipio y hacer turismo. Esta es una buena manera de conocer la zona y sus habitantes, y a la vez apreciar cómo se cuida el patrimonio. En Velilla, por ejemplo, se va a adoquinar la Plaza Mayor y a construir una pasarela peatonal de madera que cruce el río y una dos barrios. Además está en marcha la segunda fase del Centro Cultural y próximamente se levantará una Residencia para la Tercera Edad.

 

Hevia traerá sonidos asturianos a la mágica noche de San Juan que se celebra en Velilla.

 • Fuego  No hay nada más atractivo y a la vez misterioso que el fuego. Quizás por eso los antiguos celebraban con hogueras la noche del solsticio de verano, dando a entender que la luz había vencido a la oscuridad. Una fiesta con tanto significado no se podía perder, y la religión se la apropió para sí llamándola Noche de San Juan. Sin embargo no ha logrado quitarle el carácter mágico, lúdico e imprevisible que siempre le ha rodeado. En Velilla lo saben y cada 23 y 24 de junio se reaviva la llama de esta fiesta arcaica: arde una hoguera en el marco incomparable que ofrece la ermita de San Juan y la fuente de La Reana. El fuego pone el resto. La chispa se convierte en hoguera y a su alrededor se reparten torreznos y chocolate, acompañados de un buen vino y una copita de orujo. Al calor de los troncos que se queman suena la música. Y qué mejor que sonidos tradicionales, unidos a la tierra, para acompañar el baile: este año estará presente Hevia con sus ritmos asturianos al son de la gaita. Mientras, la madera se va convirtiendo en ascuas y llega el momento de que las salten los más osados. Entre el vino, la música, el baile y el fuego se crea un mágico momento de trance en el que es posible vislumbrar cómo se funde lo arcaico con el futuro. El círculo se cierra un año más en este lugar emblemático. §

   

   
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Última revisión: abril 07, 2011. 
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