EDITORIAL
ASTURIAS, DE ESTRENO

Todos los momentos de estreno tienen algo de magia, porque se empieza un nuevo camino, porque afloran las esperanzas de cambio, porque se habla más del futuro, por mucho que pese el pasado.
Asturias necesita volver a creer que las instituciones existen con la única finalidad de servir lo mejor posible a pueblo, y no para ser escenario de contiendas personales y luchas internas de poder. Asturias necesita confiar en su propia capacidad para salir adelante, una capacidad que, hábilmente dirigida desde las instituciones, la lleve a remontar la situación de crisis que vive desde hace ya demasiado tiempo. Asturias necesita ilusionarse por el futuro.
El cambio de gobierno supone una bocanada de aire fresco en unas instituciones desgastadas y faltas de ilusión.
La nueva etapa comienza poniendo la creación de empleo como máxima prioridad, con la cooperación y voluntad de diálogo entre los distintos grupos del gobierno, y la posición firme frente a Madrid para reivindicar para Asturias el lugar que le corresponde.
El verano será un tiempo para afianzar el nuevo gobierno, y el otoño será un tiempo para despegar hacia un futuro lleno de posibilidades. Los próximos meses darán la medida.