CIUDAD NARANCO

Es un barrio de Oviedo, residencial de tipo medio. En Ciudad Naranco la industria no ha encontrado su asiento, de modo que se ha ido formando mayormente de viviendas y comercios que surten las necesidades de sus casi 20.000 habitantes. La pasada década marca el despegue urbanístico en esta zona. A partir de 1990 las nuevas construcciones empiezan a multiplicarse. Se espera que dentro de tres años estén definitivamente terminadas varias urbanizaciones, junto con otros muchos proyectos que van a dar un impulso a la zona, que abarca desde la vía del tren hasta el orfanato minero por la parte de atrás, y desde la vía del tren hasta la iglesia de San Pedro por la parte de delante, aunque en la actualidad la vía está tapada por La Losa.
Para Aurora Alonso, alcaldesa del barrio, el contacto con la gente es imprescindible, a la vez que gratificante. Su objetivo siempre fue que los vecinos conocieran el barrio y que estuvieran unidos, buscando el trato directo con la ciudadanía. Le gusta estar a pie de calle para solucionar los problemas que vayan apareciendo. Y lo ha conseguido: "Es un barrio muy arraigado y con mucho sentimiento de preocupación de unos por otros. Si alguien cae enfermo o deja de ir al supermercado durante un tiempo, enseguida nos enteramos. Aquí funciona mucho el correo de transmisión".
Hace más de cuarenta años era uno de los barrios donde más juventud activa había. Estaba muy unida en torno al deporte. Se organizaban maratones que llegaban hasta el Naranco, también carreras ciclistas, carreras de karts y partidos de balonmano. Ha sido cuna de ciclistas y futbolistas de fama reconocida. "El barrio siempre les ayudó porque eran algo nuestro", comenta Aurora, y esa herencia les ha quedado a las generaciones actuales, pues sigue siendo un barrio movido por la cultura, el deporte y la juventud.
En Ciudad Naranco convive de forma entrañable la gente mayor, vecinos de toda la vida, con los recién llegados, que se han sabido integrar perfectamente en el movimiento. El carácter de sus gentes, dicharacheros, sanos y de espíritu solidario, ha contribuido a generar un grato convivir y un ambiente muy familiar. Hace algún tiempo el problema de las drogas en los jóvenes hizo pasar a los vecinos por momentos difíciles, pero gracias al apoyo de todos y a diversos proyectos sociales que se pusieron en marcha, el barrio logró levantar la cabeza.
Las miras de futuro están puestas en una urbanización que ya se empezó a construir en la calle Menéndez Pelayo, junto a la antigua cárcel, en el lugar que ocupaban unas antiguas naves industriales. El ritmo de construcción es rápido, y se espera que para agosto la primera fase esté finalizada y lista para ser habitada. Por esa zona y muy próximo a la cárcel, está en construcción el nuevo ambulatorio, uno de los proyectos que más necesitaba el barrio y que les va a facilitar mucho la vida. A continuación está "Prados de la Fuente" por la parte baja de la pista finlandesa, una zona nueva donde se están construyendo viviendas unifamiliares, chalets, polideportivos, pistas de tenis y futbito, parques y un SPA (Salud Por el Agua), una novedosa idea de piscinas cubiertas que se asemejan a los tratamientos de un balneario. Sólo hay otra más en Oviedo, pero a pequeña escala.
También la antigua cárcel forma parte de los nuevos proyectos: será el futuro Archivo Histórico de Asturias. Actualmente se encuentra pendiente de reformas por dentro y por fuera, y sus miles de metros cuadrados de superficie van a servir de soporte para libros y documentos históricos. / I.H.