A la derecha, Ana López Blanco
En este
banco también hay un debe y un haber. Un haber en actividades que ofreces
para hacer a los demás, y un debe cuando solicitas algo que necesitas. El
intercambio es el tiempo. Lo lleva la Asociación "Aldea Bierzo" y nos lo
cuenta su presidenta Ana López Blanco desde la sede, en el Ayuntamiento de
Cacabelos.
“Es un
banco que funciona sin dinero, donde depositas tu tiempo y lo retiras en el
momento que lo usas” |
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Texto: Elisa
Velázquez / Foto: Aldea Bierzo
-¿Podría
decirse que el Banco del Tiempo es una "cadena de favores" y que todos
de alguna manera necesitamos utilizarlo?
-Sí, se podría definir como una cadena de favores. Es una herramienta
para utilizar en el momento que lo necesitemos. Podríamos definirlo como
un intercambio de tiempo y de actividades puntuales. Es un banco que
funciona sin dinero donde depositas tu tiempo y lo retiras, por así
decirlo, en el momento que lo usas. La actividad no importa, sino el
tiempo. En este banco puede tener el mismo valor dar unas nociones de
inglés, sacar al perro a pasear o regar unas plantas.
-¿Quién
invierte en este Banco y cómo funciona?
-Por nuestra experiencia vemos que invierte principalmente mucha gente
joven, y el funcionamiento es muy sencillo. Consiste en apuntarte a un
Banco del Tiempo -es gratuito- y ofrecer actividades que puedas
realizar. A cambio solicitas otras que necesites. Nosotros estudiamos
los intercambios posibles y nos ponemos en contacto con la persona que
demanda para decirle quién puede darle esa actividad que solicita. Luego
ya depende de ellos. No es un intercambio en dos direcciones, o sea, que
la persona a la que das no tiene por qué ser la que te da a ti. Tú
puedes estar en deuda, a favor o en contra, a la espera de que se
complete el intercambio.
-¿Nos
estamos engañando ante la idea muy común de que no tenemos tiempo para
nada, y menos para ofrecer algo en este Banco?
-Pues yo creo que precisamente este Banco lo que cubre es la falta de
tiempo. A veces andamos acelerados y necesitamos que nos echen una mano,
y el tiempo que puedes perder, por así decirlo, te puede reportar más de
lo que tú des. Puedes buscar quien te haga la compra, una persona que
acompañe a tu madre al médico, o te lleve al niño a una actividad
extraescolar.
-Parece
que con este proyecto, ganamos todos. ¿Es una vuelta a los valores
humanos y al intercambio justo?
-Pues sí, porque aquí todos somos iguales y nuestro tiempo vale lo mismo
para cada uno. Es una idea muy interesante, porque además pone en
contacto a la gente, evita el aislamiento y favorece la relación entre
las personas.
-El
Banco del Tiempo funciona desde hace años en otros países y ciudades.
¿Con qué intención lo abre ahora "Aldea Bierzo" en León?
-Nosotros empezamos a estudiar el tema del trueque, y vimos este
proyecto en la Asociación Salud y Familia que es la que lleva los bancos
del tiempo de Barcelona. Nos pareció muchísimo mejor que el trueque, una
idea muy interesante. Entonces se nos ocurrió venir a León, donde no
había ninguno, y la sede que nos ofrecieron fue en Cacabelos. La idea
era poner en marcha estos Bancos del Tiempo en las zonas rurales. En
Barcelona, aparte de que nos llevan una delantera enorme, creo que la
gente lo ha entendido muy bien y está funcionando como un servicio más a
la comunidad.
-¿Qué
sector de población puede ser el más beneficiado por el Banco del
Tiempo?
-Precisamente a la gente mayor puede ayudarles en muchas situaciones
pues a veces tienen unos recursos más bajos y hay muchas personas que
están solas, pero le cuesta asumir que esto es gratuito. En Inglaterra
los bancos del tiempo están incluidos entre los servicios sociales. En
Italia surgieron para ayudar a la conciliación de la vida familiar y
laboral de las mujeres y de hecho es con lo que han funcionado, para
cubrir esas necesidades. Es evidente que el Banco del Tiempo tiene
múltiples utilidades. ∆ |