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SUPLEMENTO ASTURIAS   -  ENERO 2006

JAIME IZQUIERDO

JAIME IZQUIERDO
Escritor

 Palabras de naturaleza

El mundo rural es su pasión, su fuente de observación, su inspiración. De ahí surge "El regreso del señor Hoffmann y otros relatos de ambiente entero". Un conjunto de historias de gentes, a caballo entre realidad y ficción, que pretenden ser un reconocimiento al mundo rural asturiano, y una llamada de atención sobre la importancia de su conservación.  

Texto y foto: Lupercio González

Su preocupación por el medio rural le ha hecho merecedor de un galardón europeo que premia el esfuerzo por la conservación de la naturaleza (The Foundation Conservation Ford Europe, Viena, 1991). Además, sus trabajos de investigación no sólo se circunscriben a Asturias. Actualmente estudia el desarrollo rural de la isla del Hierro, en Canarias.
Sus escritos son un homenaje al hombre del campo. Defiende que los habitantes del medio rural configuran el paisaje que conocemos y que la conservación del modo de vida de los pastores es fundamental para preservar nuestra cultura. ¿Qué ocurrirá si ese mundo desaparece?

-¿Cuál es la relación entre los habitantes del medio rural y el paisaje de Asturias?
-En algunos casos la relación entre el paisaje y sus habitantes es muy evidente. Si uno coge un mapa y se fija en la forma que tienen algunos concejos del Oriente asturiano alrededor de Picos de Europa, Cangas de Onís y Onís, encontrará que su forma responde a los intereses de los pastores. Es una forma alargada desde la cumbre hasta el valle para poder tener la oportunidad de utilizar los pastos de verano y de invierno. Las evidencias de la presencia de pastores en el territorio es muy antigua. Hay cuevas que nos indican que pueden tener siete mil años de vinculación. Cabrales, por ejemplo, no es sólo el nombre del concejo, es un topónimo que indica a las claras cuál es la civilización que puede manejar el territorio, la civilización de los pastores y de las cabras. Y el queso Cabrales no es una casualidad. Tampoco es una casualidad que el queso haya sido, en el siglo XVI, la única moneda que tenían los cabraliegos para hacer intercambio comercial. Prácticamente los queseros cabraliegos tenían ya una especialización del territorio hacia la producción quesera, además de una red de comercialización.

-Ha escrito "El país de Celso Amieva", una guía sobre la zona oriental asturiana. ¿Qué inspira su creación literaria?
-No sabría decir qué es exactamente. Tampoco logro encasillarme en un estilo determinado, mezclo la ficción con la realidad. Hoy me preguntaban: ¿Para qué eres un inútil? Me pareció una buena pregunta, pues soy un inútil para la poesía. Si escribí y planteé este libro así es por la admiración de la forma magistral con que Celso Amieva describe su percepción del paisaje a través de la poesía, que es insuperable. Cuando me piden una guía sobre la comarca oriental, digo que esa guía ya la escribió Celso Amieva, y encima la escribió en verso. Tengo admiración por los poetas, pero no tengo esa capacidad, sin embargo, creo que estoy en el proceso de descubrir exactamente lo que quiero escribir. Muchas pistas me las da el trabajo profesional al encontrarme con situaciones reales que luego saco de quicio o ironizo. En mi libro "El Regreso del señor Hoffman" hay un relato sobre un funcionario que enloquece y su vida se convierte en una cuestión de procedimiento. Todo lo ve por el procedimiento administrativo; para comprar pan hace una retención de crédito, cuando se acostaba con su mujer lo hacía dos veces para obligarla a firmar un papel que dijese que recibió el duplicado. O sea, su vida se acaba arruinando como consecuencia de la percepción burocrática de la misma. La administración tiene unas claves burocráticas que en cierta medida hace que se separe de la vida real.

"En el futuro si queremos conservar el paisaje y la biodiversidad, y lo que llamamos naturaleza, debemos activar las culturas campesinas"

-En sus escritos ¿cuánto hay de realidad y de ficción?
-Siempre la realidad supera la ficción. Algunos relatos que son absolutamente reales parecen de ficción, y otros incluso superan la propia realidad, que se convierte en una fuente de ficción. En lugar de inventarse personajes merece más la pena descubrir personajes reales y trabajar con ellos como si fueran de ficción. Uno de los dramas de los escritores es encontrar los personajes. Sin embargo yo digo que los personajes están en la calle, sólo hace falta hablar con ellos y convertirlos en personajes de ficción. Yo cabalgo entre los dos mundos.

-"El regreso del señor Hoffmann y otros relatos de ambiente entero". ¿Qué hay tras ese juego de palabras?
-Efectivamente, hay un juego de palabras con respecto al "medio ambiente". En castellano, el concepto "medio" significa mitad, y a mí me da la impresión de que para algunos trabajar con el medio ambiente es trabajar con la mitad, es decir únicamente con aspectos vinculados a la fauna silvestre, a la biología de la conservación, sin entender que los entornos rurales, sobre todo en Asturias, no son naturales, son culturales. Es la síntesis entre una interacción de diferentes culturas.
En la península ibérica los espacios naturales son siempre la consecuencia de la interacción entre modos culturales y territorio. Entonces, si la biodiversidad de la península ibérica es tan alta y si ésta está relacionada con las culturas campesinas, que con más éxito que fracaso gestionaron el territorio, eso quiere decir que en el futuro si queremos conservar el paisaje y la biodiversidad, y lo que llamamos naturaleza, debemos activar esas culturas. Ese es el planteamiento que nos llevaría a la confección del "ambiente entero". Y eso que es cierto para la península ibérica y para España, es cierto para el planeta. O acomodamos a la humanidad y a sus diferentes civilizaciones y culturas en la vida de un planeta, que por definición es finito, o no tendremos mucho éxito como especie.

-¿Piensa que el asturiano es un gran desconocedor de su propia cultura?
-Los asturianos somos grandes ignorantes de nuestras propias culturas. Cuando uno analiza las realidades de la región ve las diferentes culturas que existen, y siempre hay una tendencia a considerarlas más homogéneas de lo que son. Por ejemplo: en Cabrales es diferente el tratamiento de los vaqueiros a los pixuetos; unos trabajan en la montaña y otros lo hacen al lado del mar. La variación de paisajes es en Asturias una variación también de culturas. Tengo un amigo que dice: "Asturias es una república independiente de valles". Cada valle es un mundo. Desde el punto de vista cultural y del desarrollo esto es magnífico. El presidente francés De Gaulle se quejaba de que un país con 250 variedades de quesos, como el suyo, es un país ingobernable. Cada queso significa una cultura. Si De Gaulle tenía razón, haciendo el cálculo, Asturias entonces sería cuatro veces más difícil de gobernar que Francia. Para el mundo que viene, que es el mundo de la diversidad cultural, de las alianzas de civilizaciones y demás, creo que nosotros tenemos una oportunidad de reconocernos a nosotros mismos. Asturias tiene un grave problema de reconocimiento, pero no sólo desde el punto de vista de la propia sociedad, sino desde el punto de vista de los gobiernos.

-¿Reconocemos nuestra identidad propia?
-Nosotros no trabajamos el tema de la identidad regional, sin llegar a los extremos de la discusión por otra parte banal de nación, y como consecuencia tenemos problemas graves. Los ganaderos de los Picos de Europa de la parte cántabra llaman "nación" a la vagina de la vaca, y los de la parte de Onís y Cangas de Onís la llaman la natura. Son dos términos preciosos, de natura, naturaleza, y nación, lugar donde se nace. A mí me interesa más esa "nación" que la discusión chata que se produce, poco relacionada además con lo que le sucede de verdad al país, por ejemplo los dramas subsaharianos que se nos vienen encima producto del mundo globalizado en el que vivimos. A veces perdemos el tiempo ociosamente en cuestiones que son secundarias.

-¿Suele escribir en asturiano?
-Soy absolutamente analfabeto en bable, en inglés y en otras lenguas que no sea el castellano y eso es un problema. En un debate sobre abuelos y nietos pastores en Picos de Europa, oí por boca de Emilio Suero una de las descripciones más complejas, más precisas, y con términos más arcaicos que yo recuerde. El tema era cómo se hacía la cuerda. Uno de los pastores decía que con pelo de caballo, mientras otro pastor le discutía que la cuerda era más resistente si el pelo era de vaca. En su discusión usaban una precisión de términos de una belleza y de una riqueza que yo desconocía, más o menos se intuía, pero se me perdía. Yo miraba para aquellos pastores con envidia, por cómo manejaban el idioma, el idioma que no está escrito.

-¿El papel de todo intelectual es mover conciencias?
-Lo que mueve el mundo es la cultura, los cambios culturales. Los gobiernos difícilmente promueven el cambio cultural; a veces lo gestionan y es cuando son gobiernos brillantes, pero otras lo entorpecen. En cualquier caso los intelectuales tienen un papel de influencia difícil de evaluar, pero fácilmente perceptible. Uno de los dramas de las dictaduras, la española por ejemplo o la argentina, fue la expulsión de los intelectuales. Un país como España que en la Guerra Civil pierde al 85% de los intelectuales, es imposible que levante cabeza. En Argentina y en Chile pasó lo mismo. Los intelectuales son los que impregnan la sociedad, están en todos los sitios, en la radio, en la televisión, en los libros, dando clases, pensando, influyendo sobre la sociedad. Un mundo sin intelectuales no sería posible.

"Siempre la realidad supera la ficción. Algunos relatos que son absolutamente reales parecen de ficción, y otros incluso superan la propia realidad"

-¿En qué está literariamente metido?
-En un par de cosas, una de ellas ha sido rematar un ensayo que hice junto al catedrático de filosofía Gonzalo Barrera y se va a titular: "Marqueses, Funcionarios, Políticos y Pastores", y el subtítulo de "Cien años de desencuentro entre naturaleza y cultura en los Picos de Europa". Revisamos la visión de los Picos de Europa por la Institución Libre de Enseñanza y la visión del marqués de Villaviciosa, al que hemos encumbrado de forma injusta. El marqués es un personaje muy interesante, pero no creo que sea el padre de la conservación. En definitiva, es un repaso sobre la institución y la enseñanza, la visión de los aristócratas, de los tecnócratas ambientales de los años 60 y siempre en todos los casos, la marginación de la cultura que había modelado el territorio. Los pastores nunca son considerados y sus elementos de control territorial no son tenidos en cuenta, ni tampoco la arquitectura de las majadas. Pero cuando uno ve el mapa de Asturias, de los Picos de Europa, y ve la urbanización de las majadas, se da cuenta de que esos son los centros de control de territorio. Todo eso al final se sintetiza en un producto, que es el queso. El queso es el que hace el paisaje.

-¿Qué futuro hay para los pastores?
-Superada la visión aristocrática del territorio de 1918 y la visión tecnocrática de los años 60-70, debemos ir a un planteamiento de conservación cultural, sobre todo porque esa cultura está a punto de extinguirse. Hay un departamento de antropología de la Universidad de Chicago que nos sigue con mucha expectación, porque nosotros sabemos que esa cultura viene del neolítico, sabemos que ha tenido muchas dificultades durante la revolución industrial y está a punto de extinguirse. La pregunta es si los pastores tienen sitio en la sociedad post industrial o definitivamente pertenecen al pasado. Desde el punto de vista intelectual es una discusión muy importante. Desde el punto de vista político, no hemos alcanzado todavía el grado de madurez suficiente para que se convierta en proyecto político. Y desde el punto de vista del ordenamiento de las leyes tampoco. De momento estamos en la confrontación política. Hay teorías que dicen que estamos equivocados, que eso se va a extinguir, que no merece la pena. Nosotros decimos que no. Una de dos, o nos extinguiremos con el último pastor o seremos capaces de preservar esa cultura. Esa es la reflexión, el fondo, lo que persigue "El regreso del señor Hoffman". ∆

   

   
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Última revisión: abril 07, 2011. 
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