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-Son ya muchísimos los foros en donde se habla sobre el cambio
climático, sin embargo parece que no lo acabamos de creer del todo. ¿Es más
grave de lo que nos imaginamos?
-El cambio climático es una cuestión que va a ocurrir en un plazo de
tiempo lo suficientemente prolongado para que la gente perciba que hay algo,
pero no como algo trascendente, y lo es. Va a afectar, seguro, a todos los
órdenes de la vida.
-En la cornisa cantábrica ¿qué cambiará?
-Pues la temperatura de una manera importante, y la pluviosidad, que
son las dos variables que definen un clima. La temperatura se va a
incrementar y la precipitación se supone que va a disminuir. No obstante eso
es una cuestión que depende en gran medida de las emisiones que hagamos de
gases de efecto invernadero. Si el nivel de emisiones continúa como hasta
ahora y no se lleva a cabo el Protocolo de Kioto, posiblemente hacia
situaciones más restrictivas, el calentamiento puede ser muy grande.
Hablamos de cinco grados o seis grados.
-El Protocolo de Kioto se quiere hacer realidad pero, ¿aplicarlo aquí va
a servir para algo?
-El Protocolo de Kioto es la primera toma de decisión a nivel
mundial sobre una regulación de las emisiones. El problema es que no todos
los países que en principio acordaron esa cuestión y ese reparto de
emisiones a nivel mundial, lo han firmado, y por tanto, no adquieren el
compromiso real de hacerlo. Creo que es imprescindible, porque si no hay
ningún control de emisiones, los cambios pueden ser muy rápidos y muy
importantes. Muchos países se van a ver afectados, tanto que algunos podrían
desaparecer, por ejemplo, Maldivas, que tiene una cierta trascendencia por
lo del tsunami. Son islas coralinas que tienen de dos a seis metros de
altura y si sube el nivel del agua del mar dos metros desaparecerán, además
de muchas otras ciudades del planeta.
-El cambio climático ¿en qué cosas lo vamos a notar en Asturias?
-Cambiarán, sobre todo, las especies que tienen ciclos de vida muy
largos, como pueden ser los árboles. Supongo que empezaremos a ver la
entrada de nuevas especies de sitios más cálidos. En el mar se están
empezando a ver especies de tipo subtropical que entran aquí en verano, cosa
que antes era rarísimo. Con los peces aguja, por ejemplo, que se pescaban en
el Caribe, ahora hay algunas compañías que están empezando a montar
pesquerías deportivas en el Cantábrico. Todo, indica que veremos cambios en
especies de peces, en aves, en plantas... Pero todo esto no está tan
estudiado como para predecir cómo va a ser el ritmo de cambio.
-Y habrá playas que desaparecerán.
-Sí, cambiará todo. Hay un doctor inglés que ha hecho una tesis
sobre cambios de distribución en función de los rangos térmicos de
temperaturas, que predice la desaparición de muchas especies en la cornisa
cantábrica, una zona de transición entre zonas frías y zonas cálidas. Parece
que los límites de las especies se moverán hacia el norte y hacia Galicia,
que es un poquito más frío en el verano.
"Si no hay ningún
control de emisiones, los cambios pueden ser muy rápidos y muy
importantes" |
-¿Viviremos un clima "extremo" en nuestra región?
-Vamos a vivir en unas condiciones que son más extremas respecto a
lo que es habitual tanto en verano como en invierno. Se ve mucho en la
disposición de las nevadas, en la cantidad de nieve acumulada y en su
desaparición, como sucede en esos neveros potentes que había en Picos de
Europa. Lo que pasa es que no hay registro de ello.
-Disminuirá la nieve, la lluvia y el potencial hidroeléctrico.
-La cuestión está en cómo será la regulación de los ríos para
aprovechamiento hidroeléctrico. En principio lo que sí habrá, aparentemente,
es menos disponibilidad hídrica y eso afectará a la explotación de ese
recurso.
-Con todo ello el turismo de nieve aquí va a tener dificultades.
-Sí, antes era relativamente sencillo que la temporada de nieve
llegase hasta abril o mayo. Ahora, con alguna excepción, ya no es tan así.
Este mismo año hubo una nevada fuerte, pero la nieve desaparecía rápidamente
de los montes. Muchas zonas se están manteniendo con cañones de nieve. En
Alpes por ejemplo, ya están decidiendo abandonar las pistas bajas, porque si
hay mucha temperatura los cañones tampoco resuelven nada. Antes en Oviedo
nevaba todos los años, ahora eso es una cosa muy rara. Ocurre que como no
hay nadie que se dedique a analizar los registros, la gente todavía no se
acaba de creer la situación, y han cambiado muchas cosas.
-¿Para qué debemos prepararnos los asturianos?
-Primero, para una economía en donde el gasto o uso de energía con
combustibles fósiles tienda a reducirse. Segundo, a una reducción del gasto
de energía general; gastar menos en calefacciones y en emisiones de este
tipo; aislar mejor las casas, pensar las ciudades para que haya un menor
gasto. Hay que regular el transporte. Potenciar los trenes, porque gastan
menos por tonelada transportada y kilómetro que un camión. Todo ese tipo de
cuestiones va a tener que replantearse, porque el objetivo final será usar
menos energía. Implicará cambios en la construcción, haciendo las casas más
bioclimáticas, con mayor capacidad de regulación térmica sin necesidades de
calefacción o de refrigeración. O sea, todo ese tipo de cuestiones van a
necesitar que se tomen decisiones muy drásticas. ∆