PRINCE KENNEDY
Presidente de CARE
Prince Kennedy nació en Edo State,
Nigeria, hace 31 años y es el mayor de cinco hermanos. Estudió
Sociología en la Universidad de Maiduguri y posteriormente creó una
pequeña empresa de transportes en su país. Estuvo preso por motivos
políticos pero finalmente consiguió escapar. Llegó a España solo y en
patera, donde consiguió trabajo y un permiso de residencia. Hoy en día
tiene un permiso permanente y ha creado su propia empresa en Oviedo, a
la que ha denominado Ebuny Comunications, como su anterior empresa de
transportes, y cuenta con un locutorio, una peluquería y un pequeño
ciber.
-¿Qué es lo que unifica al africano que está aquí?
-La fuerza de unificación que tenemos es que a la mayoría de los
africanos que estamos aquí en España, no les gusta la imagen de Africa y
tenemos un pensamiento común para poder cambiar esta imagen en el mundo.
Entonces debemos contribuir en lo que podamos para cambiar la situación
económica de Africa. Estamos intentando luchar para unir fuerzas desde
aquí vendiendo ideas a los políticos.
La imagen que se vende aquí en Europa o en América no es la imagen real.
Sólo se quieren presentar las partes malas para así frenar el flujo de
dinero hacia Africa, porque lo que necesitamos no es a Médicos del Mundo
o Cruz Roja recogiendo dinero, es una comunidad de empresarios que pueda
invertir en Africa porque allí hay posibilidades, hay gente estudiada.
Con la población tan numerosa que hay si montas cualquier empresa allí,
fijo que va a funcionar.
-Mencionabas la necesidad de trasladar iniciativas que aquí están
funcionando, como podría ser por ejemplo, la Seguridad Social.
-Sí, en Nigeria, por ejemplo, tenemos una política capitalista
pero faltan las estructuras o medios, y hay mucha gente que a lo mejor
está enferma y no tiene medios ni dinero para ir a médicos. Estamos
intentando a través de la asociación crear un programa, colaborando con
gente del mundo de la salud aquí, para poder enviarlo o venderlo a
algunos dirigentes de países africanos.
-A pesar de las grandes dificultades que encuentra el inmigrante en
el llamado primer mundo, sigue existiendo un importante flujo de
inmigrantes. ¿Es por desconocimiento de la realidad de lo que les
espera?
-Te aseguro que la gente de las aldeas no lo sabe. En las ciudades
hay gente educada y hay medios para leer y ver, pero el resto no se
entera. Otra cosa son los políticos, que sí saben, pero yo creo que es
una partida que ellos quieren jugar porque a través de la inmigración el
dinero vuelve a Africa.
La gente que marcha a Europa, cuando luego vuelven a su pueblo,
construye casas, tiene negocios y está más o menos estable. Esto es como
una envidia para los demás que también quieren venir, y ahí están las
mafias que lo utilizan. La posibilidad de progresar en los países
africanos es casi cero, la gente quiere salir de su propio entorno, no
para venir a hacer prostitución, sino porque piensa que el concepto de
la vida aquí es bastante diferente y pueden tener trabajo fácilmente.
-¿La mayor parte de la gente de la asociación es gente que está aquí
con su familia?
-Nosotros no tenemos el mismo concepto de inmigración que los
sudamericanos, que la mayoría vienen con sus hijos y su mujer. Las
personas que emigran de Africa son jóvenes que tienen visión del mañana.
La mayoría de estos chicos que están vendiendo discos en la calle la
mayoría tienen casa, donde vive su familia. Nosotros estamos creando un
programa, que no sé si podremos llevar a cabo este año, se llama
Intercambio Cultural. Consiste en llevar gente desde aquí como turismo,
de forma que ellos van a mi casa, viven en ella, conocen a la gente que
yo conozco y conocen mi cultura. Porque la mayoría de los turistas van a
ciudades a hoteles grandes y no saben ni lo que es la comida de la zona.
-Los africanos que están aquí ¿tienen intención de volver a su
tierra?
-Sí, en el concepto de un africano nadie quiere quedarse aquí,
todo el mundo quiere venir, hacer dinero y volver allí, porque como
alguien dijo: disfrutábamos más cuando estábamos en Africa que cuando
estamos aquí. Aunque no tenemos infraestructuras, para nosotros la vida
es más bella estando en Africa que en Europa, porque en Europa las cosas
son más artificiales y el contacto humano es muy restringido. Allí hay
otra diversión, tenemos lo que se llama familias extendidas. Cuando tú
estás ahí, te da alegría ver a la gente que conoces desde pequeño, así
que tenemos como idea volver un día.
Lo que tenemos en la mente es aprender las cosas buenas de aquí y dejar
las malas, así cuando volvamos a Africa nosotros seremos como una
escuela para los demás que no tienen la posibilidad de salir de allí.
Ellos aprenden de nosotros y de alguna manera pueden coger algunos
valores que nosotros aquí aprendemos, como es la organización de las
ciudades o que las mujeres puedan estudiar, porque tienen mucho que
aportar a la sociedad. ∆ |