Juan García
Periodista y Presidente AA.VV. Casco Antiguo de Oviedo
"En principio, todo lo que es burocracia me parece una atrocidad, porque los sistemas burocráticos no son más que un sistema de control exhaustivo del ciudadano. Entiendo que debe haber algún tipo de control, pero últimamente ya estamos casi en el mundo futuro de Aldous Huxley, es decir, no tienes vida privada.
Con la nueva ley de asociaciones aumenta el control sobre unas entidades que hasta el momento venían operando en un campo de acción social muy importante. Evidentemente había ciertas trabas, pero no se exigía un exhaustivo control de sus actividades.
Las asociaciones de vecinos puras se crearon para atender al vecino. Desde ese punto de vista estamos hablando de una auténtica tragedia, porque ninguna de ellas está preparada para atender lo que pide la nueva ley. Una asociación de vecinos como la nuestra, que maneja al año un presupuesto que a veces no llega ni a 100.000 pesetas, ¿a dónde va? Sé que hay otras asociaciones de vecinos, que como piden subvenciones al ayuntamiento para hacer fiestas, al parecer escapaban en parte al control de Hacienda. Yo no sabía hasta dónde podía llegar ese tipo de subvenciones y me quedé asombrado al enterarme de que piden hasta treinta o cuarenta millones, y asombrosamente se los dan. Eso por lo visto no figuraba en ningún lado, ni cotizaba en ningún sitio, incluso hay quien maliciosamente piensa que alguien lo puede defraudar. Esto podría ser lo que justificase la nueva ley, no obstante, mucho me temo y conmigo otra mucha más gente, que hay un trasfondo de control político sobre un movimiento vecinal que en algunos casos es fuerte". ∆

María Alvarez
Coordinadora del Llar de Moceda de Pola de Siero.
"En general la gente le tiene bastante miedo a esta nueva ley, porque se planteó que iba a haber mucho papeleo y que se iba a controlar mucho más a las asociaciones. Realmente la mayoría de ellas funcionan "en plan cutre", casi nadie lleva los libros al día, y que se pusieran a controlar todo eso preocupó bastante. Pensamos que va a ser algo, más que nada, para las asociaciones que mueven mucho dinero. A las más pequeñas no les afecta, salvo que los libros habrá que tenerlos al día, y la contabilidad, que ahora es más complicada. Requiere un nivel de conocimiento más elevado y no todo el mundo tiene en las asociaciones alguien preparado. Antes con un libro de cuentas de entrada y salida bastaba, ahora hay que poner conceptos y adaptarse a los códigos de Hacienda. Por eso a la gente no le gusta la ley.
Lo que también preocupa a la gente es la cuestión de la responsabilidad civil, que recae completamente sobre el presidente y que puede influir en su patrimonio personal. Por eso creo que esta ley no va a influir a la hora de asociarse, sino a la hora de asumir cargos en la junta directiva. La mayoría de las asociaciones funciona con voluntariado y nadie quiere comerse la cabeza y estar tan preocupado. Por otro lado, sí que había asociaciones que realmente funcionaban como empresas y movían mucho dinero público. Pero aquí pasa como todo, para tener que presentar Declaración de la Renta tienes que tener más de dos mil euros de beneficios, y al menos a las asociaciones juveniles, que es con las que más he trabajado, esto no les afecta porque no mueven tanto dinero". ∆

Teresita Abascal
Presidenta de la Asociación de Amas de casa de La Argañosa.
"Pensábamos que esta ley había salido para las asociaciones grandes que no declaraban en Hacienda, pero es nacional y nos afecta también a las pequeñas asociaciones. No sé si con el cambio de gobierno cambiará algo, porque la ley es del año 2000 y se hizo vigente a partir del 26 de mayo de este año. Ahora te piden un libro de cuenta corriente, un libro de inventarios... Tenemos que gastar dinero otra vez en comprar otro libro de actas, que además tiene que pasar por el Registro Mercantil, y darnos de alta en un montón de lugares. Eso no es todo, porque cada tres meses tenemos que llevarlos a sellar otra vez, o pasar por los registros cada vez que hagamos una reunión. También tenemos un seguro, porque tiene que haber una responsabilidad civil. Y no sólo eso, ya que si hay algo mal recae sobre la persona que asume la presidencia. De momento nosotros hicimos los estatutos nuevos, y los tengo presentados, también dos de los libros que piden, pero nadie informa de cómo tenemos que tenerlos, porque en el ayuntamiento todavía no saben nada. En el Registro Mercantil le pregunté cuánto costaban los libros y me dijeron que no sabían, pero que la gente estaba sellando uno de actas, uno de socios y uno de cuenta corriente, sin embargo, nosotros tenemos en la lista de cinco. En resumidas cuentas, de información, nada. El futuro del asociacionismo lo veo muy difícil, sobre todo para las personas mayores, las asociaciones de la tercera edad, porque van a tener que pagar un asesor para que les lleve todo". ∆

Charo Marqués
Presidenta de la Asociación de Mujeres La Pimpana de Riosa.
"Pienso que esta ley está entorpeciendo el asociacionismo. Asociaciones pequeñas, como La Pimpana, que está formada por mujeres rurales, con un nivel cultural medio tirando a bajo y demás, nos encontramos con que además de pretender dinamizar nuestro entorno y luchar por la igualdad de sexos, tenemos que hacer frente a este montón de papeles y de trabas. Nosotros tenemos una cuota muy pequeña, no tenemos grandes subvenciones y ahora nos encontramos con que tenemos que pagar a un asesor fiscal para que nos lleve los libros, surge el miedo a que te venga una inspección y por tanto queremos tener todo en orden.
Es verdad que hay determinadas asociaciones sobre las que se necesita llevar un control, porque a lo mejor pretenden una cosa y luego realizan otra, pero en eso no pueden compararnos. Nosotros somos asociaciones pequeñas, sin ánimo de lucro. Y es que además, toda la responsabilidad repercute en la persona que está en la presidencia, que debe responder, llegado el caso, hasta con sus bienes. Si lo que intentan es acabar con el asociacionismo yo creo que lo van a conseguir. Creo que se tendrían que mirar los distintos tipos de asociaciones, porque el que lleven un control y un registro me parece muy bien, para que puedas luego acceder a distintas subvenciones. Pero sí que habría que tener modelos completamente distintos". ∆

Pelayo Prendes
Secretario General de las Juventudes Socialistas de Asturias.
"Lo primero que hay que señalar es que cuando se plantea la ley, como pasa con la LOGSE y con la LOU y con otras leyes del Partido Popular, no se negocia con quienes la van a padecer. No se cuenta en absoluto con las asociaciones a título individual, ni con el Consejo de la Juventud de España, donde se pueden ver representadas todas. De ahí ya se parte con un déficit. Luego, no se fomenta en absoluto el funcionamiento de las asociaciones y como consecuencia tampoco la participación de los jóvenes, sobre todo de las asociaciones juveniles. Creo que se podrían haber encontrado soluciones mucho mejores si se hubiese hablado con el Consejo de la Juventud de España. Seguramente se podrían haber alcanzado soluciones a temas como el que una asociación organice un macroconcierto y se lucre. Hay muchas asociaciones que sobreviven con muy pocos recursos y no se lucran en absoluto.
En lo que respecta a las asociaciones juveniles, Juventudes Socialistas de España entabla, con el cambio de gobierno, un diálogo con el Ministerio del Interior, que es de quien depende la ley y su ejecución, y en el Ministerio del Interior hay la intención de que la ley no sea aplicada en estos términos con la misma dureza a las asociaciones juveniles. Además, en el programa electoral del PSOE hay una propuesta, una ley de participación juvenil, que será donde se regule el funcionamiento de las asociaciones juveniles. En general, creo que habrá que reformar esta ley, porque no se pueden hacer leyes de espaldas a la realidad y que no fomentan la participación". ∆

Maite García
Presidenta de la Asociación de Vecinos San Ignacio de Loyola de Oviedo
"A nosotros en principio nos afecta mucho, porque no tenemos muchos fondos. Nuestros fondos los recogemos de la subvención que nos da el ayuntamiento, que nunca es mucho, y luego el dinero de cuotas que aportan los socios, que es poco también. De los libros que pide la ley orgánica, que son cinco, me sobran cuatro. Tres son los que veníamos haciendo y en estos me sobra espacio, porque no siempre tienes entradas y siempre tienes salidas; luego está el de socios y el de actas, pero lo demás no lo necesitamos para nada. Nosotros ya estamos controlados con los libros que tenemos. A mí me parece bien que lleven un control, por ejemplo, con las ONG grandes que mueven una cantidad de dinero importante, pero no con asociaciones vecinales, o de jubilados, que manejan cifras pequeñas. La junta directiva, además de tener que ir a solucionar problemas a diferentes organismos oficiales, se encuentra con la dificultad de que la gente cesa en el cargo porque no quiere complicarse la vida. Según la nueva ley te hacen responsable sobre todo lo que ocurra, te hacen tener un seguro de responsabilidad civil, y para una asociación sin ánimo de lucro, y con pocos ingresos, esto es un gasto más. La nueva ley de asociaciones tiene una cantidad de requisitos que para un trabajo retribuido está bien, pero para un trabajo voluntario, como es el nuestro, no. Partimos de la base de que hay poca juventud que quiera colaborar en esto, y son las personas mayores o de mediana edad las que se hacen cargo, gente que no tienen suficiente formación, o que no está de llevar libros. Ahora hay más complicaciones y dimiten casi todos. Información sí tenemos, porque las animadoras del Centro Cultural siempre ayudan, pero no se trata tanto de la información como del trabajo que da. ∆

Angel García González (Zepi)
Presidente Asociación Xunta Xente de Lugones.
"Aunque no haya leído la ley a fondo, sé que a grandes rasgos viene a endurecer más las condiciones y el control sobre las asociaciones. Vemos bien que haya ciertos controles en las asociaciones y que la gente asuma ciertas responsabilidades, pero por otro lado, llegamos a unos niveles en que son equivalentes ya a una empresa. En cierto modo es necesario que haya un mayor control. Se ha dado el caso de gente maliciosa que a lo mejor en una fiesta organizada se corta con un cristal y automáticamente piensa en sacar dinero de eso. Eso ocurre desgraciadamente y hay que defenderse.
Nosotros somos un grupo de gente que queremos unirnos, trabajar conjuntamente, desarrollar algún proyecto, dar otra visión y otras opciones a la juventud que no sea estar metidos en el bar. Que no nos pongan todo tan difícil porque al final la gente va a acabar dejándolo. Las autoridades deberían poner más facilidades, o aumentar un poco las subvenciones que hay, porque ahora por cualquier cuestión tienes que tener un seguro de responsabilidad civil, tienes que hacer una contabilidad, una declaración del IVA... Y sucede que el que sabe, a lo mejor no tiene tiempo para llevar la contabilidad y el papeleo de una asociación, y el que no sabe se ve obligado a ir a una asesoría. Y sin embargo, las subvenciones siguen siendo las mismas. Yo estoy convencido de que Hacienda no se va a meter con una asociación juvenil, o una cofradía de festejos, o una asociación que organiza una actividad sin ningún tipo de lucro. Sí lo haría con la persona que haga negocio a raíz de esto. Por ejemplo, a la hora de organizar una fiesta, hay que distinguir entre la gente que organiza el evento sin ánimo de lucro, sin más interés que el de actividad, y por otro lado, las empresas que prestan sus servicios a las asociaciones para el uso de estas actividades. Creo que ahí debería haber diferencias en el trato de Hacienda". ∆

"Que no nos pongan todo tan difícil porque al final la gente va a acabar dejándolo."