PRAVIA
Fértiles vegas y un paisaje de suaves montes caracterizan las tierras de
Pravia. Las aguas del Nalón, el Narcea y el Aranguín han modelado este concejo
llenándolo de vida y riqueza.
Fotos cedidas
por el Ayto. de Pravia
Un vergel
de aguas tranquilas
D esde la cima del monte Monteagudo
podemos comprobar el privilegio que disfruta este concejo del área central de
Asturias desde el que se accede en pocos minutos a las principales ciudades de
la región (Oviedo, Gijón y Avilés).
Mirando hacia el norte comprobamos su comunión con el mar a través de la
desembocadura del Nalón. Su proximidad es tal, que parte de sus tierras se
encuentran afectadas por la Demarcación de Costas a pesar de que el Cantábrico
no riegue de forma descarada sus tierras.
Mirando hacia el sur, la panorámica del concejo de Pravia nos muestra un
municipio de media montaña, cuya cota más alta es el pico Llan de Cubel, 678m.
Un paisaje verdiazul, de bosques y tierras de cultivo entremezclado con el
curso de sus caudalosos ríos. El núcleo de Forcinas es testigo de la unión del
Nalón y el Narcea. Este último, aunque es afluente, es también uno de los ríos
más importantes de Asturias por su extensión y amplio caudal.
La presencia de la trucha y el salmón en los cursos fluviales del concejo le
han aportado no sólo un motivo de divertimento sino una seña de identidad.
Pravia es salmonera por excelencia. Y próximamente el concejo disfrutará de un
museo dedicado a la pesca fluvial de Asturias, que a su vez forma parte de un
Parque Temático dedicado al salmón. Esta iniciativa estará financiada por
programas europeos y se llevará a cabo con otros concejos limítrofes.
La Villa de Pravia, a orillas del Nalón, es la capital del concejo y concentra
la mayor parte de la población del municipio. Su tradición comercial le ha
dado gran prestigio en la zona del Bajo Nalón como centro de servicios.
Un patrimonio digno de ver
La hilandera ve pasar los días desde lo alto, en la plaza de Sabino Moutas.
Esta escultura se halla enclavada en el punto de mayor interés
histórico-artístico de la villa de Pravia, donde se encuentran varias
edificaciones del s.XVII, muestra del poder civil y religioso de antaño. La
Colegiata de Santa María la Mayor, el Palacio de Moutas y las Casas de los
Canónigos, forman uno de los principales conjuntos del barroco asturiano.
La Iglesia de Santa María la Mayor posee un Cristo gótico, así como varios
retablos barrocos entre los que sobresale el del presbiterio, el llamado
Retablo Mayor, de la escuela de Antonio de Borja. También hay que resaltar el
órgano barroco, que precisamente acaba de ser restaurado y podrá volver a
deleitar los oídos de los vecinos del concejo. La Colegiata se comenzó a
construir en el año 1715 y se consagró en el 1727. Desde el interior de la
misma es posible acceder al Palacio de Moutas, antaño Palacio de Arango, que
conserva el escudo de los Cuervo-Arango entre dos leones, en el frente de la
fachada. Al otro lado de la plaza se encuentra la Casa de los Canónigos, una
serie de viviendas más modestas donde residían antiguamente los capellanes de
La Colegiata.
Retrocediendo en el tiempo
Con un poco de imaginación podremos visualizarnos en otras épocas. Una visita
al núcleo de Somao nos traslada a la cultura de la emigración que afectó a
Pravia, al igual que otros concejos asturianos. El concejo está sembrado de
numerosos palacios y casonas pero Somao destaca por su abundancia. Esta
localidad fue cuna de emigrantes que partieron en busca de fortuna y
regresaron agradecidos y con importantes fortunas. Muestra de ello son las
escuelas, el cine y el parque que construyeron así como varios palacios y
casonas indianas. Una visita a este lugar nos permitirá maravillarnos ante la
espectacularidad de edificaciones como la Casa de la Torre o Casa Amarilla que
es fácilmente reconocible por su color. Otros son el palacete de Solís, la
casa de Doña Basilisca, Villa Radis, o La Casona, que se halla acompañada de
un interesante mausoleo.
Pero si de algo están orgullosos los pravianos es de Santianes de Pravia. En
esta localidad está la muestra más antigua conocida de la arquitectura
prerrománica asturiana, la Iglesia de San Juan Evangelista (s.VIII). Fue el
rey Silo, casado con Adosinda, nieta de Pelayo, quien mandó construir esta
iglesia y quien trasladó su corte desde Cangas de Onís a Pravia, constituyendo
allí el centro político del entonces reino cristiano.
También en tierras de Pravia se cree que se hallaba la llamada Flavionavia, a
la que alude Ptolomeo en el siglo II después de Cristo. "Flavium avia", Flavia
porque era el nombre de la dinastía romana y Avia por el río Nalón. Al parecer
podría ser la capital del antiguo pueblo pésico que extendía sus dominios por
la zona centromeridional de Asturias en época prerromana.
Las leyendas y cuentos populares sazonan la historia de este concejo. Una de
las más representativas es la que ahonda en el origen del escudo que
representa al concejo. Al parecer un capitán praviano se disponía a cruzar un
río cuando vislumbró a un numeroso grupo de moros, y sobrevolando el cielo vio
a seis cuervos. Sin dudar consideró esto un buen presagio y atacó a los moros
hasta derrotarlos. De ahí el verso "aves de poca valía que del hambre sentís
pena, venid en mi compañía que de carne ajena o mía os haré la panza llena".
Posteriormente pidió al rey que le permitiera poner en su escudo de armas a
los seis cuervos que hoy día forman parte del escudo del concejo.
Feria de la faba, el kiwi y la miel
La villa de Pravia acoge a lo largo del año diversos certámenes que a su vez
son escaparate de la gran riqueza hortícola del concejo. La faba es el
producto más emblemático pero la generosidad de estas tierras se muestra
también en la calidad de sus hortalizas y frutas, de ahí que en ocasiones se
haya denominado al concejo como "La huerta de Asturias".
Uno de los certámenes más conocidos y en el cual podremos comprobar la calidad
de los productos pravianos es la denominada Feria de la faba, el kiwi y la
miel, cuya XVII edición tendrá lugar los próximos días 28, 29 y 30 de
noviembre.
De forma paralela a la feria tendrá lugar el Concurso Tradicional de fabada
para aficionados donde todos los que lo deseen podrán demostrar su buenhacer
en la cocina. También podremos contemplar una exhibición de mayado de fabes y
una muestra de platos elaborados con productos de la época a cargo de la
Asociación de Amas de Casa de Pravia.
Este certamen es un buen escaparate para los productos de la zona y se
complementa con unas jornadas gastronómicas que se llevan a cabo en varios
restaurantes de la zona. La faba de Pravia, de gran prestigio en la cocina
asturiana, es la principal protagonista de estas jornadas. Podremos apreciar
toda su calidad degustándola preparada de formas muy variadas, con el
tradicional compango, con almejas, callos, jabalí, etc. La miel y el kiwi
estarán presentes en el apartado de los postres para realzar también la
calidad de estos productos. ∆ |