Texto: Isabel Muñiz / Foto: NAN
Cristina
del Valle, ovetense afincada en Madrid, utiliza la música como un medio
desde el cual expresar su particular lucha. La construcción de un mundo
en el que estén presentes los códigos de la mujer le ha llevado a
participar activamente en la creación de una Plataforma de Mujeres
Artistas contra la violencia de género.
Ahora su nuevo trabajo en solitario "Apuntes generales del mundo" nos
revela que existe un concepto femenino del mundo, atractivo para hombres
y mujeres.
-¿De dónde nació tu
nuevo trabajo "Apuntes Generales del mundo"?
-Apuntes generales del mundo tiene que ver con una libreta que
me regaló una mujer gallega, Ana. Una mujer de treinta años, muy
delgadita, enferma de SIDA, que venía del mundo de la prostitución, y
está en una casa para acogida de mujeres prostitutas. Era muy admiradora
mía y le gustaba mucho mi trabajo, y quiso regalarme esta libreta donde
ella escribía poesía para inspirar mis canciones. Era de mil novecientos
cuarenta y nueve, y en la primera página ponía Apuntes generales del
mundo. Venían los ríos, los mares, los océanos, y a mitad de libreta
aparecía la vida de Ana en el año 2000, el día a día en una casa de
acogida, la lucha interna de ella por salir adelante. Yo quería que el
disco recogiera un poco los apuntes de gente, sobre todo de mujeres que
como Ana, nos hablan de la soledad, del rechazo social, de la falta de
humanización de un mundo con unos códigos que muchas mujeres no
compartimos. Y que muchas mujeres creemos que se puede construir otro
mundo desde la ternura, desde la no violencia, desde otra visión y otra
mirada del mundo que es la que creo que ven las mujeres.
"Muchas
mujeres creemos que se puede construir otro mundo desde la
ternura, desde la no violencia, desde otra visión y otra mirada
del mundo que es la que creo que ven las mujeres" |
-¿Qué es lo más atractivo de tu nuevo trabajo?
-Pues que tengo el privilegio de estar con autores como Pedro
Guerra, Tontxu, Rosana, Javier Andreu, Nacho Campillo, Toli Morilla que
han hecho canciones para mí. El disco habla enteramente del universo de
lo femenino. Y la mayoría de los que han hecho estas letras son hombres
y son letras maravillosas donde hablan de esos códigos de lo masculino
que no están funcionando y que tiene que venir un aire nuevo, ese lado
femenino que tiene que aportar al mundo algo muy diferente. Hablan del
universo de lo femenino como algo deseable, como algo que tiene que
venir, como una esperanza, como ese renacimiento. Es mucho más poético
que el anterior, las formas son mucho más dulces y musicalmente está muy
equilibrado. Ha sido un trabajo bastante relajado, cómodo y fluido.
-¿Cómo es ese mundo de las mujeres que no figura, que no
sale a la luz?
-Es un mundo donde se tejen constantemente redes de diálogo,
redes de amistad, de discusión y debate, redes de no jerarquización,
redes sobre todo vivas que transforman. Yo creo que a las mujeres, el
hecho de tener la capacidad de dar vida, las relaciona íntimamente con
la naturaleza en todo aquello que tiene que ver con la vida, con lo que
transforma, con la evolución, con lo vital. Y eso es incompatible con la
violencia y la imposición.
-¿Qué significa para ti ser mujer ahora mismo?
-Yo creo que significa mucho. Significa una forma de ver la
vida, una manera de ver el mundo y de aportar cosas a este mundo. Yo
creo en el feminismo de la diferencia. Es decir, que hombres y mujeres
somos diferentes desde esa visión que tenemos del mundo, desde esos
códigos desde los que entendemos y sentimos y aportamos al mundo, pero
sí creo en la igualdad de derechos, desde ese respeto a la diferencia.
El problema es que no tenemos referencias en la historia, porque se ha
invisibilizado a las mujeres y al trabajo de las mismas. Yo creo que es
fundamental para las mujeres el tener conciencia de género. Cuando una
mujer tiene conciencia de su sexo y de lo que eso significa, tiene un
arma en su poder que es infalible. Porque cuando una mujer tiene ideas
es imposible la marcha atrás.
"Cuando
una mujer tiene conciencia de su sexo y de lo que eso significa,
tiene un arma en su poder que es infalible. Porque cuando una
mujer tiene ideas es imposible la marcha atrás" |
-¿Por dónde crees que pasa la libertad de la mujer?
-Pasa por la lucha. Hoy por hoy seguimos teniendo discriminación
no sólo en este país, sino en el mundo entero. La pobreza y la violencia
tienen rostro de mujer. Creo que la gran revolución de las mujeres ha
sido la feminización de las relaciones interpersonales.
Estamos viendo un mundo en crisis, por una forma de desarrollarse
totalmente errónea, donde los conflictos se resuelven con la violencia.
La democratización de las relaciones, yo la cuestiono muchísimo, y todo
esto pasa por una feminización en la política. Es fundamental la llegada
de las mujeres al poder para que aparezcan otras visiones y otras formas
de ver la política en la que las mujeres nos sintamos representadas y
aportemos esos otros códigos, que comentaba, del diálogo, de la amistad,
de los afectos, de la expresión, de la sensibilidad, de la no castración
del sentimiento. Solamente cuando la mujer llegue al poder, será la
única manera en la que podamos mostrar esas otras maneras, y el mundo
funcionará con otros códigos.
-Siempre dices lo que piensas. ¿Resultas incómoda?
-Sí, por supuesto. Es obvio que, muchas veces, a las personas
que no somos políticamente correctas se nos aleja de muchos medios. Yo
decidí irme de una historia que dentro del terreno de la música era muy
rentable, y donde tenía una posición muy cómoda. Decidí irme, asumiendo
el riesgo que corría, y el posicionarte hace que la gente se ponga a
favor o en contra, y que en determinados grupos o sectores no entres. Es
el precio que se paga, pero para mí es absolutamente necesario. No me
importa que en determinados espacios no tenga cabida, para mí es mucho
más vital la coherencia en la vida que otro tipo de rentabilidades.
-Recientemente la Plataforma de Mujeres Artistas contra
la violencia de género acaba de publicar un nuevo trabajo "Volver a
empezar", en el que participan muchas mujeres. ¿Crees que todo artista
con un reconocimiento público, debería adoptar una actitud comprometida?
-A mí me encantaría. El otro día cuando estuve en los premios de
la música, me gustó muchísimo cuando una de las mujeres de Dover, salió
y dijo: "Señora ministra, escuche usted a los estudiantes". Yo respeto,
no doy lecciones a nadie, y odio profundamente que tengamos que seguir
ninguna regla de nada, ni cumplir ninguna normativa, pero cuando la
gente se compromete desde la profesión, me parece muy importante. Creo
profundamente en la libertad de cada individuo, y cada uno hace con su
vida lo que desea y quiere. Y uno de los momentos más agradables y en el
que más orgullosa me sentí de pertenecer a esta profesión, fue cuando la
Plataforma de mujeres artistas contra la violencia de género decidimos
salir adelante y ejercer de mujeres y ciudadanas. Cuando empezamos a
juntarnos, cuando conversábamos, cuando discutíamos, y luego íbamos
juntas a las acciones. Hubo momentos muy especiales, con mujeres, como
la chica de Dover, como Mari Angeles de Camela, como Malú, como Marta y
María de Ella Baila Sola, o como la cantante de Presuntos, Soledad
Jiménez. Entonces me di cuenta de que hay gente estupenda en la
profesión y que sólo hace falta que haya un motor que de alguna manera
suelte una historia, y allí están todas. Yo creo que todas ahí, desde la
amistad y desde el diálogo, estábamos haciendo política.
"Hay que
soñar con un mundo mejor y desde los sueños se pueden cambiar las
realidades que tenemos" |
-Hay una doble moral social que hace que no se mire de
frente a temas como la prostitución. ¿Cuál es la auténtica prostitución?
-La auténtica prostitución es la que se ejerce desde la inmoralidad.
Es decir cuando se permite que los seres humanos vivan en situaciones
bastantes degradantes, es una prostitución ideológica. No se puede
permitir una política donde se invierta en grandes infraestructuras
arquitectónicas cuando tenemos cuartos mundos en nuestras ciudades;
cuando hay problemas tan graves y tan obvios que están causando también
la muerte de muchas mujeres. La verdadera prostitución está cuando se
hace oídos sordos a una realidad y uno deja que las cosas sigan
ocurriendo.
El colectivo de prostitutas por el que yo siento un especial afecto,
está viviendo aquí en Madrid unas situaciones gravísimas. Hace poco una
mujer fue apuñalada y robada por tres clientes. La apuñalaron y ni un
solo medio de comunicación contó nada de lo que le había pasado a esta
mujer.
Por otro lado, mientras nuestras fronteras permanecen cerradas a las
aspiraciones laborales de las mujeres emigrantes, casualmente permanecen
abiertas a las bandas de tráfico de mujeres. Yo trabajo en prisión, y
con presos en Valdemoro, y algunos me comentaban que ahora a las redes
de narcotráfico les resulta mucho más rentable traficar con mujeres,
porque tiene menos riesgos. Se está produciendo un incremento salvaje de
este tráfico de mujeres.
Y esto se sabe y se está ocultando. Aquí se está haciendo oídos sordos.
Yo creo que es una desvergüenza política, una realidad crudísima que a
todos nos cuestiona como democracia, como políticos y como ciudadanos.
"Cuando la
gente se compromete desde la profesión, me parece muy importante"
|
-¿Crees que la razón de que no se haga tiene que ver con
la moralidad española?
-Sí, tiene mucho que ver con la doble moral, pero como con todo.
El mismo problema lo hay en prisión. Yo he hablado con los presos, y por
un lado no se quiere reconocer que en prisión hay tráfico de drogas. Y
hablábamos de por qué no se dan jeringuillas, ya que el 80% de los
presos que entran en prisión, salen con SIDA. ¿Por qué esto no se evita
regalando jeringuillas?, cuando hay un mercado negro en el que una
jeringuilla vale diez mil pesetas. Esto se sabe, pero las instituciones
dicen que no pueden reconocer eso porque sería reconocer que en prisión
la gente se droga. ¡Señores, pues atajemos las cosas asumiendo las
realidades! En política no valen de nada las buenas intenciones, valen
los resultados.
Pero en España la doble moral y la hipocresía juegan un papel muy
importante. Los ciudadanos y ciudadanas muchas veces, tampoco escuchan
una visión de las cosas. Hay una política mediática muy descarada. Las
cosas se enfocan de un solo lado y yo creo que tenemos que ser críticos
y cuestionar todas las informaciones. Y desde luego conocer las
realidades, porque muchos de estos abusos se producen porque se da una
imagen que está desdibujada de esa realidad y crea un rechazo social
hacia una realidad desde el desconocimiento.
-¿Por qué se prefiere mirar hacia otro lado?
-El tráfico de armas, la prostitución y el tráfico de drogas,
son los tres ingresos más importantes en la economía de un país. Hay una
política de intereses con un trasfondo muy profundo, y esto está
denunciado por todas las ONGs. Obviamente no interesa dragar en estos
temas. Da muchos más beneficios el narcotráfico que si la droga fuese
legal y asequible a todo el mundo, que es lo lógico y lo que se pide en
muchos estamentos. Evidentemente no se hace porque no interesa.
-¿Qué cosas encienden a Cristina del Valle?
-El desconocimiento de la gente. Cuando oigo a la gente juzgar a
los demás, sobre todo a grupos como los presos o a las mujeres
prostitutas e incluso las mujeres maltratadas. Me enciende que desde la
ignorancia hagamos juicios de valor que hacen tanto daño social. Me
enciende la manipulación de la información y que políticamente a los
ciudadanos los consideren imbéciles. Me enciende la hipocresía,
muchísimo.
"La
verdadera prostitución está cuando se hace oídos sordos a una
realidad y uno deja que las cosas sigan ocurriendo" |
-¿Qué es lo que te estimula para seguir luchando?
-Me estimula el que yo creo que hay que soñar con un mundo mejor
y desde los sueños se pueden cambiar las realidades que tenemos. Me
estimula el movimiento antiglobalización, que es una esperanza a un tipo
de lucha desde la diversidad y desde la libertad.
Para mí es muy importante el reavivar el movimiento ciudadano. Creo que
cuando las personas quieren información e ideas, son imparables y se
pueden hacer cosas. Desde las pequeñas acciones y desde la suma de esas
acciones en pequeñas dosis se pueden conseguir los grandes cambios. Yo
al menos he encontrado una manera libre, independiente y activa de
trabajar en cosas que ves, que son palpables y que tienen un sentido.
-¿Te sientes asturiana?
-Sí. Y creo que cuando más asturiana me he sentido en mi vida
fue el día veintitrés de noviembre, cuando todos los medios asturianos
pararon en solidaridad y en denuncia por las sesenta y tres mujeres
asesinadas. Yo estaba en Granada no podía estar en Asturias y a través
del teléfono pude oír los latidos de ese minuto de silencio y luego
intervenir hablando de la situación actual. Fue uno de los momentos más
emotivos, el sentirme orgullosa de una iniciativa absolutamente
rompedora y creo que ha sido la primera vez que todos los medios han
parado juntos. ∆ |