| |
SUPLEMENTO ASTURIAS
PARROQUIA RURAL DE
SOMAO
La historia de Somao se asemeja a la de un
cuento de hadas. Una pequeña pero querida aldea de la cual marcharon sus
habitantes en busca de fortuna. Y a su regreso no se olvidaron de ella.
|
Texto: I. M. / Fotos: Fer
Heredera del éxito
Grandes palacios y varios edificios públicos son el legado de los
indianos originarios de Somao. Marcharon en momentos difíciles con la ilusión
de hacer grandes capitales. Cuba acogió a gran parte de ellos aunque hubo
otros destinos en "las Américas". El regreso de algunos de ellos trajo el
éxito a su pueblo natal.
Bellos palacios y casonas, cuidados jardines y varios edificios públicos
fueron la prueba de las grandes fortunas conseguidas. Ahora Somao es uno de
los pueblos más emblemáticos del concejo de Pravia y su sola mención sirve
para el recuerdo de aquellos hombres valientes que se arriesgaban a cruzar el
charco en busca de nuevas oportunidades.
Somao o Somado, como aparece en varias indicaciones, se halla en el extremo
norte del concejo de Pravia, lindando con el municipio de Muros. Es el núcleo
principal de la Parroquia Rural que lleva su mismo nombre, una Parroquia con
identidad propia, y cuyo funcionamiento, aunque a menor escala, es similar al
de un ayuntamiento en funciones. Su ubicación es privilegiada, apenas un
kilómetro lo separa de la costa y los vecinos con sólo cruzar la carretera
nacional N-632 acceden a la villa de Muros, localidad a la cual se sienten
ligados y en la que son atendidas sus necesidades sanitarias.
Son aproximadamente 400 habitantes los que se distribuyen habitualmente por
los diferentes barrios de la Parroquia: La Azafil, La Cruzada, La Eta,
Grandamena, El Marciel, La Marroquina, El Palomar, La Peña, La Reigada,
Santolaya y finalmente Somao. Esta población se duplica en periodos estivales,
debido a que gran parte de las casas y casonas son viviendas de segunda
residencia y recreo. Prácticamente todas las casas se han rehabilitado y es
difícil encontrar una casa libre en alquiler. La escasez de terreno edificable
es consecuencia de un plan urbanístico especial, y éste ha hecho de Somao un
lugar privilegiado para construir y vivir.
Desde esta tierra, la vista sobre la desembocadura del río Nalón es
espectacular. Lo saben quienes acuden cada fin de semana al área recreativa de
La Peñona o a Monteagudo. Vienen en busca de naturaleza y la enorme masa
forestal que alberga la parroquia, unido a su cercanía a la costa reúne las
mejores condiciones para pasar una jornada de ocio.
La gran desconocida
Las Parroquias rurales adquieren la personalidad jurídica un 20 de
noviembre bajo la ley 11/1986. Anteriormente eran conocidas con el nombre de
Entidades locales menores y actualmente son parroquias rurales, aunque se
espera que próximamente varíe esta denominación, debido a que en ocasiones se
les confunde con las parroquias de carácter eclesiástico.
En España no es una figura muy conocida. Existen parroquias en tan sólo tres
comunidades autónomas: Galicia, Cataluña y Asturias, donde hay treinta y nueve
parroquias pertenecientes a diferentes concejos.
Generalmente se crean en municipios de gran extensión, en zonas alejadas de la
capital del concejo que a su vez tienen núcleos de población importantes. Este
es el caso de Somao, que alejado de la capital de Pravia, se constituye como
un núcleo independiente con sus propias competencias.
El origen de esta Parroquia es anterior a la promulgación de la ley que la
regula, por eso resulta difícil precisar el momento exacto de su creación, que
se pierde en el tiempo. Lo que sí es conocido es que fue hacia el año 1900
cuando se formó en este lugar una colonia residencial ligada a la actividad
constructiva de muchos emigrantes a América que retornaban a su tierra natal.
A su regreso promocionaron numerosas obras de embellecimiento y utilidad
pública, como el parque, la Iglesia, la escuela o el cine, entre otros.
La Iglesia y el parque constituyen el núcleo principal de la Parroquia Rural
de Somao. Allí se encuentra el Centro Social, que dispone de cafetería, una
sala de juegos, una biblioteca, un salón de actos y las oficinas del
secretario y el alcalde-presidente de Somao. Este edificio, de tres años de
vida, es el alma de la Parroquia. Es el único centro de reunión y ocio
existente y en él se desarrollan actividades de tipo administrativo, cultural,
etc. Como novedad y muy preciada, dentro del Centro Social se halla el
Telecentro, un lugar donde los jóvenes pueden acceder a Internet gracias a la
instalación de cuatro ordenadores conectados en red. Su importancia radica en
que no existe actualmente parroquia rural en Asturias que goce de este tipo de
servicios, y debido a la escasez existente, hay una gran afluencia de gente de
los alrededores que disfruta del Telecentro.
Las áreas recreativas de La Peñona y de Monteagudo también convocan a un gran
número de visitantes, especialmente los fines de semana. La Peñona, de gran
extensión cuenta con quince parrillas con sus mesas correspondientes, un bar,
un acceso muy bueno y un amplio aparcamiento. Monteagudo es un área recreativa
de menor tamaño pero las vistas sobre la desembocadura del Nalón son realmente
impresionantes
La
huella indiana
Las casas de los indianos reflejaron el esplendor de esta época, tanto
reformando las casas populares, como construyendo mansiones y palacios
rodeados de exóticos jardines. En el caso de estas últimas destacan la Casa de
la Torre o Casa Amarilla, obra de Manuel del Busto en 1912, a imitación de
otra perteneciente al Marqués de Muros. Se denomina así por la esbelta
torrecilla angular rematada en chapitel. También hay que destacar La Casona,
diseñada en estilo Sezession por el arquitecto García Nava. Cuenta con una
gran escalinata y tres de sus fachadas se hallan rodeadas por galería. Dentro
de la finca se construyó el panteón de Gabino Alvarez, propietario de la casa.
La Villa Radis, un antiguo edificio reformado o el Palacete de Solís (1910),
de estilo francés, así como la casa de Doña Basilisca, son otros ejemplos de
una arquitectura próspera.
La existencia de lavaderos y numerosas fuentes, la mayor parte de la década
del 1890 se debe también a la ayuda de los indianos. La restauración de estas
fuentes y su cuidado es una de las asignaturas pendientes y para la cual la
Parroquia ha solicitado la ayuda del Principado. |
| |
|