Roberto Sánchez Ramos
Portavoz del grupo Municipal de IU en el Ayto. de Oviedo.
"Yo casé a una pareja de homosexuales cuando aún no había ley, evidentemente. De alguna manera sirvió para provocar una situación como la que tenemos hoy jurídicamente. Yo creo que la felicidad la puede proporcionar cualquier tipo de pareja, homosexual o heterosexual. Cualquier problema jurídico que se trate de imponer, incluida la adopción de niños, es un pretexto para no creer en la auténtica libertad.
Tengo la impresión, aunque no la conozco, que la ley no pone ninguna traba al matrimonio homosexual -pueden comprar viviendas, hacer declaraciones patrimoniales- pero sí que pone trabas a lo emocional y a lo sentimental. ¿Quién puede imponer eso? Yo creo que debe estar en función de la libre voluntad de las personas. No cabe duda de que después de veinte siglos de historia sigue habiendo imposición de carácter religioso, cuestiones que se han convertido en auténticos tabúes sin que nadie nos haya dado una explicación, ni siquiera teológica, de por qué una pareja de dos hombres o de dos mujeres no pueden tener una felicidad en el sentido más amplio de la palabra. Yo creo que esto tiene que ver con la doble moral tanto de los legisladores como del gobierno, y por tanto yo me muestro favorable a que estas parejas puedan adoptar niños.
No cabe duda de que la pareja tradicional, aquel esquema de "contigo hasta la muerte", se ha roto en mil pedazos. Hoy aparece una nueva realidad social y lo que tienen que hacer los representantes del pueblo es recogerla y ponerla en un papel". ∆

"La pareja tradicional se ha roto en mil pedazos. Hoy aparece una nueva realidad social".

Maite Cuevas González
Responsable del área de Política Social de UGT-Asturias.
"Desde la UGT estamos por supuesto por el tema de la igualdad en todos los aspectos, tanto hombres y mujeres como homosexuales o heterosexuales. Consideramos como principio que todas las personas tengan los mismos derechos. Hay una serie de trabas puestas por la legislación nacional en cuanto a adopción de niños, que todavía no está aceptada en el caso de las parejas homosexuales. A nivel regional no pudo llegarse al tema de adopción, pero se llegó al acogimiento, que nosotros desde luego valoramos positivamente y que es un paso más de cara a lograr la plena igualdad de derechos tanto de parejas de hecho heterosexuales como homosexuales.
Consideramos que debe terminarse ya con los tabúes que había, ir cambiando totalmente el sentido de familia, porque hay multitud de fórmulas diferentes: familias monoparentales, familias homosexuales, parejas de hecho... Y a todas tiene que llegar la información en cuanto a herencias, protección social, la posibilidad de cobrar las prestaciones, de cobrar las jubilaciones, etc.
En el Consejo de Bienestar Social estuvimos intentando llegar por lo menos a equiparar el tema de parejas de hecho a comunidades como Cataluña y Navarra, donde el tema está más avanzado, pero ahí tienen una legislación foral diferente con lo cual el resto no podemos de momento ir más allá de lo que la propia ley nacional permite. Nosotros valoramos positivamente el paso dado por el gobierno regional, en el sentido de que ha avanzado lo máximo permitido por la ley nacional. Creemos que se llegó a todo lo que se puede llegar sin rozar la ilegalidad. Queda otra parte, que no es tanto la legalidad como la voluntad política tanto del gobierno regional como de los municipios, es decir, que una cosa es aplicar la ley y otra es dar un paso más allá en cuanto a sensibilizar a la gente y romper tabúes. Por otra parte, son las personas implicadas, las que viven más directamente el problema de la discriminación, los que nos tienen que orientar y demostrarnos con hechos reales de la vida cotidiana la discriminación que hay.
También es importante que a nivel tanto regional como municipal haya otros tipos de ayuda, de prestaciones, y sobre todo una sensibilización de la sociedad en cuanto a los temas de igualdad de cualquier tipo, sin hacer ninguna distinción por raza, sexo o por supuesto orientación sexual". ∆

"Creemos que se llegó a todo lo que se puede llegar sin rozar la ilegalidad".

Alberto Hidalgo
Presidente del MPDL en Asturias.
"Sí estoy de acuerdo absolutamente en lo referente a los derechos humanos fundamentales; sin duda, tajantemente sí. Pero en el caso de la adopción o acogimiento de niños, estos derechos implican a otras colectividades y habrá que velar que los derechos de unos no conculquen el derecho de los demás, fundamentalmente de las criaturas que están implicadas, mediante las restricciones correspondientes.
Yo, en principio, estoy de acuerdo en la cuestión genérica de que las parejas homosexuales deberían tener el mismo derecho a vivir una vida afectiva, a su propia realización de la sexualidad, a tener libertad de culto, libertad religiosa, libertad de pensamiento... Todos los derechos humanos fundamentales. Sin embargo en el tema de la procreación entramos en un terreno más complicado. Una pareja heterosexual puede tener habitualmente descendencia por procedimientos intersexuales ordinarios, sin más aparatos que los que la naturaleza proporciona. Además, hay otros procedimientos donde están implicadas las tecnologías, como por ejemplo la fecundación in vitro. Esas nuevas tecnologías son posibilidades que no existían hasta hace un tiempo. Abren nuevos problemas y planteamientos jurídicos y no se puede establecer un principio demasiado genérico, ignorando el caso particular.
Por ejemplo, en temas de fecundación in vitro, si una mujer tiene un hijo de soltera tiene el derecho que le garantiza la ley a mantenerlo como hijo suyo, supuesta su capacidad. Pero cuando se trata de una adopción, existen una serie de trámites burocrático-jurídicos que la dificultan incluso para las parejas heterosexuales; de hecho la adopción por parte de individuos solos es muy difícil, por no decir imposible. Yo creo que lo mismo que ocurre con el caso de los individuos, que se les exigen unas características adicionales para garantizar una crianza normal de la descendencia -aunque habría que definir ese término "normal"-, de igual manera podrían establecerse restricciones en ese ámbito, las mismas que existen con respecto a los demás ciudadanos, pero no más". ∆

"Habrá que velar que los derechos de unos no conculquen el derecho de los demás, fundamentalmente de las criaturas que están implicadas".

Alberto Rubio
Secretario general de CC.OO. de Asturias.
"No me cabe la menor duda. Nosotros en nuestras propias reivindicaciones estamos estimulando eso, porque me parece lógico y porque no necesariamente la pareja tradicional garantiza aquello que en otros dice que no se garantiza. Yo creo que en el momento en que existe una pareja y existe una convivencia, existe un entorno familiar. Me parece que hay cierta ñoñería y una hipocresía muy grande respecto a estas cosas, sobre todo respecto al mundo gay, al mundo de las lesbianas, al mundo de las parejas homosexuales. Yo creo que existe mucha hipocresía y que está siendo positivo que algunos personajes "salgan del armario", aunque es una expresión que no me gusta nada, porque parece que es bueno que se empiece a hablar de esto.
Como siempre la sociedad va bastante por delante de los que legislan. La ley del Partido Popular se quedó absolutamente corta. Yo diría que más fruto de la ñoñería que impregna a la derecha habitualmente que de una necesidad social que ya existe". ∆

"Me parece que hay una hipocresía muy grande respecto a estas cosas".

Julián Alonso
Presidente de Xente Gai Astur (XEGA)
"La ley autonómica nosotros la valoramos muy positivamente, porque es un avance en el reconocimiento de nuestros derechos, pero es una solución parcial desde el ámbito autonómico que no soluciona todas las discriminaciones jurídicas. Para ello necesitaríamos una ley de ámbito estatal que reconociera el matrimonio civil. Nosotros estamos luchando por la plena igualdad de derechos y lógicamente estamos totalmente de acuerdo con que se equiparen nuestros derechos con los que la ley reconoce a las parejas casadas mediante matrimonio. Pero no hay que confundir esto con la ley de parejas que no reconoce ni muchísimo menos la igualdad de derechos.
Nosotros hemos valorado muy positivamente la iniciativa del Principado, primero porque es un avance concreto; segundo, porque reconoce el carácter afectivo de las uniones entre parejas del mismo sexo; tercero, porque reconoce que son uniones familiares; y cuarto, porque recoge el derecho de acogimiento para menores. Para nosotros esto también es muy importante, porque contribuye a desmontar un poco el tabú social existente con respecto a que las parejas de gays y lesbianas no seríamos parejas idóneas para educar a menores". ∆

"Es un avance en el reconocimiento de nuestros derechos, pero no soluciona todas las discriminaciones jurídicas".