Hermosa y
poderosa en ese momento íntimo, la fotografía es de Simone de Beauvoir, en
una instantánea tomada en Chicago en 1952. Sobreimpresionado, un lema: "Simone
de Beauvoir, la scandaleuse" |
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FEBRERO 2008
CENTENARIO DE SIMONE DE BEAUVOIR
POR ISABEL MENENDEZ
Me
sorprende el inicio del año en Francia donde un cartel en un quiosco
llama mi atención. Es una ampliación de la portada de la prestigiosa
revista "Le Nouvel Observateur". Junto a una pequeña instantánea de la
recién asesinada Benazir Bhutto, una gran fotografía en blanco y negro
ilustra el primer número del año. Es una mujer desnuda que, de espaldas
al objetivo fotográfico y delante del lavabo, recoge sus cabellos
después de darse un baño. Hermosa y poderosa en ese momento íntimo, la
fotografía es de Simone de Beauvoir, en una instantánea tomada en
Chicago en 1952. Sobreimpresionado, un lema: "Simone de Beauvoir, la
scandaleuse". "Le Nouvel Observateur" dedica su primer dossier del año a
Beauvoir en el centenario de su nacimiento; el 9 de enero, ella hubiera
cumplido cien años.
Elegir una fotografía del cuerpo desnudo de una de las más importantes
pensadoras que ha dado el feminismo no deja de ser paradójico, pues
podría parecer una pequeña venganza patriarcal, pero quizá lo que
buscaba la publicación era, precisamente, dar cuenta del proyecto vital
autónomo, libre, y por encima de las convenciones de su época que eligió
la filósofa.
Su país natal se ha dedicado a recordarla estos días. En la Universidad
de París, un impresionante coloquio internacional se consagró a su
figura, bajo la dirección de Julia Kristeva, mientras las televisiones
galas ofrecían especiales sobre la autora. También se han editado varios
libros, entre los que destaca el que ha escrito Danièle Sallenave
("Castor de guerre") y "Écrire la liberté", de Sylvie Le Bon de Beauvoir,
la joven que adoptó tras la muerte de Sartre; así como una selección de
DVDs, en la colección "Monografías de escritores" que ofrece
documentales sobre Beauvoir y el feminismo.
La mayoría de reportajes, numerosos estos días primeros del año,
mencionan la importancia que tuvieron sus escritos para la liberación de
las mujeres, sobre todo el imprescindible "El segundo sexo" aunque
dedican más tiempo a recoger aspectos de su vida y sus relaciones
amorosas, especialmente la que mantuvo con el filósofo Jean Paul Sartre,
un "amor necesario" que diseñaron bajo un "pacto amoroso" que permitía
la existencia de otros amores "contingentes". Entre ellos, el que
Beauvoir mantuvo con Nelson Algren, del que se enamoró apasionadamente.
Frente a algunas críticas sobre la supuesta dependencia amorosa en ese
idilio, dice el profesor Bill Savage, de Chicago, que el amor que
Beauvoir tuvo con Algren no traicionó en absoluto su pensamiento de "El
segundo sexo" puesto que en esa relación ella nunca fue objeto.
Otra prestigiosa revista, "Le Magazine Littéraire" también le dedica en
enero su portada y su dossier, con firmas de la importancia de Julia
Kristeva, Benoîte Groult o Élisabeth Badinter y donde se incluye un
avance del libro "Cahiers de jeunesse" que se pondrá a la venta en
marzo. Podemos leer las palabras de Beauvoir que, más o menos dicen lo
siguiente: "La vida es bella por todos los bellos cuadros que los
hombres han pintado, los maravillosos libros que han escrito, el
pensamiento y los sistemas que han construido, es bella por la
inteligencia y la sensibilidad que viven, el sol de los días calientes,
y el fresco de las mañanas un poco grises, bella por los camaradas y
amigos más profundos". Coincide con las palabras que, sobre ella, ha
dicho Claude Lanzmann, otro amor con el que mantuvo una larguísima
relación, que duró hasta el final de su vida: "nunca tuve la impresión
de vivir con un icono. Ella era la menos austera de las mujeres. Alegre,
divertida". Feliz aniversario Simone. § |