ENERO 2007
¿Se
puede caer mas bajo?
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Me pregunto cómo es
posible que no exista ningún juez en este país que proceda para
llevar a los tribunales a este despreciable individuo como
responsable de, al menos, las víctimas españolas que dejaron en Irak
su vida o en el 11-M. |
¿Asqueroso,
es la palabra? ¿Vergonzoso? ¿Ultrajante? ¿Indignante? No sé, puede ser
cualquiera de ellas, todas juntas y más.
Me refiero, evidentemente, a la "confesión" de Aznar, al reconocimiento
de que no había armas de destrucción masiva en Irak.
O sea, no había razón para iniciar la guerra. O sea, fue y es una guerra
ilegal. O sea, mintieron todos, Bush, Blair, Powell y él. Sí, nos
mintieron a todos. Y aunque ya lo sabíamos en aquel momento, porque los
observadores de la ONU habían dicho que no había nada, la forma en que
ahora se retractan de su "error" es indignante, porque siguen burlándose
del ciudadano, porque en este tiempo transcurrido han muerto miles de
inocentes, porque ha habido un 11-M por el medio donde el pueblo español
pagó muy cara la decisión de su gobierno de meter a España en la guerra,
porque Aznar "confiesa" ahora a hurtadillas, casi a escondidas, ante un
auditorio de fanáticos que aplauden su confesión, porque Aznar hace su
confesión con la misma chulería que le caracterizó siempre y que le
convirtió en un engendro de lo que debe ser un hombre público, incluso
una persona con dignidad y honor.
Pero tal vez lo más ultrajante es que los que le apoyaron a muerte
cuando, de la mano de Bush, nos metió en una guerra ilegal, ahora dan
lecciones de moral a diario a los españoles, de legalidad, de honestidad
política y cívica.
Es una auténtica mierda que los españoles no podamos llevar a los
tribunales a quienes nos han engañado consciente e intencionadamente. No
por confusión o ignorancia, no, CONSCIENTE e INTENCIONADAMENTE. Esa es
la gran diferencia.
En los EE.UU. ya ha sido denunciada públicamente la manipulación previa
de informes, de datos y de argumentos para convencer al mundo que había
que invadir Irak.
Aquí, y a escondidas, Aznar nos dice de forma sarcástica y burlesca que
"tengo el problema de no haber sido tan listo de saberlo antes". O sea,
ahora reconoce que es tonto.
Me pregunto cómo es posible que no exista ningún juez en este país que
sienta la misma indignación que sentimos los que dijimos No a la guerra,
y que proceda para llevar a los tribunales a este despreciable individuo
como responsable de, al menos, las víctimas españolas que dejaron en
Irak su vida o en el 11-M.
Y me pregunto qué catadura moral tienen los que le arroparon en aquel
momento, como parte de su gobierno, y que hoy siguen utilizando la misma
estrategia, o sea, mentir, insultar, falsear datos, y esconder sus
miserias bajo una sonrisa deleznable y una chulería que raya en lo
esperpéntico.
Aznar tiene, entre otras, dos cosas de las que arrepentirse algún día y
pagar por ellas. Una, haber metido a España en una guerra ilegal contra
la voluntad del pueblo español. Otra, haber criado una camada de zombis
a su imagen y semejanza, un grupo de enfermos, obsesionados con el
poder, que sólo saben gruñir y morder, y también babear cuando su mentor
se digna a aparecer en público para dar un recital de chulería, de
hipocresía y dejar claro que su "reino" no es de este mundo, que está
más allá del bien y del mal, y, de paso, reírse de la justicia y de los
españoles, sobre todo de aquellos que sufrieron el 11-M las
consecuencias de haber colaborado con el psicópata de Bush en una guerra
injusta y salvaje, como el tiempo se encargó de demostrar.
Ahora parece que no pasó nada, que todo es cosa del pasado, pero. ¿En
qué historias nos meterán los fanáticos de Aznar si vuelven al poder?
Es más. ¿Otorga el poder carta de libertad a todo aquel que lo posea
temporalmente para hacer y deshacer sin tener que rendir cuentas al
final? ¿Es eso democracia?
Si un gobierno mete a su país en una guerra injusta y luego se demuestra
que, efectivamente, era ilegal. ¿No está obligado a pagar por ello?
Es más. ¿Pueden esos mismos individuos aspirar a volver a gobernar
después de haber mentido y provocar con sus mentiras montones de
víctimas inocentes?
Si es así, y evidentemente lo está siendo, ¿qué futuro estamos
construyendo? ¿Por qué alimentamos la esperanza de acabar con el
terrorismo? ¿Cuántas justicias existen en este país?
Tiene Ud. razón Sr. Aznar, Ud. no era tan listo cuando declaró la guerra
a Irak, pero sí lo suficiente como para saber que nunca le condenarían
por ello.
Ud. conoce bien el terreno que pisa./
MAC |