-El motivo aducido para el embargo es la llegada al poder de Hamás. ¿No fueron unas elecciones democráticas?
-Las elecciones legislativas organizadas por la Autoridad Palestina el 25 de enero de 2006 recibieron el impulso de Estados Unidos y estaban financiadas por la Unión Europea. Los comicios consagraron la victoria de la organización Hamás -inscrita en las listas de "Grupos terroristas" de la Unión Europea-, irrevocablemente y sin reclamación posible a los ojos de los observadores internacionales presentes en el escrutinio. Estos resultados suscitaron al mismo tiempo reacciones enérgicas especialmente en Israel, Europa y en Estados Unidos, pero, como he dicho antes, los observadores internacionales presentes en los comicios reconocieron que no se habían producido irregularidades e incluso los Veinticinco alabaron su limpieza.

-¿A quién nos sorprendería encontrar entre los países y financieras que decretaron el embargo?
-La Comisión Europea, que es la financiera más importante de los Territorios Ocupados Palestinos, decidió suspender su ayuda al nuevo Gobierno el 10 de abril de 2006, después de que lo hubieran hecho Estados Unidos, Japón y Canadá. La parte de la ayuda de la Unión Europea es un 25% (aproximadamente 500 millones de dólares) y la de Estados Unidos supone un 17%. En total, se distribuyen más de mil millones de dólares de ayuda exterior anualmente. El conjunto de las ayudas exteriores desde 1994 constituye el 53% del presupuesto de la Autoridad Palestina. La suspensión de estas aportaciones ha sido catastrófica para el funcionamiento de la nueva administración palestina. Así, en abril de 2006, el presupuesto de la Autoridad Palestina había caído por debajo de los 60 millones de dólares mensuales.
Entre las ONG occidentales presentes en la región, algunas como FIDH, Médicos sin Fronteras, Oxfam y Médicos del Mundo han denunciado este sistema que les obliga a sustituir la función atribuida a los Ministerios. Estas ONG han realizado un llamamiento a los responsables internacionales para que reconsideren su política asistencial y su decisión de suspender la ayuda humanitaria internacional, debido a las consecuencias de una decisión como ésta en el plano humanitario.

-¿Cuándo se supone que parará el embargo?
-En marzo de 2006, la UE decidió suspender la ayuda directa a la Autoridad Nacional Palestina, como medida de presión para que Hamás acepte las exigencias de la comunidad internacional de reconocer al Estado de Israel, abandonar definitivamente la violencia y acatar y sumarse al proceso negociador iniciado en Oslo en 1993. Esas son las peticiones de la Unión Europea a los líderes de Hamás. En cuanto al final del embargo, eso no lo sabemos. Médicos del Mundo ha solicitado al Cuarteto de Madrid (ONU, Unión Europea, Estados Unidos y Rusia) que reanuden, restablezcan y respeten su compromiso de aportar ayuda humanitaria a favor de la población palestina. Lo más importante es que garanticen que el apoyo aportado a la población no dependa solamente de consideraciones políticas.

-¿Cómo está afectando a la población civil el embargo?
-La suspensión de las ayudas internacionales es una dificultad añadida para la población civil palestina, cuyas condiciones de vida se han deteriorado de forma constante desde el año 2000. Médicos del Mundo ha intentado evaluar el estado de salud de los pacientes que acuden a las estructuras médicas de la Franja de Gaza. Los datos dicen que el 23% de los pacientes necesitaban más de una semana para acudir a la consulta tras el inicio del episodio de enfermedad, lo que demuestra una dificultad global para acceder a la atención sanitaria. Tras la incursión israelí del verano, el tiempo invertido para desplazarse a los centros de salud se ha multiplicado por cuatro. En mayo los nacimientos prematuros en medio hospitalario se habían incrementado en un 60%. Antes de la operación "Lluvia de verano", el 70% de las personas tenía acceso al agua potable. El porcentaje cayó al 32,5% en el momento de la incursión israelí.