Arroz caldoso con sepia
Ingredientes (como pá 4 personas):
300 g de arroz • 1 tomate rojo maduro • 1 sepia •1 diente de ajo
• 2 cucharadas de perejil • 1 litro de caldo de pescado blanco • 4
cucharadas de aceite de oliva • Limón y sal
Lisa,
una conocida valenciana, me ha enseñado este plato. Es una madre con
muchos problemas de relación con su hijo. Ayer sin ir más lejos:
-Niño, niño, ¿te frío un huevo?
-Mamá, mamá, ¿te pincho una teta?
Pero claro, su padre tampoco le ayuda nada.
-Papá, ¿qué es el eco?
-Es el único que tiene huevos para contestarle a tu madre.
Primero limpia la sepia y córtala en trozos cuadrados y no muy grandes.
Luego vierte en una cazuela el aceite, el ajo prensado, el tomate pelado
y cortado en dados y la sepia. Sazona con sal. Rehógalo todo diez
minutos y vierte el caldo. Sus vidas están a diario en continua tensión:
-Mamá, tengo paperas.
-Pues toma un euro y ya tienes pa plátanos.
-Papá, papá, ¿horchata se escribe con hache?
-Pues claro atontao, si no se diría horcata.
-Mamá, mamá: veo muertos.
-Anda niño, quita cine de barrio y apaga la tele.
Corrige el punto de sal y deja cocer unos quince minutos más a fuego
vivo. Echa el arroz, remueve una vez y déjalo otros diez minutos a fuego
muy vivo. Luego vete bajando el fuego y añade al guiso el perejil
picadito y el zumo de medio limón. Mantén la cocción hasta completar
veinte minutos.
El niño, claro, con esta situación en casa le ha dado por el humor
"oscurillo". Te cuenta chistes del estilo:
-¿Qué le dice un muerto a otro?
-¿Quieres gusanitos?
O... "Adivina que es esto: Tiene ojos y no puede ver, tiene pico y no
puede picar, tiene alas y no puede volar, tiene patas y no puede
caminar. ¿Qué es?". Un pájaro muerto.
Durante los últimos diez minutos ve bajando progresivamente el fuego
hasta dejarlo al mínimo, apaga y sirve el arroz con bastante caldo en
platos hondos. Déjalo reposar en ellos otros diez minutos antes de
comerlo.
Bueno amigo, me despido con una anécdota del pueblo de Lisa. Ellos son
bastante devotos y el verano pasado sufrían una gran sequía, así que
decidieron sacar a pasear al "niño dios" alrededor de los campos para
que con sus propios ojos viese lo que ocurría. Al cabo de dos días
empezó a llover y todos estaban muy contentos, pero después de quince
días lloviendo sin parar se inunda el pueblo y la gente muy cabreada
decide sacar en procesión a la virgen. Mientras la llevan, dice la Lisa
en alto: "Señora, ¿ya viste el desastre que ha hecho tu hijo?"
/ El Cuñao |