DICIEMBRE 2006
Villaobispo de las Regueras
- Cercana a la
capital
-
Cada vez hay más adeptos al contacto con la
naturaleza, y el caso es que vivir en los pueblos es algo que está de
moda. Se impone un paisaje verde por encima del enjambre de altos
edificios, del ruido, el tráfico y el ajetreo. Aunque para ello haya que
desplazarse a cierta distancia si el lugar de trabajo se encuentra en la
gran ciudad. Sin embargo en Villaobispo esto no supone un impedimento.
La red de transportes urbanos, el acceso por carretera y la cercanía de
la capital facilitan la buena comunicación con su vecina León.
Villaobispo aún mantiene su carácter de población rural con mucha
historia en las alforjas. El apelativo de las "Regueras" que acompañan a
este y otros pueblos del municipio hacen referencia a los cursos de agua
canalizada y compartida durante siglos. Hasta cuatro presas regaban
estas tierras leonesas que se vieron beneficiadas por el agua en los
cultivos; y sus compuertas están simbolizadas en el escudo del
municipio. Pues bien, una de ellas fue la Presa de Villaobispo nacida en
Villamoros. Aunque tuviese poco caudal en épocas pasadas movía las
ruedas de molinos harineros. A simple vista, lo que más nos sorprende es
su aspecto moderno y actual. Según dictan las estadísticas, este
municipio es uno de los que registran un mayor incremento anual de
población en toda la provincia de León. Que se lo digan a los vecinos de
Villaobispo, que hoy por hoy es la localidad -junto con Navatejera y
Villaquilambre- que ha experimentado un mayor crecimiento en los últimos
años. Vivir en Villaobispo es como vivir en el campo pero eso sí, con
las necesidades básicas a mano y servicios públicos que permiten la
calidad de vida de los vecinos. Hablamos de tener al lado de casa un
consultorio médico, guardería y un colegio público, en el cual
recientemente se ha cubierto la pista deportiva y se ha urbanizado el
entorno. En la misma población hay un polideportivo y unas piscinas con
gran extensión de césped que son el gran atractivo del verano para los
vecinos de todos los pueblos cercanos. Al llegar el otoño el interés se
vuelca en las actividades que se ofrecen en la Casa de Cultura de
Villaobispo, con talleres y cursos variados para niños y adultos a lo
largo de la semana. Este edificio formará parte en un futuro de un gran
complejo, con parque incluido, cuando se construya junto a él el nuevo
Auditorio de Villaquilambre. De momento sólo las maquetas pueden darnos
una idea de cómo será este espacio con más de trescientas butacas y un
escenario que acogerá una gran actividad cultural para el municipio. Lo
cierto es que las expectativas son bien prometedoras para Villaobispo
que cuenta con el visto bueno incluso de los universitarios. Porque esta
población se sitúa a pocos kilómetros de la Universidad de León y puede
llegar a ser una zona de expansión estudiantil. Un lugar donde los
alumnos pueden estudiar, residir y pasar el tiempo libre. ∆.
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