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 -CANTABRIA-

Sobre un gran valle glaciar se asienta el territorio de Campoo de Suso. Este municipio cercano a Reinosa posee un patrimonio natural de enorme belleza. La naturaleza y la vida que en ella habita nos introduce en un mundo por explorar, plagado de posibilidades de cara al turismo rural. Texto: Eli Cañadó

Después de dejar la autopista A-67 a la altura de Reinosa, la comarcal CA-183 nos ha traído hasta Campoo de Suso. Iniciamos el camino por esta carretera recién arreglada y sorteamos pueblos típicos, de casas aldeanas de tejados y fachadas rústicas, algunas de piedra. A pocos kilómetros llegamos a Espinilla, capital de este municipio que abarca veinticuatro núcleos de población, además de Brañavieja donde se encuentra la Estación de Esquí-Montaña Alto Campoo. Desde aquí trazamos una ruta de viaje conscientes de que se abre ante nosotros un territorio hermoso que vale la pena descubrir. Estamos sobre un valle de origen glaciar que ocupa este municipio, uno de los mayores de nuestro país en extensión. Una mirada alrededor confirma lo que habíamos leído en las guías, que este paisaje se asemeja a la palma de una mano semiabierta hacia arriba. Los dedos son impresionantes macizos montañosos con cumbres tan míticas como el Pico Tres Mares o el Cuchillón, el más alto con 2222 metros. Aquí la naturaleza es la gran protagonista con paisajes y ecosistemas que se mantienen en estado puro. Bosques musgosos, ríos torrenciales, cascadas, arroyos y montañas configuran este relieve, alfombrado de húmeda y esponjosa hierba verde. En este hábitat percibimos la vida con otros sentidos y la naturaleza adquiere la fuerza de los elementos. No es de extrañar que entre las antiguas tradiciones pervivan los relatos que hablan de personajes mitológicos. La Anjana que es el hada buena de Cantabria es pequeña y bella, protectora y generosa con el hombre. Aparece vestida con mantos de estrellas y perlas apoyada en una vara de flores, y habita en las cuevas y manantiales de los bosques. Ella sin duda encuentra refugio en este valle de Campoo y en lugares tan mágicos como es el nacimiento del Río Ebro en Fontibre.

Este es un rincón simbólico para visitar que ha sido rehabilitado y dotado con un Centro de Interpretación. Más allá de este paisaje y por todo Campoo de Suso se extienden los bosques de hayas y robles, donde también se pueden observar tejos y acebos. En la frondosidad de esta vegetación tal como cuentan los viejos mitos podría esconderse El Trenti, una criatura formada por hojas, raíces y musgo. Dicen de él que es malicioso y bromista, pues le gusta tirar de la saya a las muchachas. Sin embargo podemos decir que los verdaderos huéspedes de estos bosques son los zorros y los lobos, los ciervos y corzos. Sin olvidar la presencia de venados y jabalíes, garduñas, martas, águilas reales y muchos más. Tantas especies animales y vegetales encuentran protección en este valle por hallarse ubicado en el Parque Natural Saja-Besaya, un territorio que es compartido por varios municipios. En Suso hay varias zonas LIC consideradas como Lugar de Interés Comunitario. Cuenta con una zona osera en el Alto Híjar, donde las tierras altas y húmedas junto al Circo de Tres Mares son límite natural del último territorio del oso pardo cantábrico. Esta reserva abarca varios pueblos -Mazandrero, La Población y Suano- rodeados de parajes vírgenes, senderos y pistas. En este lugar la Fundación Oso Pardo organiza visitas guiadas e interpretadas con los colegios que vienen a conocer esta zona osera. Podría decirse que a La Osa de Andara, ser de la mitología cántabra, le gusta pasear por estos lugares, pues dicen de ella que es la mujer osa de los Picos de Europa. A nosotros nos encantaría seguirle los pasos, pero por esta vez nos vamos hasta Brañavieja, donde se encuentra la Estación de Esquí-Montaña Alto Campoo, dotada de unas instalaciones y servicios modernos y la única en la comunidad cántabra. La presencia de la nieve en esta época nos permite disfrutar de unas pistas a las que viene gente del norte de Portugal, Galicia, País Vasco y Asturias, así como castellano leoneses y cántabros. En cualquier estación del año el Campo de Golf Nestares es una opción para los amantes de este deporte. Y cuando las nieves empiezan a remitir con la llegada del buen tiempo tenemos multitud de actividades que podremos realizar en Campoo de Suso. En este valle hay senderos de pequeño y gran recorrido que están bien señalizados y se siguen sin problema Los pueblos de Campoo de Suso son dignos de conocer, de aspecto pintoresco y habitados por gente abierta con ganas de conversar. Ellos nos pueden contar anécdotas del lugar o hablarnos de personajes mitológicos como El Tentirujo.

Este es un enano vestido de rojo que lleva una boina tiesa en la cabeza y tienta a las jóvenes con la planta de la mandrágora. Existen otros duendecillos que viven en las casas y forman parte de las curiosidades populares. Tenemos como ejemplo El Trastolillo, un poco alocado y burlón, que ríe y llora de forma caprichosa y al que le gusta tirar la harina. Y junto a él se mueve El Trasgo, un duende hogareño revoltoso y protector que ayuda a los hombres en las faenas domésticas. Verdad o mentira, estas criaturas de la naturaleza forman parte del encanto que guardan estos pueblos. En todos ellos hay alguna razón para visitarlos, observar la arquitectura y la artesanía popular de la zona. La gastronomía también es un reclamo y platos tradicionales como el revuelto de setas, el asado de cabrito, las carnes de caza, el guiso de venao o las chuletillas de cordero. También hay otros artesanos que trabajan con la madera, la miel o en el taller ceramista que hay en Abiada. Y si queremos tener una visión completa de las costumbres de la zona hay que llegar hasta Proaño y conocer el Museo Etnográfico. Estas y otras visitas dejarán una huella en nuestra memoria, porque nos encontramos en un espacio extraordinario imposible de olvidar. ∆

El Valle de Campoo ofrece mayores posibilidades de ocio a través del Campo de Golf Nestares. Es un espectáculo inolvidable hacer un swing rodeado de montañas con las cimas nevadas. Y luego desplazarse hasta el nacimiento del Ebro para disfrutar de las delicias del Restaurante Fontibre.

La naturaleza es generosa en extremo en la Comarca Campoo Los Valles, y los que aquí viven se muestran deseosos de corresponder con ella. Por esa razón la empresa Cantur ha desarrollado en esta zona actividades turísticas y deportivas respetando el medio ambiente. Gracias a ello se ha mejorado el nivel de renta de los campurrianos, se ha evitado el despoblamiento de esta zona de la montaña cántabra y se ha demostrado que es posible combinar crecimiento económico con ecología. Todo comenzó en 1965 con la creación de la Estación Invernal Alto Campoo, que en la actualidad emplea a ciento cincuenta personas durante la temporada de nieve, y mantiene cincuenta empleos fijos todo el año. Es un hecho comprobado que esta estación se ha convertido en un importante motor económico de la comarca y por ello el Gobierno de Cantabria desea continuar mejorando las instalaciones para seguir generando riqueza. Esa es la razón por la que en el año 2000 Cantur construyó el Campo de Golf Nestares, haciendo que la zona permaneciera turísticamente activa todo el año. Se encuentra a sólo quince minutos de la Estación de Esquí-Montaña Alto Campoo, en un entorno montañoso de gran belleza y está pensado para todos los públicos, ya que dispone desde campo de prácticas a escuela de golf para niños. En la actualidad es el único Campo Público de Cantabria de 18 hoyos y un lugar de referencia en la provincia para los amantes de este deporte, debido a sus excelentes instalaciones y a su entorno único. El lugar acoge un restaurante, escuela de golf y un amplio aparcamiento, pero las remodelaciones futuras contemplan recrear un Links en dos años, algo que será un reclamo para los amantes del golf. De hecho este deporte comenzó practicándose en un terreno natural en el que había que luchar contra la naturaleza del campo y la climatología, poniendo a prueba la concentración de los jugadores. Y es que practicar en el Campo de Golf Nestares es tremendamente adictivo, gracias a sus estupendas condiciones.
Pero para demostrar que la naturaleza no tiene fin, cambiamos de escenario para disfrutar de la deliciosa comida tradicional cántabra en un entorno singular. Nos trasladamos al Restaurante Fontibre, integrado en el parque del nacimiento del Ebro, donde comeremos rodeados de bosques de chopos, robles y hayas, hogar de jabalíes y corzos. Con una capacidad para ochenta comensales distribuidos en treinta y dos mesas, éste es un lugar pensado para celebrar bodas, banquetes y convenciones. O simplemente para conocer la gastronomía de la zona compuesta por carne de vacuno, quesos, miel o repostería, que descubriremos con el murmullo del agua como fondo. Sus instalaciones se completan con parque infantil y zona de aparcamiento privada, pero sin duda su punto fuerte es el entorno cercano al Pantano del Ebro, donde se practican deportes náuticos.
Estas iniciativas de Cantur contribuyen a mantener viva esta comarca y a mirar al futuro con optimismo. ∆

 
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Última revisión: abril 07, 2011.  FA