JULIO 2005

¿RESUCITO FRANCO?

Alguien me puede decir si el espíritu de Franco se ha reencarnado y se pasea libremente por la España actual repartiendo consignas, lanzando amenazas y creando una psicosis colectiva que amenaza la convivencia y la unidad patria?
¿Alguien sabe a qué se debe si no esa manía redentora que, cual enfermedad contagiosa, se ha instalado en nuestro país, amenazando con salvarnos a todos de la catástrofe de la desintegración de España, de la llegada de los rojos y los masones, del caos y la pérdida de valores...?
Pancartas resucitando aquella puñetera manía de arrimar gente al "paredón". Obispos degradándose hasta el punto de codearse con los feligreses en la puta calle, lugar al que sólo descienden los que están muy necesitados de votos, cada cuatro años, o los que temen perder su poltrona de poder, levantada a través del miedo a los infiernos y a la condenación eterna.
Declaraciones llenas de veneno, lanzado intencionadamente para crear miedos en el personal, para recuperar lo perdido, para derrotar en el falso nombre de la democracia cuando lo que motiva es la ambición, el hambre de poder, la necesidad de dominar y realizar la propia voluntad que nada tiene que ver con las necesidades y criterios del pueblo.
Manifestaciones en contra de una parte del pueblo español, los ciudadanos homosexuales, que nos recuerdan los principios del imperio nazi cuando el pueblo alemán salía a la calle gritando contra todo aquello que no fuera la pureza de su pretendida raza aria, homosexuales incluidos. Historia que todos sabemos cómo terminó pero que parece que a algunos se les olvidó o simplemente sienten añoranza de aquellos tiempos y de aquellos modos.
Son los mismos "valores", los mismos eslogans, los mismos "principios", sólo que a través de otras voces, de otras caras, de otros personajes. ¿De verdad que no creen en la reencarnación?
Pues yo creo que sí, que Franco resucitó, o al menos su espíritu ha conseguido levantar la pesada losa de su mausoleo, a lo mejor porque oyó comentarios que se querían cargar el Valle de los Caídos y hasta ahí podíamos llegar. Y ahora su espíritu, libre ya del tiempo y del espacio, encuentra buen acomodo en personajes como Acebes y cia, instruidos espiritualmente por la Iglesia y con una mente lo suficientemente estrecha como para asimilar semejante doctrina, la de Franco bajo el palio, claro.
Qué penoso resulta ver una parte de la España del siglo XXI conjurando el pasado, un pasado que tanto dolor y destrucción trajo a nuestro país, un pasado que nos alejó del resto del mundo, terreno que tanto costó recuperar.
Dicen que Suárez perdió la memoria. ¿No será que escogió libremente borrarla para no sufrir en el presente contemplando cómo se retrocedía a principios de una transición que tanto costó y le exigió a él?
Y luego, los que escupen fascismo cada vez que abren la boca, tienen la puñetera manía de hablar en nombre de los españoles. ¿Quién les autorizó a hacerlo?
Dicen... "la mayoría de los españoles". Pues no, capullos, la mayoría de los españoles conviven y respetan a los homosexuales, la mayoría de los españoles no cumple los mandatos de la Iglesia, la mayoría de los españoles pecan cuanto pueden, y si no lo hacen más es porque no pueden. Menos hipocresía, por favor.
Y si el espíritu de Franco se fugó de su cripta, lo volveremos a meter allí, aunque para ello haya que hacerle un exorcismo a Acebes.
El futuro es inevitable. La libertad es inevitable. La pérdida del miedo es inevitable.
El pasado está muerto y bien enterrado. Que le den... / M.C.