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JUNIO 2004

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Marcianos entre nosotros

Están aquí, se han infiltrado y pronto conquistarán la Tierra.
No creo en los OVNIS, pero esto es completamente diferente. No sé cómo han aparecido, ni siquiera de qué planeta son. Es probable que sean criaturas venusianas, porque la mayoría adopta una apariencia femenina. Parece que no se adaptan a "comportarse" exactamente como nosotros, lo que permite detectarlos por sus "excéntricas costumbres", a pesar de su aspecto similar al nuestro. Durante años advertí ocasionalmente algún ejemplar suelto, pero ahora veo que se multiplican con inusitada vitalidad: A veces, basta hablar con uno de ellos para transformarse a su identidad extraterrestre.
Todo esto lo averigüé ayer por la tarde. Volviendo en el Metro vi a un joven leyendo un grueso libro. Esto es raro entre los chicos que, generalmente, sólo escuchan música o leen prensa deportiva, pero no concluyente para determinar su naturaleza alienígena. Un inconfundible detalle lo descubrió: ¡cedió su asiento a una anciana!, tras unas palabras acompañadas de una sonrisa. Al llegar a mi parada, entré en la tienda habitual para comprar pan. La misma señora de edad que pudo sentarse en el Metro, vino poco después y se adelantó disimuladamente hasta el mostrador. Cuando la dependienta le atendió antes que a los demás, la abuela indicó que ella era la última y que no tenía prisa. Comprendí que el extraño "virus" se extendía aceleradamente.
La transmisión mutante continuó su cadena. La tendera comenzó a regalar pasteles, excusándose por la larga cola que se formaba en su establecimiento en aquel horario. Al llegar a casa, en lugar de regañar a mi hijo menor por estar viendo la televisión, sólo le felicité por haber dejado la mochila en su cuarto. Él se levantó y se puso... ¡a estudiar sin protestar! Al llegar su madre, nuestro hijo le dijo inopinadamente -y esto fue evidencia definitiva de la abducción sucesiva - que ¡le había gustado mucho la merienda que ella le había preparado! A mi esposa no me hace falta observarla: hace años sé que sus dulces facciones esconden un hada venida de alguna lejana galaxia infinitamente más avanzada, educada y bondadosa.

Mikel Agirregabiria Agirre.
Getxo

 

En Semana Santa he visitado el Campamento de Refugiados Saharauis, concretamente la wilaya de Smara. Por la concentración de personas que viajan cada año para visitar a las familias saharauis, que consideramos "nuestras familias", se visualiza claramente el sentir de muchos españoles, con respecto al todavía irresoluto tema Saharaui. Ya casi se cumplen treinta años de irresponsabilidad por parte de España, de vergüenza para los españoles y de destierro para este pueblo. Me pregunto si por fin ha llegado el momento de despertar las conciencias individuales y tomar la parte de responsabilidad que nos corresponde a cada uno, para, igual que se salió a la calle con un No a la Guerra, igual que se ejerció el derecho al voto, por fin la sociedad NO ESPERE MAS y exija antes de cuatro años que se cumplan tanto las promesas electorales como las deudas históricas que nos correspondan. Si en verdad, se habla de los derechos de las personas, si existen y se reconocen los derechos humanos, es hora de cumplir con la verdad, sin anteponer los intereses económicos. Es hora de exigir transparencia en la defensa de los derechos fundamentales de la persona, no queremos ni podemos seguir cargando con las responsabilidades de los gobiernos que matan aunque lo justifiquen con convenios y les llamen guerras para la defensa de la democracia ¿?, no queremos ni podemos seguir cargando con las responsabilidades de gobiernos que permiten contra todas las normas internacionales, refugiados en un pueblo que fue Colonia española, y que aún está bajo el protectorado de España ¿? ¿Dónde está aquí la presión diplomática? ¿Por qué los gobiernos que hemos tenido después del nacimiento de la Democracia cierran sus ojos, mientras el Pueblo llano clama por una solución pacífica y con honor? ¡Es hora de luz para el pueblo saharaui¡¡¡
 

Guadalupe Teresa Santana Hernández.
Telde. Las Palmas de Gran Canaria. España

 

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Última revisión: abril 07, 2011. 
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