BOMBEROS
SIN FRONTERAS
Ayuda urgente
Entre otras cosas, el terremoto de Irán evidenció que en nuestro
país la coordinación entre Gobierno y ONG no es todo lo fluida que
debiera. Bomberos Sin Fronteras (BSF) y Bomberos en Acción tenían que
haber partido cuanto antes en un avión gubernamental que sufrió un retraso
tras otro. Imposible medir en vidas humanas lo que supusieron esas
preciadas horas perdidas.
Texto: Marta Iglesias / Fotos cedidas por BSF
José Pérez Vigueras, Presidente de
Bomberos Sin Fronteras nos habla sobre la labor de las ONG de bomberos y
cuál es su relación con la Administración.
-Desgraciadamente con el terremoto de Irán saltaron a la fama las ONG de
bomberos. ¿Qué otras labores desarrolláis además de apagar fuegos?
-La labor concreta de BSF España es técnica, formativa y de material.
Para entendernos, todo lo relacionado con el rescate y ayuda específica de
bomberos: evacuación, desescombros, rescate de todo tipo, urbano, en
montaña, en cuevas, en lugares confinados... Preparamos los equipos de
rescate de países subdesarrollados o que tienen menos recursos que los
españoles, les regalamos o prestamos el material, y les enseñamos a
utilizarlo. También cubrimos cualquier necesidad a nivel mundial
relacionada con el rescate del servicio de bomberos, pasando menos de 24
horas desde que nos llaman hasta que se da una respuesta. Realizamos unos
rescates efectivos en 72-100 horas, y empleamos material específico como
perros, localizadores bajo los escombros conocidos como TPL (localizadores
sísmicos de personas) y cámaras infrarrojas, lo más moderno y sofisticado
que hay actualmente.
-¿Qué valoración hacéis de la vida quienes convivís con las muertes
dramáticas?
-Tenemos cerca la desgracia ajena, que intentamos minimizar haciendo
que no trascienda más, evitando las muertes potenciales o que esas
catástrofes naturales que siempre desbordan a todos los equipos de rescate
pues sean lo menos dramáticas posibles. En realidad es ayudar a que todo
el mundo tenga presente que todas las cosas que se escapan de nuestro
control no tienen solución humana posible y de minimizar esos riesgos,
ayudar, salvar vidas, incluso poniendo en peligro la nuestra.
-Tras los retrasos que sufrió el vuelo que os iba a llevar directamente
a Irán desde Torrejón, la sensación que queda es de descoordinación. ¿Es
algo frecuente entre el Gobierno y las ONG?
-La verdad es que yo soy nuevo en esto para darte una respuesta muy
concreta, pero parece ser que sí, que es bastante común porque la
Administración funciona de una forma y las ONG -que son autónomas e
independientes- lo hacen de otra. Lo que sí es verdad es que se ha visto
que hemos sido capaces de dar una respuesta muy rápida en muy poco tiempo,
y administraciones regionales como la Diputación de Castellón, la
Dirección General de Protección Civil de Murcia, el Consorcio del
Ayuntamiento de Murcia y algunos ayuntamientos más han sido capaces de
responder a ese llamamiento. Pero en cambio la Dirección General, la
Administración General o el Estado no han sabido estar a la altura, pero
eso son cosas que vamos a ir trabajando para evitar ese tipo de errores.
-¿Por qué siempre parece que las ONG deciden rápidamente sus acciones y
el Gobierno lo hace muy lentamente, incluso cuando están tantas vidas en
juego, como ha sido el caso?
-Tal vez se deba a la burocracia, que es muy lenta, pero no lo sé
exactamente. Aunque es cierto que el ciudadano reacciona de una manera y
la Administración tarda más. Cuando hay una vida en juego no podemos
escatimar en medios, ni en recursos, ni en personal; debemos ponernos en
el lugar de la víctima. Creo que eso es lo más importante.
-¿Qué crítica haríais o qué consejo daríais a la AECI (Agencia Española
de Cooperación Internacional, dependiente del Ministerio de Exteriores)?
-Que su eficacia mejoraría dando una respuesta más rápida. Los
servicios de intervención inmediata, como son bomberos, policía, 061, y en
el caso extremo de fuerza mayor el ejército, son los que hay que tomar
como ejemplo de una respuesta inmediata. Siempre que se necesitan están. Y
ésa es la respuesta que creo que deberíamos dar todos. ∆ |