Foto: I.G.
|
LIBERTAD DE EXPRESION:
EN PELIGRO
Cada año
un grupo de periodistas pierde la vida por acercarse demasiado a la verdad
e intentar contarla al mundo.
Cada año un grupo de periodistas pierde su trabajo por defender la
libertad de expresión e información frente a los dictámenes y consignas de
los grandes grupos mediáticos o poderes políticos.
El acceso a una información libre es cada vez más difícil. Incluso en
países que presumen de democracia.
Texto: Mariló Hidalgo
CENSURA MADE IN USA
Aunque por razones obvias no tuvo
mucha difusión, lo cierto es que la carta abierta de periodistas,
intelectuales y artistas norteamericanos en la que defendían su derecho a
la libertad de expresión que estaba siendo vulnerado sistemáticamente a
raíz de los atentados del 11-S, fue una bomba. "Creemos que hay que
valorar y proteger la capacidad de criticar, disentir, y formular
preguntas. Entendemos que estos derechos y valores son atacados siempre, y
que debemos luchar por ellos. Nosotros también asistimos conmocionados a
los terribles acontecimientos del 11-S. Sin embargo, cuando apenas
habíamos iniciado nuestro luto, los líderes del país desataron el espíritu
de venganza. Sacaron a la luz un guión simplista del bien contra el mal
que los medios de comunicación, intimidados y flexibles, absorbieron. Nos
dijeron que preguntar por qué acontecimientos tan terribles habían tenido
lugar rayaba con la traición. No habría ningún debate. La única respuesta
posible era: guerra en el exterior y represión en el interior. En nuestro
nombre, el gobierno ha extendido un manto de represión sobre la sociedad.
Mientras el portavoz del gobierno avisa a la gente de que 'sean cuidadosos
con lo que dicen', artistas, intelectuales y profesores disidentes ven
cómo sus puntos de vista son distorsionados, atacados y suprimidos" (
www.ecoportal.net ).
Ya no hablamos de la censura informativa de Colombia, Cuba, Venezuela,
Irán o Marruecos, sino de EE.UU., el país que más se ha esforzado en
vender al mundo su modelo de democracia (aunque sólo consiga llevar a las
urnas al 30% de los ciudadanos). Una forma de democracia rentable para el
poder, que está siendo exportada a diferentes partes del mundo.
La libertad de expresión está siendo amordazada, las técnicas empleadas
son similares en todos los países, y los que están moviendo las piezas
siguen las mismas estrategias.
¿Por qué se teme a la libertad de expresión? ¿Quiénes están interesados en
amordazarla? ¿Para qué? ¿Qué métodos utilizan?
En el caso del
hundimiento del Prestige el arma elegida por el gobierno fue el silencio y
la desinformación o tergiversación de la realidad con fines políticos.
Miedo a la libertad de expresión
Asistir a una reunión de varias
personas con un objetivo, donde cada una exprese lo que piensa: sus
opiniones, críticas, puntos de vista, propuestas, preguntas, puede llegar
a convertirse en algo mágico, ya que en un solo instante se crea un
espacio abierto, desconocido, sin límites, que permite a nuestra mente
viajar libremente de un sitio a otro y penetrar en lugares que nunca
habíamos imaginado. Todo puede ser posible, sólo hay que dejarse en el
mundo de las ideas, no tener miedo a nada y... pensar. Al final, si la
expresión ha sido auténtica, sincera, creativa, sientes que algo ha
cambiado dentro de ti y que por tu mente bullen mil cosas que antes no
existían. Lo dicho, un acontecimiento mágico que obliga a replantearse las
cosas continuamente y por tanto a evolucionar.
Pero este viaje, aunque apasionante, no es emprendido por muchos ya que
admitir la libertad de expresión y de información -en el caso que nos
ocupa-, genera opiniones y debates que obligan a revisar y a cambiar,
graves amenazas todas ellas para la mayoría de los poderes políticos,
económicos y religiosos que hacen todo lo posible en estos momentos por
acallar las voces disidentes y renovadoras.
"La libertad de prensa -recuerda la periodista Marta Caravantes- no existe
para dos mil millones de personas que viven en países donde la información
es considerada como un peligro para sus líderes políticos, económicos y
religiosos. La represión a la libre circulación de ideas y de información
es para algunos gobiernos el símbolo de la pérdida del control sobre los
ciudadanos. La manipulación es un arma ejercida sobre las conciencias y
mutila el derecho a la información y al conocimiento, así como la
capacidad de rebeldía de la población por la conquista de una sociedad más
justa".
Y es que no hay que ir muy lejos para ver cómo se "castiga" a un
periodista que habla de más, o cómo se censuran en puertas del siglo XXI
titulares, imágenes y entrevistas, para ofrecer una visión sesgada de la
realidad. En el primer caso, tenemos el reciente despido de la periodista
y presentadora del programa de Antena-3, Isabel San Sebastián. La razón
fue su negativa a prescindir en su tertulia matutina de Pedro J. Ramírez,
director de El Mundo y colaborador habitual. El siguiente paso fue su
despido inminente. La cuestión de fondo que luego apareció en diferentes
medios de comunicación, fue que el diario El Mundo publicó hace casi un
año una información donde acusaba al actual presidente de Telefónica,
Cesar Alierta -por entonces al frente de Tabacalera-, de favorecer
negocios familiares aconsejando la venta de unas acciones en un momento
muy oportuno donde reportaron a los interesados importantes beneficios.
Como apunte, sólo indicar que esa información es corroborada hoy punto por
punto por el fiscal Anticorrupción, quien propone que se abra un juicio
contra el presidente de Telefónica por nada menos que cuatro presuntos
delitos. La periodista Victoria Prego comentaba sobre el caso que "César
Alierta es presidente de una empresa que proporciona a radios, periódicos
y televisiones sus mayores ingresos por publicidad y también la que puede
privarles de ellos según sus deseos de castigar a los díscolos. Y el
efecto tremendo es que la mayoría de los medios de comunicación se han
rendido antes de hablar y están guardando sobre este asunto un silencio
ominoso que se corta con cuchillo. La información es poder, pero se
convierte en indecencia cuando en lugar de trasladarse al conocimiento
público, se utiliza para colmar en la sombra intereses particulares. A un
periódico no se le puede ‘parar los pies’ por publicar noticias ciertas".
Los medios
de comunicación destacan más las reiterativas declaraciones de los
representantes políticos que la lucha diaria de las personas
anónimas. |
La censura también llega a la imagen. A finales de noviembre y en una
misma semana la televisión pública nos ofreció dos documentales: "Los
niños de la calle" y "Muerte en Mazar-i-Sharif". Posteriormente se supo
que ambos documentales ofrecidos por Línea 900 (TVE) y
Documentos TV (La 2) habían sido retocados. El primero "Los niños de
la calle" fue elaborado por un periodista independiente y posteriormente
retirado de la parrilla cuando iba a ser emitido en mayo. Responsables del
Ente argumentaron que estaba 'incompleto', "lo que provocó -según informa
Almudena Mordejai, que estudió el caso (*)- una pregunta parlamentaria y
un encierro reivindicativo de los periodistas de TVE-Cataluña. Después de
meses de trabajo y censura se emitió el documental con una serie de
explicaciones oficialistas y comentarios editoriales en un tono
conciliador del tipo: 'Las autoridades locales han mejorado un centro de
acogida que, sin embargo, todavía no reúne las condiciones idóneas..." El
segundo documental aborda el tema de la masacre de Mazar-i-Sharif
(Afganistán), donde murieron más de 500 prisioneros detenidos en dicho
fuerte después de 52 horas de bombardeo aéreo norteamericano, ante el
silencio internacional. "En el documental emitido en Documentos TV
-señala Mordejai-, la participación de los americanos se limita a la
actuación estelar de dos agentes de la CIA y a la aparición de bombardeos
en el último momento. La cifra de muertes, ya que se elude toda referencia
a las ejecuciones masivas y fosas comunes apartadas del lugar, se reduce a
400". Todo esto pasaría desapercibido si no hubiesen anunciado antes decir
toda la verdad sobre lo ocurrido y no hubiesen ignorado de una manera tan
flagrante, el reportaje presentado en Berlín por el director irlandés
Jamie Doran sobre el mismo tema, con imágenes y testimonios desgarradores
de testigos dispuestos a identificarse y comparecer ante tribunales
internacionales, que narran detalles de la participación de los americanos
en la tortura y asesinato de 3000 prisioneros. Documentación que provocó
el inicio de una demanda internacional para que se investiguen los
crímenes de guerra cometidos por tropas norteamericanas.
Censura, información sesgada, falta de pluralismo o desinformación son
algunas de las tácticas empleadas por aquellos que tienen miedo a la
verdad y pretenden seguir adelante con el monopolio de la información que
les permita seguir ejerciendo el poder. La catástrofe del Prestige nos ha
puesto en bandeja un ejemplo del empleo de la desinformación para moldear
la opinión pública en base a un único punto de vista. A medida que vamos
teniendo acceso a más datos -mayormente facilitados por cadenas
extranjeras y en el caso español, por Tele-5-, nos damos cuenta de que los
datos que nos facilitaba el Gobierno durante los primeros días de la
crisis, no tenían nada que ver con esas informaciones, que nos llegaban
desde otros puntos. Contradicciones, falta de seriedad, insultos, intento
de desviación de la opinión pública, prepotencia... Intentaron hacernos
ver que la cosa no era tan grave y estaba totalmente controlada. El arma
elegida por el gobierno fue el silencio en unos casos y la desinformación
(tergiversación de la realidad con fines políticos) en otros. Método este
último muy empleado por EE.UU. para ganarse corazones y mentes en tiempos
de crisis. Como decía Churchill, en la guerra la verdad es tan valiosa que
debe ser protegida por una escolta de mentiras.
Y lo peor es que esto... ha creado escuela.
Foto: M. A. Oliva |
Unica visión del mundo
Párate un momento y piensa. ¿Qué
opinas sobre la guerra que pretende poner en marcha EE.UU. contra Irak?
¿Has oído hablar de la inminente fusión de plataformas digitales en
nuestro país? ¿Has pensado qué implicaciones pueden tener? ¿Qué intereses
hay detrás de la cuestión de la soberanía de Gibraltar, un tema recurrente
que de vez en cuando nos asalta y nunca llega a nada?
Es curioso que aunque estemos sumergidos en el mundo de la información y
los datos, este tipo de cuestiones y otras que se salen de los parámetros
habituales, no tengan una respuesta rápida. O al menos no sean temas que
estén hilvanados en nuestra cabeza, como lo está la realidad que nos
rodea.
Hoy hablar de noticias es hablar de acontecimientos que nada tienen que
ver unos con otros. Es hablar de imágenes captadas desde un prisma
previamente pactado. Y nosotros desde nuestras casas somos -en la mayoría
de los casos-, los consumidores pasivos de un menú que otros deciden.
"Los medios muestran cada vez más -según el periodista Ángel Gonzalo de
Colaboraciones Solidarias- una realidad segmentada donde el protagonismo
se concentra en las reuniones, viajes, decisiones y declaraciones de los
Jefes de Estado y representantes políticos, especialmente de los países
más poderosos del mundo. Sin embargo, hay otra realidad que los grandes
medios escasamente reflejan. Son las historias cotidianas de miles de
personas, tan interesantes o más que la mayoría de las que se publican o
se emiten. Se destacan más las ínfimas y reiterativas declaraciones de los
representantes políticos que la lucha diaria de las personas anónimas".
Una cosa que se puede comprobar cualquier día con un periódico en la mano:
Temas carentes de interés son enfatizados y en cambio cuestiones de las
que nos gustaría conocer más, se reducen -en el mejor de los casos- a un
cuadradito o un breve en un lugar discreto. Ramón Lobo, periodista de El
País y escritor, insiste en esta cuestión. "En España existe un problema
grave: el llamado periodismo declarativo, que ocupa un espacio descomunal
en los medios. Ahora los políticos hablan con el único objetivo de 'salir
en la foto' y nosotros les sacamos digan lo que digan. En la prensa
anglosajona esto es impensable. El 'New York Times' publicó un breve de la
rueda de prensa de un presidente de EE.UU. porque lo dicho carecía de
interés. Un ejemplo de gran periodismo es el informativo de Noticias de
la 2". ¿Quién decide entonces lo que es o no noticia? Lobo hace una
primera aproximación: "En este momento vivimos una globalización de unas
pocas noticias, las que interesan al Primer Mundo. La jerarquía la deciden
las televisiones globales en función de su espectacularidad. Una rueda de
prensa de Bush sobre unos supuestos indicios de una red de Al Qaeda en la
Luna, tendrá más valor que una hambruna confirmada en Sudán". En estos
momentos el 96% de las noticias mundiales son distribuidas por cinco
agencias de prensa. Y si en 1980 cuatro de cada cinco noticias escuchadas
en el planeta provenían de EE.UU., ahora es este país el que produce más
del 80% de programas audiovisuales (TV, cine, vídeo). Se trata de una
especie de tela de araña que va imponiendo una única visión de la
realidad, pero muy bien disfrazada de independencia, objetividad,
periodismo de investigación, imágenes exclusivas que confunden la realidad
que se vive ahí fuera con la ficción mediática que genera amplios
beneficios y poder económico. "EE.UU., Japón y la UE -asegura la
periodista Marta Caravantes-, controlan el 90% de la información y la
comunicación en todo el planeta. Las 10 principales empresas de
telecomunicaciones controlan el 86% del mercado. La UNESCO ha denunciado
con rotundidad que el desequilibrio de la información en favor del Norte
amenaza la diversidad de las culturas. Los países del Sur no manejan su
propio discurso sobre su realidad y sufren la paradoja de ser contados e
interpretados por el Norte, precisamente desde ese Norte que les explota.
La libertad de prensa no sólo necesita un reconocimiento legal y
constitucional, sino medidas concretas y eficaces contra el monopolio,
mejora de las condiciones laborales profesionales de los periodistas y una
transformación de los objetivos fundamentales de los medios de
comunicación, para que la información se considere un servicio a la
sociedad y no una mercancía más en el 'casino' neoliberal".
El Gobierno, a
través de las grandes empresas públicas, se ha hecho un hueco
en el negocio de la comunicación.
Y no hace falta irse tan lejos para comprobar cómo la manipulación de la
información llega a todos los rincones. En nuestro país hemos sido
testigos de la gran concentración de empresas del sector que ha tenido
lugar en los últimos tiempos. Por otro lado hemos visto sorprendidos cómo
el Gobierno -a través de las grandes empresas públicas- se hacía un hueco
en este negocio de la comunicación. El resultado son dos corrientes que
hoy dominan el panorama informativo: Una a favor del Gobierno y la otra, a
favor de la Oposición. Alrededor también existen pequeñas empresas que
luchan contra viento y marea por defender su independencia y seguir a
flote.
Profesionales muy críticos hablan de periodismo políticamente correcto. El
periodista Domingo del Pino va más allá cuando asegura(**) que "el
bipartidismo ha cedido presencia al biperiodismo y de esta forma un grupo
endogámico de profesionales respetables, pero no elegidos en ninguna urna,
poseen el poder de fijar el menú informativo de cada día. Ellos
seleccionan los temas que se han de debatir, a las personas que han de
medirse dialécticamente, fijan el contorno variable del mundo que quieren
evocar y producen la opinión final".
Eso podría explicar el monopolio al que se ve sometido el espectador
demasiadas veces, por ejemplo cuando decide empezar el día echando una
ojeada a las tertulias de la televisión. Un día cualquiera se puede
encontrar con que Luis Mariñas está entrevistando en "Los Desayunos de
TVE", al presidente de la Comunidad Valenciana, José Luis Olivas (PP).
Cambia de canal y en el "Primer Café" de Antena-3 le ofrecen una
entrevista con el Coordinador de Organización y miembro del comité
ejecutivo del PP, Pío García Escudero. En Tele-5, Montserrat Domínguez ha
invitado a "La mirada crítica" al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas.
Pero es que al cabo de unos días se puede dar el caso contrario, como de
hecho ocurrió, y los invitados pasaron a ser Manuel Chaves, Trinidad
Jiménez y Alfonso Guerra. ¿Casualidad? No, pluralismo informativo.
Nace una nueva forma de comunicación
¿Aún sigues interesado en conocer
lo que ocurre desde otras perspectivas? ¿Quieres pensar, despertar tu
espíritu crítico? Añade otros ingredientes a lo que normalmente consumes.
No te conformes con una visión unidimensional de los acontecimientos.
Muévete y no esperes a que te lleven la información a casa. Busca. Piensa.
Pensar es una actividad, no un descanso y lo que llega hasta nosotros
lleva el sello de la urgencia, lo superficial, la síntesis y los juicios
rápidos.
Al lado de los grandes medios de comunicación que pertenecen a los
principales grupos cuyo objetivo primordial es ganar dinero -viven del
negocio de la información-, se encuentran otros, alternativos, modestos
que trabajan para ofrecer otra lectura de la realidad, abrir nuevos
espacios de opinión o debate. Ahí se encuentran muchas plumas críticas que
han huido de los grandes medios e intentan aportar en cada reportaje,
análisis, entrevista o reflexión, nuevos planteamientos en profundidad.
Esta nueva forma de periodismo no es necesaria, es imprescindible.
En estos medios se pueden encontrar amplias secciones de opinión valiente,
comprometida y analítica. Voces que desde diferentes perspectivas acuden
gustosas a analizar lo que preocupa de verdad y no aparece contemplado en
el "menú del día".
La censura
informativa existe, y no sólo en países como Cuba, Colombia, Irán o
Marruecos, sino en EE.UU., el país que más se ha esforzado en llevar
al mundo su modelo de democracia. |
En cambio no encontraremos en estos medios restos de frivolidad,
sensacionalismo o amarillismo, tan comunes hoy en día.
Son un maravilloso grupo de "locos" que han declarado la guerra al
silencio y a quienes lo provocan, y lo han hecho con sus plumas, sus
ordenadores y cámaras de fotos. Y mientras muchos siguen ahí arriesgándose
cada día, otros han muerto por ello, permanecen encarcelados o se
encuentran en la calle sin trabajo. Es el precio que han pagado por
comprometerse con la verdad y la libertad de expresión.
Por todo ello, quizá estos medios de comunicación y estos periodistas, son
considerados incómodos, no reciben premios, no cuentan con la publicidad
de los grandes emporios económicos, ni cotizan en Bolsa, pero quizá esta
sea la mejor garantía de su independencia.
Por último, no podemos olvidar aquí la importancia de Internet como la
gran alternativa al sistema tradicional de información. De manera rápida,
en tiempo real, sin censuras, podemos acceder a un gran número de
publicaciones alternativas que recogen esas "otras noticias". O bien
opiniones de intelectuales, escritores, grupos, asociaciones, colectivos,
denominados disidentes.
Estos medios forman una gran red que atraviesa continentes. Les une una
misma idea: el creer que otro mundo es posible. Su bandera es la libertad.
∆
(*) www.kalegorria.net
(periodismo de investigación) • (**) La Clave, febrero-2002.
Direcciones de interés:
www.revistafusion.com •
www.ecoportal.net •
www.lainsignia.org
www.canalsolidario.org •
www.kalegorria.net (periodismo
de investigación)
www.estrelladigital.es •
www.attac.org •
www.rebelion.org •
www.opinar.net •
www.mundofree.com/martinse
• www.ucm.es/info/solidarios
(Centro Colaboraciones Solidarias)
www.www.hrw.org/spanish
• www.pulso.org/Espanol
|