Subscripción RSS

LEON - VILLAQUILAMBRE

Punto limpio
Piensa globalmente, actúa localmente
Que las pilas y los aceites usados contaminan las aguas es hoy en día conocido por todos. Pero hay más cosas que desconocemos: los fluorescentes, las pantallas de televisión, las neveras viejas, las pinturas, las baterías de los coches y decenas de objetos más de uso cotidiano deben reciclarse en un lugar adecuado para evitar el deterioro del planeta. En Navatejera hay un Punto Limpio donde lo recogen todo.
Además de elementos contaminantes, hay materiales reciclables que ahorran energía. Es el caso del papel y el cartón, el vidrio, los plásticos y los metales, materiales que después de un tratamiento pueden reutilizarse para fabricar otros artículos nuevos. Todo ello puede depositarse en cada Punto Limpio para que sea tratado adecuadamente. En Navatejera, el Punto Limpio recibe cada día una media de cinco visitas, sobre todo de vecinos jóvenes, los más comprometidos con la ecología y el cuidado del medio ambiente. Concienciados de que producir papel reciclado evita la tala de bosques, o que tirar aceite por el vertedero contamina fuertemente el agua, acuden a este centro a depositar los desperdicios generados por las basuras domésticas. De esta manera el kilo diario de basura que genera cada ciudadano de nuestro país puede reducirse. ¿Qué podemos depositar en un Punto Limpio? Este lugar admite sólo residuos que se pueden reciclar o que, por su alto grado de contaminación necesitan un tratamiento específico. Así en el Punto Limpio de Navatejera podemos depositar aerosoles, aceite usado del coche, madera, escombros de pequeñas obras, pilas y baterías, electrodomésticos, plásticos, latas, fluorescentes, radiografías, vidrio, medicamentos caducados, aceite usado de casa, metales y chatarras, y papel y cartón./ M. Castaño
Punto Limpio. Carretera del cementerio. Navatejera.
Horario de atención al público: de 10 a 2 y de 4 a 8. De lunes a sábado.

Una labor social
Ya tenía experiencia en este terreno, gracias a su trabajo en Cruz Roja, pero lo que abunda en Eva Alegre es la vocación: "es un trabajo de lo más gratificante", afirma. Ella se ocupa de coordinar tanto los Centros de Día como la nueva Asociación de Voluntarios, Ayusol, que ha nacido recientemente en el municipio. Texto: E. Fernández

Centros de Día
-¿Cuántos Centros de Día funcionan en el municipio?
-Está el de Villaobispo, que lleva funcionando seis años, y se lleva en colaboración con Cruz Roja, que fue quien lo puso en marcha. El año pasado Cruz Roja dijo que tenía previsto finalizar este convenio y el Ayuntamiento se planteó asumir el centro y, dado que la gente estaba contenta, abrir otro en Navatejera.
-¿Cuál es el objetivo de estos Centros de Día?
-La ocupación del ocio y tiempo libre de las personas mayores, durante las tardes de lunes a viernes de 4:30 a 7:30. Todas las personas que acuden -27 en Villaobispo y 23 en Navatejera- son prácticamente independientes, así que de momento no hace falta que se cubra todo el día. Aquí se hacen actividades de rehabilitación, tanto a nivel físico -con tablas de gimnasia- como psíquico, con ejercicios para retardar en la medida de lo posible el envejecimiento, por ejemplo, con ejercicios de memoria. También hay un taller de promoción de la salud, que lleva un psicólogo, y actividades de terapia ocupacional, como talleres de manualidades, de teatro, excursiones... Y además con cada usuario hay un programa de atención individualizado, según los problemas que tenga cada persona.
-¿Qué suponen estos Centros para los participantes?
-Es muy importante sobre todo a nivel de integración, porque parece que por el hecho de ser mayor resulta más difícil hacer nuevas amistades. Y también refuerza mucho la autoestima, ya que ser mayor no quiere decir que no puedas hacer cosas, pero antes de venir al centro a veces estaban en casa sin hacer nada, y se sentían inútiles. Aquí reciben cariño, se comparten alegrías y penas; ellos siempre dicen que somos una gran familia, y es verdad. ∆

Mucho deporte... mucha diversión
Bajo el lema Haz deporte y diviértete se agrupan las actividades deportivas de Villaquilambre.
Es la manera de combinar el ocio con los hábitos saludables.
La oferta de actividades deportivas en el Ayuntamiento de Villaquilambre nace con ambición. No podría ser menos, teniendo en cuenta que la población crece a ojos vista y que el deporte es una de las áreas más demandadas. "Estamos desbordados por la aceptación", reconoce el Concejal Juan González. Para Constantino González, Coordinador de las actividades deportivas, es un motivo de satisfacción: "el año pasado se multiplicó por cuatro el número de participantes, lo que quiere decir que la gente responde". Y con la participación ya se justifican estas actividades: "intentamos educar a la gente con el deporte, que no se tome como algo para practicar y dejarlo ahí, sino que haya una continuidad, en niños y mayores", explica Celestino.
Para ello, y para cubrir una demanda creciente, el programa no para en todo el año: este verano se celebraron cursos de tenis, natación, aqua-aerobic y gimnasia de mantenimiento. También tuvo lugar un corro de lucha leonesa, y el cierre de la temporada se celebró por todo lo alto en Villasinta, en la fiesta del municipio. Pero el éxito del verano fueron los campamentos urbanos, que se estrenaron este año y dejaron encantados a niños y padres. En total participaron 110 niños, divididos en tres turnos. "En el típico campamento llevas a los niños y no sabes nada de ellos durante quince días, pero aquí no se perdía el contacto porque los niños volvían a dormir a casa. En general quedamos muy contentos, explica Celestino González, así que tenemos previsto repetirlo el año que viene".
Pero como no se puede vivir de éxitos pasados, la nueva temporada incluye novedades: la escuela de tenis funcionará también en invierno, la escuela de fútbol estrena una competición con tres equipos, y se ofrece la posibilidad de recibir un masaje terapéutico de mano de un fisioterapeuta especializado.
Todo esto se suma a las actividades ya consolidadas, como las escuelas deportivas: de kárate, gimnasia rítmica, lucha leonesa, bolos, balonmano y baloncesto. Siguen también funcionando la escuela de fútbol y la de fútbol sala; para los adultos y los más mayores hay gimnasia de mantenimiento y yoga; para los más pequeños, entre cuatro y seis años, está el Pequedeporte, con actividades de psicomotricidad y juegos pre-deportivos, para que se acostumbren al deporte desde pequeños.
En cuanto a la competición, por todo el municipio de Villaquilambre existen equipos en diferentes categorías. En fútbol, hay uno dentro de la Federación Leonesa y dos en la Liga de la Amistad. En fútbol sala destaca la creación del Torío-Villaquilambre, que agrupa a los tres equipos ya existentes. De este modo, con equipos estables y con una buena oferta de actividades se generan hábitos deportivos y se crea poco a poco una cantera que, con el tiempo, puede dar que hablar./ E. Fernández

Fiestas a medida
Los habitantes de Villarrodrigo de las Regueras viven las fiestas de manera especial. El día grande es el ocho de septiembre, pero la fiesta se puede alargar hasta una semana, en una celebración en la que cada vez participa más gente.
No es que Villarrodrigo sea un pueblo grande, geográficamente hablando, pero sí lo es en el corazón de sus habitantes. Entre los que llevan allí toda la vida -dedicados fundamentalmente a la ganadería- y los nuevos vecinos -muchos de ellos trabajan en León pero prefieren vivir en un sitio más tranquilo- que han venido a llenar las nuevas urbanizaciones, el pueblo se ha revitalizado con la mezcla. El punto de encuentro suelen ser las instalaciones polideportivas: frontón, tenis y pista polideportiva para fútbol y baloncesto; pero también la iglesia, hace poco restaurada, mantiene un cierto poder de convocatoria.
Lo que se llena es la celebración de Nuestra Señora, el ocho de septiembre, donde el pueblo echa la casa por la ventana. "Son las mejores fiestas del Ayuntamiento de Villaquilambre", afirma convencido Benigno Martínez, secretario de la Junta Vecinal y encargado de organizar el programa desde hace unos años. Sin contar con un gran presupuesto, el pueblo entero usa el ingenio para conseguir unas fiestas memorables. "Bueno, no es todo el mundo, porque ya se sabe que nunca llueve a gusto de todos. Pero también hay que decir que hace tiempo lo tenía que organizar casi todo yo solo, y en los últimos años cada vez me ayuda más gente", reflexiona Benigno.
Gracias al esfuerzo común, el programa de fiestas de este año estuvo repleto: varios días con orquestas, discoteca, toreo de vaquillas, sorteos y comida en abundancia para todos los que se acercaron, entre otras actividades -por supuesto, no faltó la procesión de Nuestra Señora-. Todo gratis, excepto una entrada simbólica para las vaquillas, que sirvió para pagar el seguro. Un programa completo donde no falta, todo hay que decirlo, el desacuerdo con la política del Ayuntamiento: "antes nos daban un dinero, que nosotros ajustábamos para poder pagar una orquesta durante dos días; pero ahora pagan directamente a la orquesta por un día. No sé por qué lo tienen que hacer así. Además, este año la orquesta nos dio bastantes problemas".
Efectivamente, el Ayuntamiento paga una noche de orquesta; la otra la paga el pueblo y el resto de las actividades, los patrocinadores del programa, que este año se han portado. Y así ha sido un éxito, cuenta Benigno Martínez, que este año se retira de la organización: "pero seguiré viniendo y ayudando si me lo piden. Porque en las fiestas hay que estar unidos y a mí me da mucha alegría ver a la gente, sea de la ideología que sea. Las fiestas no distinguen colores".
Una vez pasadas las fiestas de Nuestra Señora hay unos meses para recuperar el aliento y entrar de lleno en el maratón navideño, lleno de días festivos. Y el año que viene, la otra cita importante en el pueblo: San Isidro, patrón de los labradores./ E. Fernández

 
Revista Fusión. I  Aviso Legal  I  Política de privacidad 
Última revisión: abril 07, 2011.  FA