ras formarse durante
tres temporadas como ciclista en el Relax Fuenlabrada bajo las expertas
órdenes de Maximino Pérez, y mostrar su carácter de ganador en el
asfalto, Benjamín tiene una temporada por delante para demostrar que
puede ser un gran gregario de otros ciclistas más formados que él, amén
de sus propias posibilidades en un futuro cercano.
Ya demostró que puede dar mucha guerra en el campeonato de España del
año pasado, donde quedó cuarto en contrarreloj y consiguió el bronce en
la prueba de ruta, o en las dos últimas ediciones de la Volta a
Cataluña, en las que terminó entre los diez primeros de la
clasificación general. Benjamín afronta este nuevo año con una gran
ilusión en su nuevo equipo.
-Este año te estrenas con un equipo de los grandes.
¿Cómo se produjo el cambio?
-Yo llevaba tres años en el Relax Fuenlabrada, donde iba a
acabar el contrato, y me llamó el director del U.S. Postal Service,
Johan Bruyneel. Me dijo que tenían cierto interés en contar conmigo para
el año que viene. A partir de ahí, justo al acabar la Vuelta a España,
firmamos un contrato anual. Así comenzó mi aventura americana.
-¿Por qué crees que pensaron en ti?
-No lo sé. Sé que anteriormente el director ya se había fijado
en mí. Yo no soy un corredor que gane muchas carreras, pero soy regular,
y pienso que puedo llegar a ser un buen hombre de equipo. No sé si con
el tiempo podré aspirar a alguna victoria, espero que sí, pero suelo
estar ahí siempre más o menos delante en las clasificaciones. Si estás
con un equipo grande, echar una mano en determinados momentos y ayudar
como un buen gregario puede resultar útil. Ahí pienso que puedo
responder bien, quizá se fijaron en eso.
-¿A qué carreras crees que podrías aspirar?
-Este es mi primer año en el equipo, que es de aprendizaje y
para coger experiencia, y voy a ir en función de los compañeros, que son
muy buenos corredores. Para empezar, esta temporada ya estoy conociendo
un calendario más internacional que con el Relax-Fuenlabrada. Como
carrera a destacar siempre pienso en alguna clásica de la copa del
mundo, y carreras como la París-Niza o la vuelta a Cataluña que ya la
conozco, y en la que todos los años he conseguido brillar. Son carreras
en las que algún día me gustaría estar delante, pero ya te digo que
estando con gente como Chechu, George o Lance, siempre tienes que
trabajar y estar para los compañeros, y además a mí me viene muy bien
porque así cojo esa experiencia que me falta.
-¿Cómo valoras la etapa en tu anterior equipo?
-Pues yo estaré eternamente agradecido a mi representante
Antonio Vaquerizas, y tanto a Maximino como a José María Pérez, los dos
hermanos que llevan el Relax-Fuenlabrada, ya que me dieron la
oportunidad de ser profesional. Con ellos estuve tres años maravillosos,
tres años en los que aprendí que nunca hay que arrugarse, que siempre
hay que atacar, intentar buscar las escapadas, ser un corredor valiente.
Esa es la filosofía que tienen, ahí me fui haciendo ciclista. Y sin
cerrar ninguna puerta, porque es un equipo al que le tengo mucho cariño
y al que no me importaría volver.
-¿Cómo te definirías como corredor?
-Un poco todo terreno. El problema es que todavía no me acabo de
ver en un terreno exclusivo en el que destaque claramente. Estando en
forma subo casi con los primeros, contrarelojeo bastante bien, y en los
llanos me defiendo sin problema. Sobre todo prefiero las carreras con
puertos de media montaña, repechos, porque son muy duras y es donde
mejor me encuentro. Sin embargo, hay que intentar afinar en todos los
terrenos y conseguir un equilibrio, aunque siempre es bueno destacar en
uno donde puedas sacar un poco de renta.
-Con lo complicado que está el mercado ciclista, ¿cómo
se consigue llegar a un equipo grande?
-Es difícil. Para mí, esta oportunidad que me brindó el director
es un orgullo e intentaré aprovecharlo al máximo, porque hay gente que
está ahí, corredores mejores que yo, que están en equipos modestos,
intentando pasar a uno grande y están muchos años para conseguirlo. No
cabe duda de que tienes que ser bueno y tener algo, no se está ahí por
casualidad, pero el factor suerte y que el director busque un
determinado tipo de corredor también influye mucho.
"Creo que estamos pegando fuerte y dejando el pabellón
del ciclismo asturiano bastante alto" |
-Vas a tener a Chechu Rubiera de "hermano mayor" en el
equipo. ¿Qué piensas de él?
-Chechu, además de un magnífico ciclista, es una gran persona, y
eso lo sabe bien quien le conoce. Está ahí para lo que quieras, nunca
tiene un mal gesto ni una mala contestación, y siempre intenta ayudar en
todo lo posible. Además hay que decir que él fue muy importante dentro
de mi fichaje porque cuando Johan le preguntaba qué tal era yo, por ser
los dos asturianos, él me ayudó y dio informes positivos hacia mí. Y le
estoy muy agradecido.
-¿Qué te supone correr con un campeón como Armstrong?
-Es una pasada. Lance es un grandísimo profesional, se cuida y
entrena al máximo, y viéndole más de cerca entiendes por qué ha ganado
cinco Tours de Francia. Lo mide todo con mucha meticulosidad, no
descuida el más mínimo detalle, y además es un gran compañero. La verdad
es que me estoy llevando una grata sorpresa con él.
-¿Crees que conseguirá el sexto?
-Aunque sea muy difícil, yo creo que es el máximo candidato. El
lo sabe, sabe que puede, es un reto para él y yo pienso que en sus
piernas está el sexto. Lo que pasa es que son muchos factores los que
influyen a la hora de conseguir un Tour.
En estos cinco años Lance ha sido el más fuerte y también le ha
acompañado la fortuna. Casi no ha tenido caídas, y las que ha tenido no
han sido de gravedad. Yo creo que si todo va bien y se encuentra como
estos años, lo conseguirá. El único corredor que le puede ganar un Tour
es Ullrich. De ahí para atrás yo creo que nadie le puede hacer sombra, a
menos que tenga un bajón físico realmente importante.
-¿Es difícil salir al pelotón profesional desde
Asturias?
-Aquí desde que yo corría en cadetes, han bajado mucho las
licencias y hay menos corredores. Sí es verdad que tenemos corredores
muy buenos de base, como son Javier Navarro o Mario de Sárraga, lo que
pasa es que en escuelas y categorías más inferiores no veo que haya esa
continuidad que había hasta ahora. En cuanto a profesionales, ahora
mismo somos bastantes, a pesar de que tenemos las bajas de Ricardo
Valdés y Marcelino García, que es una pena que hayan tenido que dejar el
ciclismo por falta de equipo. Los demás, tanto Santi Pérez, Samuel
Sánchez, Chechu, y los demás estamos ahí creo que pegando fuerte y
dejando el pabellón del ciclismo asturiano bastante alto. ∆