Texto: Chabe Hidalgo e Isabel Gómez
No es
una escollera normal. Sus bloques de hormigón no sólo defienden con fuerza el
actual puerto marinero, también ponen una gran nota de color. Un paisaje lleno
de energía y contenido que se divisa desde diferentes puntos del entorno.
Agustín Ibarrola, el gran artista bilbaíno es el artífice del cambio. Con su
obra "Los cubos de la memoria" muchas miradas se han vuelto hacia este concejo
asturiano, declarado ya en 1995 municipio de excelencia turística. Es la gota
que colma un vaso lleno de contenido. El concejo llanisco, en sus 263'56 km2
es el lugar de destino de muchos visitantes que buscan un pequeño paraíso.
Cuarenta playas de fina y blanca arena se distribuyen en 56 kilómetros de
costa. También impresionantes acantilados y acontecimientos naturales únicos
como los bufones, que muestran la furia del Cantábrico.
Llanes pertenece a la Mancomunidad del Oriente de Asturias. Disfruta del
privilegio de la costa y la cercanía a paisajes naturales como el de Picos de
Europa. Por su salvaje belleza es el espacio elegido por varios directores de
cine para rodar sus películas. Y quien lo hace una vez, repite.
Hacia el interior, se encuentra el paisaje protegido de la Sierra del Cuera,
una impresionante muralla caliza cuyo punto más alto, el pico Turbina (1345m.)
se sitúa en el vecino concejo de Peñamellera Baja. Es la barrera natural hacia
el sur de este concejo de territorio poco accidentado, con extensas planicies,
rasas costeras y amplios valles. El río Guadamía al Este lo separa del
municipio de Ribadesella, mientras que el curso del río Cabra lo hace de
Ribadedeva. El mar Cantábrico es su límite al norte y propicia la existencia
de una excelente gastronomía que tiene un gran contenido en productos del mar,
sin desmerecer en nada los productos de la huerta.
Foto: Juanjo Arrojo |
Llanes, la villa por excelencia
• El mayor atractivo de esta villa marinera reside en su casco antiguo, el
puerto, y las Casonas de Indianos, entre otras maravillas que descubriremos
recorriendo sus calles.
Durante el reinado de Alfonso IX (s.XIII), comienza la construcción de las
murallas, el Torreón y la Basílica de Santa María, esta última de estilo
gótico, aunque también conserva una portada románica y en su interior un
retablo plateresco. Está situada en la plaza de Cristo Rey, casi en el centro
de la muralla.
Las Casonas de los Indianos conforman gran parte del patrimonio monumental de
la villa y fueron construidas durante los s.XIX-XX con capital llegado de
América. En un paseo por la villa podemos visitar el Palacio de los Duques de
Estrada (s.XVII), de grandes dimensiones y de estilo barroco; la Casona del
Cercáu (s.XVI), palacio de antiguo linaje considerado Monumento
Histórico-Artístico y unido a una capilla del mismo nombre; el Palacio de
Gastañaga (s.XIV), una de las pocas muestras de palacio medieval que se
conservan en Asturias; el Palacio de Posada Herrera (s.XVII) se encuentra
restaurado y hoy es Casa de Cultura; el Casino, edificio modernista construido
en 1910 situado en la calle principal.
La villa está salpicada de numerosas capillas. En un pequeño recorrido podemos
visitar la de Santa María Magdalena de corte medieval; la Capilla de San Roque
situada en la plaza del mismo nombre y que antiguamente formaba parte de un
hospital de peregrinos; la Capilla de la Guía en el alto de San Antón desde
donde se divisa la villa, el faro y el puerto; y la Capilla de Santa Ana
reconstruida en el s.XVII sobre una fábrica medieval.
Foto cedida por el Ayuntamiento de Llanes |
Una nueva era llanisca
• Pero sin lugar a dudas, la estrella revelación se encuentra en el puerto,
coloreado recientemente con los "Cubos de la Memoria", obra del pintor vasco
Ibarrola, que transformó los cubos de hormigón del espigón en una escultura
policromada.
Al visitante que contempla esta obra le asaltan multitud de colores y formas,
a cada cual más vistosa y atrevida. El artista ha creado un paisaje nuevo en
el puerto llanisco que no se puede contemplar como un cuadro o una escultura
sino que es un nuevo concepto de arte en el que el espectador se
interrelaciona con los temas que figuran en los cubos.
Ibarrola pinta en los más de 300 cubos una memoria de tres caras: la
memoria del arte simbolizada en códigos prehistóricos, la memoria del
artista que transmite desde esta obra una síntesis de su larga trayectoria
creativa, y la memoria del territorio representando lo más
significativo de la prehistoria, historia marinera, rural, urbana y emigrante
del concejo.
En julio de este año podremos volver a ver a Ibarrola, junto con su equipo de
artistas llaniscos, ejecutando la segunda fase de este proyecto. En esta
ocasión atenderá el frente a mar abierto, la cara norte. Una vez completada la
obra, las simbologías plasmadas en la triple dimensión de "Los cubos de la
memoria" podrán reconocerse con la ayuda de una guía cultural ilustrada "Las
rutas de la memoria".
La trascendencia de la obra es tal que creadores asturianos como el escritor y
director de cine Gonzalo Suárez se encargarán de la elaboración de un
documental sobre este proyecto y su realización. Además la escritora Angeles
Caso participará en la publicación del catálogo de la obra y el compositor
Ramón Prada en la banda sonora de la obra.
Aunque aún está sin finalizar, Llanes ya puede hablar de un antes y un después
de "Los Cubos de la memoria".
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