-¿Qué líneas tiene planteadas la
asociación?
-En principio yo no me había planteado presentarme, pero por compromiso
con un grupo de personas que habían trabajado bastante en nuestra asociación,
presentamos la candidatura. Es una candidatura continuista, que sigue adelante
con una serie de proyectos que estaban en marcha y que no habían concluido.
Tenemos la idea también de incorporar gente nueva, sobre todo gente joven que
está teniendo iniciativas empresariales importantes y que pueden hacer una labor
para la asociación. Queremos abrirle las puertas a todo el mundo que quiera
trabajar por este sector.
-¿En qué vais a centrar vuestro trabajo?
-Hay proyectos de departamentos importantes, de asesoría fiscal,
contable, etc. Ya estamos trabajando en ellos. Hay departamentos nuevos, de
calidad, de prevención de riesgos laborales, y todas aquellas necesidades que
puedan tener los asociados. Los dos pilares básicos sobre los que se van a
centrar el resto de proyectos, son los relacionados con temas de calidad y
formación. En cuanto al primer punto, hemos estado trabajando con el sistema de
calidad del Instituto para la Calidad Turística española, y se han certificado
precisamente cuatro establecimientos asturianos de quince a nivel nacional, lo
cual ha supuesto un esfuerzo muy importante en nuestra asociación.
-¿Y en cuanto a formación?
-La Asociación de Hostelería lleva trabajando en ello desde el año
noventa y cuatro. Así se ha creado la Escuela de Hostelería. Este año hemos
conseguido que nos homologuen dos títulos de grado medio y tres de grado
superior, con lo cual estamos dando ya formación oficial a partir de este año.
Nosotros creemos que es muy importante la formación continua y ocupacional. La
formación continúa porque el sector de la restauración está necesitado de
aplicar nuevos métodos de gestión y también de implantar nuevas tecnologías. Y
la formación ocupacional, porque uno de los graves problemas que tiene ahora el
sector es la falta de personal cualificado. Con la formación reglada, estamos
consiguiendo unos profesionales de muy alto nivel, pero muy pocos. A través de
los cursos de formación ocupacional, cursos cortos, se trabaja para conseguir
una cualificación suficiente que permite que los alumnos se puedan incorporar
rápidamente al sector, a la vez que se intenta paliar, en cierta medida, la
demanda de puestos de trabajo cualificado. En ese sentido este año hemos firmado
un convenio muy importante con la Fundación para el Desarrollo de la Formación
en las comarcas mineras. Durante dos años se formarán a trescientos sesenta
desempleados impartiendo un total de 24 cursos y de quince alumnos cada uno, y
con el compromiso de colocación casi del sesenta por ciento de ellos. Es un
proyecto muy ambicioso y que a la asociación le supone una gran esfuerzo,
creemos que es una de las demandas del asociado, y va a contribuir a resolver,
no definitivamente pero sí en gran parte, esa demanda de personal cualificado.
-¿Qué apoyos se necesitarían para solucionar esta cuestión?
-Nosotros este problema lo tenemos en la Escuela de Hostelería. De la
poca gente que sale, muchos se van fuera a completar esa formación. Muchos
quieren aprender idiomas y están en una edad en la que deben seguir engordando
su curriculum. A los dos o tres años vuelven, más formados. Es un efecto contra
el que tampoco podemos luchar nosotros solos. En el contacto que he tenido con
las distintas administraciones, tanto locales como regionales, hemos visto la
importancia de esa simbiosis entre los empresarios y los políticos para que
cualquier tipo de proyecto salga adelante en materia turística. Los unos sin los
otros no podríamos vivir. Cualquier proyecto empresarial que sea rechazado por
las administraciones pues no tendría futuro y viceversa. Somos conscientes de
esa necesidad recíproca y debemos trabajar en la misma línea. Por nuestra parte
siempre hemos tenido las puertas abiertas, y yo lo he manifestado a las
distintas administraciones. Cualquier idea, cualquier iniciativa de las
administraciones va a tener nuestro consejo y nuestro asesoramiento si nos lo
piden.
-De hecho habéis contribuido bastante a la creación de la nueva Ley del
Turismo.
-Exacto. Hemos hecho muchas alegaciones desde nuestra asociación, unas
han sido tenidas en cuenta y otras no. Ahora estamos a la espera del desarrollo
reglamentario posterior, y también creemos que podemos decir muchas cosas.
Nuestra asociación es una asociación que engloba todos los subsectores del
turismo: restaurantes, sidrerías, cafés, bares, discotecas, pubs, camping,
pensiones, hoteles, casas de aldea, etc. Nuestra asociación está prácticamente
en toda la región y ese es uno de los activos importantes, aunque quizás a la
hora de gestionarlo presenta mayor dificultad. Engloba en torno a dos mil
empresas y creo que las opiniones que manifestamos desde nuestra asociación
tienen una base social importante.
-¿El sector turístico debe llegar a ser el gran motor económico de Asturias?
-Hombre, se habla de que el sector turístico pueda llegar a ser
sustitutivo del industrial que va en declive en nuestra región. Yo creo que no
lo va a lograr, aunque sí va a ser un sector importante. De hecho está creando
un empleo muy importante y está contribuyendo de una manera muy interesante al
producto interior bruto. Pero creo que todavía tenemos mucho camino por andar.
-¿Cómo ves tú el panorama turístico a explotar de Asturias?
-Los avances en infraestructuras son importantes, pero quizás están
llegando tarde para situarnos en el mercado turístico. Hoy por hoy, con la era
de la globalización, cualquier problema nos afecta de una manera u otra. Los
atentados terroristas en Estados Unidos van a afectar de una manera importante
al turismo, y quizás todavía no sepamos en qué medida. En ese sentido estamos a
la expectativa de cómo se puede mover el mercado internacional del turismo.
Nuestra región cuenta con unos recursos muy importantes que estamos explotando,
pero todos creemos, incluso dentro de la administración, que se pueden explotar
de una mejor manera. Todo parte de un conocimiento claro de la demanda, de qué
aspectos valora esa demanda de una manera más positiva. Entonces hay que
potenciar y centrar las campañas y los productos que ofrezcamos al mercado en
ese tipo de recursos. Las infraestructuras, las comunicaciones, son temas
fundamentales también para el desarrollo del turismo. Es difícil hacer
valoraciones demasiado concretas. El mundo del turismo se ve afectado por muchas
circunstancias.
-A nivel personal ¿qué te está suponiendo compaginar esta nueva
responsabilidad con tu vida privada y familiar?
-Mucho. La verdad es que yo no me lo esperaba. No era un planteamiento
que hubiese hecho a priori. Ahora mismo la asociación, precisamente con los
proyectos que tiene en marcha, que son muy ambiciosos, exige también bastantes
horas, y aunque estamos trabajando por una profesionalización de la gestión
dentro de la propia asociación, porque ha crecido también en personal y en
servicios que ofrece, hoy por hoy la verdad es que le estoy dedicando bastantes
horas. Esas horas se las quito a la familia y al ocio, y al final acabas
atendiendo en menor medida a tus establecimientos o tus empresas. Pero si
trabajamos por el sector también estamos trabajando por cada una de nuestras
empresas.
-¿Te sientes a gusto con esta nueva responsabilidad?
-Sí, es un reto personal. Y cuento con la ayuda de una junta directiva y
un comité ejecutivo que está también muy comprometido con la asociación y que me
ayudan de una manera muy importante. Yo solo, por mi cuenta, no hubiera dado
pasos. ∆