TAPIA DE
CASARIEGO
LA OLA
DEL CANTABRICO
Tapia es una tierra que ha sabido
unirse a la mar y extraer de ella su fuerza y su belleza. Un interior
productivo y una costa de ensueño que se abre ante el visitante y le
invita a jugar con sus hijas, las olas, y a disfrutar de sus manjares.
Texto:
Quino Hernández y Chabe Hidalgo / Fotos: Juanjo Arrojo.
Si hay
una zona que ha sufrido un desarrollo importante en el marino extremo
occidental de Asturias, ésta es Tapia de Casariego. Ya desde la época
romana Tapia fue un enclave en donde se realizaron excavaciones para
extraer oro, como lo muestra lo que hoy día se conoce como los Lagos de
Silva. Pero actualmente es otro oro el que reluce en el panorama de este
concejo.
Este municipio se encuentra situado, al oeste y al sur con el concejo de
Castropol, al este con el concejo de El Franco y al norte con el mar
Cantábrico. La nacional N-634 es la arteria principal de comunicación.
En apenas hora y media se llega a la capital del Principado y en unas
dos horas a Santiago de Compostela.
El medio natural en el que está ubicado este concejo es el componente
seductor que fascina a tantos visitantes. El turismo, el ocio y el hecho
de que muchas familias elijan este concejo para instalar su segunda
residencia ha hecho que gane relieve en los últimos tiempos en esta
parte del occidente asturiano. Hay que sumar la presencia de los
aventureros amantes de las olas, que con su tabla de surf desafían la
fuerza del Cantábrico. Toda una cultura surfista tiene aquí su
asiento. Tapia se convierte además en un centro de atención con motivo
del Campeonato Europeo de Surf, que se celebra anualmente en el concejo.
Es un hecho constatado el fuerte atractivo que ejerce Tapia como centro
de veraneo, lo que la consolida como la principal villa turística de
esta zona. Pero en este nuevo siglo que ha comenzado Tapia quiere ir
más allá y no ser sólo un referente del verano astur. Su oferta se
está ampliando a otras épocas del año. De esa manera pretende captar
a los visitantes que llegan buscando la tranquilidad y el sosiego en un
medio natural, libre de contaminación y de ruido, un lugar en el que se
puede practicar deportes al aire libre.
La
villa de Tapia • La capital
de este concejo costero se levanta aprovechando un entrante de mar entre
dos promontorios. Las blancas casas de pescadores se combinan con las
modernas edificaciones acordes con el entorno.
El puerto pesquero está muy unido a la villa. Su historia se
remonta atrás en el tiempo, cuando era refugio para los balleneros
vascos, pero no fue hasta la segunda mitad del siglo XIX cuando se
constituyó como tal puerto. Tuvo su mayor protagonismo en la primera
mitad de este siglo, momento en el cual la actividad comercial y
pesquera fue intensa. Posteriormente, con la imposición del transporte
por carretera y el cierre de las fábricas de conservas que estaban
asentadas en este municipio, la actividad quedó reducida a la pesca. El
puerto, de un atractivo tipismo, está conformado por los barrios de La
Guardia, San Sebastián y San Blas, el más antiguo de Tapia, con su
ermita del siglo XVI. Su trazado invita al visitante a pasear por sus
empinadas calles y subir hasta la capilla de San Sebastián, una atalaya
desde la cual se puede disfrutar de una magnífica panorámica de toda
la villa. No podemos olvidarnos del emblemático faro de Tapia, que
durante sus más de 140 años de existencia ha alumbrado a tantos
marineros. Está situado en una pequeña isla que a su vez está unida a
la localidad por un dique que permite el paso a pie en cualquier momento
del día.
El centro neurálgico de la villa está situado en la plaza de la
Constitución, comúnmente conocido por El Parque.
Por su atractivo y carácter peculiar esta villa marinera es visitada en
todas las épocas de año.
Al ritmo de la mar
• Como viene siendo habitual, Tapia ofrece cada Semana Santa un
gran espectáculo deportivo de surf, al ser escenario de la prueba
puntuable para el Campeonato Europeo de Surf. En concreto este año
se ha celebrado con gran éxito la decimotercera edición y el décimo
Memorial Peter Gulley. Hay que remontarse a 1968 cuando un grupo de
jóvenes venidos de Australia se vieron seducidos por las playas de
Tapia, entre ellos Peter y Robert Gulley. La llama del surf de Peter
Gulley ha quedado encendida en el recuerdo de los habitantes de esta
villa. El concejal de Cultura y primer teniente alcalde del Ayuntamiento
de Tapia, Francisco Pérez Sanjurjo, comenta que "a lo largo de
todo el año se ven chavales de doce y catorce años, con el paipo,
iniciándose en este deporte. Luego, cuando tienen más conocimiento, se
pasan ya a la tabla de surf". La realidad es que ya existe una
generación de veteranos que durante casi todo el año practican esta
modalidad deportiva. Adela Bas y José Alonso, junto con un grupo de
amantes del surf son los que organizan todos los años este Certamen
Internacional. "Organizar esto lleva trabajo -manifiesta Adela Bas-
y estoy bastantes meses organizándolo, porque hay que comenzar buscando
el dinero, buscando casas comerciales a las que les interese hacer
publicidad en el evento". El montaje de un acontecimiento de este
calibre requiere esfuerzo y colaboración, puesto que hay que organizar
toda una infraestructura para atender los requerimientos mínimos que
exige una competición de esta categoría. En este sentido Adela Bas
comenta que "en verdad estamos bastante solos en esto, sólo tengo
a mi marido y un amigo nuestro. Yo me encargo del papeleo y ellos ayudan
a colocarlo todo. También tenemos que buscar a gente que nos ayude con
lo que es la infraestructura propia del campeonato". La importancia
y trascendencia de un acontecimiento de estas características, que
arrastra a miles de personas, no ha pasado desapercibida y cuenta con el
apoyo no sólo del Ayuntamiento de Tapia sino también de la Dirección
Regional de Deportes y de la Dirección Regional de Turismo. En Tapia,
quince días antes de este campeonato, no hay ni una cama libre y la
gente tiene que desplazarse a los alrededores para hospedarse. En este
sentido Adela puntualiza que "la gente ha empezado a ver que este
acontecimiento es algo verdaderamente importante para mover el turismo
de toda la zona de occidente". Añade que "el surf ha aportado
muchísimo a todos los niveles y ha hecho de Tapia un pueblo cosmopolita
a donde viene gente de toda Europa para contemplar el
espectáculo". Cabe mencionar también el Campeonato Pro-Junior de
Surf, que se celebra en verano y que ha partido de la iniciativa de Don
Diego Méndez, amante e impulsor de este deporte. Los participantes,
además de obtener el trofeo y el premio correspondiente, tienen la
oportunidad de clasificarse entre los cuatro y seis primeros puestos
para optar al Campeonato Mundial Pro-Junior que se viene celebrando en
la isla de Hawai. |