-¿Qué balance haces de la actuación del equipo de gimnasia femenino en Sydney?
-Bueno yo creo que hicimos unas competiciones buenísimas. Al final conseguimos un quinto puesto, como en Barcelona, algo que nadie se esperaba. Quedamos por delante de Ucrania, un país del que hace cuatro años estábamos a años luz. Creo que hemos sido un poquito la sorpresa.
Con la expectación que había por saber el papel que podíamos hacer en estos juegos, creo que hemos dejado a España en un gran nivel.

-Y a título personal ¿estás a gusto, estás contenta con el papel que hiciste?
-Pues estoy a gusto, sí, porque yo llevaba el pie bastante fastidiado. Me dolía bastante porque tuve una rotura hace unos meses y eso me hizo frenarme en cada prueba de cara a intentar hacerlo todo mejor. Yo sabía que no iba poder llegar a mucho más, tal y como tenía el pie. Teniendo en cuenta eso, sí que estoy contenta de mi actuación.

-¿Cómo vive una gimnasta de alta competición el hecho de estar preparándose durante cuatro años, y por una caída o un accidente, saber que va a ir a los Juegos muy por debajo de sus posibilidades reales?
-La verdad es que se te pasa de todo por la cabeza. Se te echa el mundo un poquito abajo y dices ¿tanto entrenar para esto? Incluso te planteas tirar la toalla. Pero bueno, me quedaban dos meses para poder prepararme y me ayudaron mucho la familia y los entrenadores. Decidí seguir adelante, decidí luchar, y al final con la ayuda de todos, conseguí estar en la olimpiada.

"Yo creo que Ado debería ayudar más al deporte base, y no sólo darte el dinero cuando consigues la medalla"

-Ese quinto puesto ha sido una grata sorpresa en unas olimpiadas en las que el equipo español en general no respondió como se esperaba. ¿Crees que no se os valora a las gimnastas lo suficiente?
-Yo creo que a la gimnasia no se le da mucha importancia. La gente está más pendiente en las olimpiadas o cuando hay alguna competición, pero poco más. Yo espero que con lo bien que hemos quedado en Sydney la gente se interese un poquito más por este deporte, que es minoritario en España, pero que fuera está muy extendido y se le da mucha importancia.
A ver si a partir de esta olimpiada hay más niños que practiquen la gimnasia, y se la empieza a valorar como es debido.

-¿Se os ha apoyado lo necesario desde las instituciones de cara a estas olimpiadas?
-Se hablaba de que si habíamos conseguido pocas medallas, de que si el deporte español no estuvo a la altura. Yo creo que no se puede juzgar así a un deportista, que la gente que hace esos balances es porque no sabe el trabajo que conlleva estar en una olimpiada, aunque es cierto que no se cumplió lo que tenían que haber hecho. No hicieron bien su trabajo, vale, pero toda la culpa siempre es desgraciadamente para el deportista.

-En ese sentido ¿piensas que hay que revisar el plan Ado?
-Pues sí. Habría que revisarlo y hacerlo pensando más en el deportista, porque se hizo sin pensar en para quién se estaba haciendo realmente.
Yo creo que Ado debería ayudar más al deporte base, y no sólo darte el dinero cuando consigues la medalla, porque antes de conseguir una medalla, hay que estar trabajando durante muchos años. Habría que ayudar también durante esos años porque sin ellos la medalla no hubiera llegado nunca.

"La medida de una olimpiada no te da el pase para ir a otra. Hay que entrenar mucho, tienes que ganártelo todo otra vez"

-Respecto a vuestro flamante quinto puesto en la Olimpiada, igualasteis el mejor puesto conseguido en Barcelona. ¿Crees que os podéis plantear en un futuro próximo superar ese "techo"?
-Pues yo creo que sí, lo que pasa es que las competiciones están ahí, y superar a países como Rusia o Rumania, con la historia que tienen detrás es muy difícil para un país como España, que nunca ha subido del quinto puesto. Pero bueno, yo creo que con el tiempo sí se podrá alcanzar ese nivel.

-Y tú personalmente, cuando no estés lesionada ¿a qué puesto puedes aspirar?
-Yo creo que puedo colocarme entre las diez primeras del concurso individual.

-Empezaste a hacer gimnasia aquí en Asturias y luego tuviste que marcharte a Madrid para culminar tu preparación. ¿Cómo ves el nivel de la gimnasia en Asturias?
-Aquí en Asturias, el único club fuerte es el Grupo Covadonga. Cuando yo me marché a la Blume estaba entrenando con Amparo Abejón, pero desde que se fue Amparo el grupo dio un bajón bastante importante.
Actualmente hay muchas niñas pequeñas, pero todavía para Atenas, o para marchar a Madrid, no hay gente.

-¿Crees que se debería intentar recuperar a Amparo?
-Pues yo creo que sí, pero, como siempre, gracias a muchos directivos, es prácticamente imposible que Amparo vuelva. Hacen falta muchos años de trabajo para llevar una línea en el equipo nacional y empezar ahora desde cero sería muy duro para ella.

-¿Qué te planteas en el futuro? ¿Hasta qué edad piensas seguir en la gimnasia?
-No me planteo una edad porque la gimnasia da muchas sorpresas. Ahora me vuelvo a Madrid y lo que me planteo es el mundial que se celebrará el año que viene. Quiero prepararlo a fondo para hacer allí un buen papel.

-¿Con qué te quedas de la experiencia de Sydney, aparte de lo que fue la competición en sí?
-Con la Villa Olímpica. Para mí la Villa ha sido impresionante. El estar ahí tantos deportistas, ya sean de un deporte o de otro, la unidad, el ambiente que se respiraba entre todos, ha sido algo que no se me va a olvidar. Una experiencia para recordar.

"Habría que revisar el plan ADO y hacerlo pensando más en el deportista"

-¿Tienes ya una parte de la mente pensando en Atenas 2004, las próximas olimpiadas, o es un poco prematuro?
-Pues un poquito. La medida de una olimpiada no te da el pase para ir a otra. Hay que entrenar mucho, tienes que ganártelo todo otra vez... pero si Dios quiere estaré allí. De momento prefiero pensar en el presente e ir consiguiendo metas más cercanas.