-Llevas ya suficiente tiempo en
Oviedo como para conocer en profundidad a tus dos equipos, el Spartak de Moscú y el
Oviedo. ¿Has vivido un cambio muy brusco de un equipo a otro?
-Bueno, Spartak es un equipo grande que siempre juega a ganar en su estadio y
fuera de él. El Oviedo nunca ha ganado ninguna copa, pero eso puede engañar porque tiene
un buen nivel en España, que es una liga muy difícil. Ha sido sobre todo un cambio de
mentalidad.
-Después de conocer a fondo la liga española, ¿qué
opinión tienes de ella?
-Para mí es la mejor liga del mundo. Aquí todos los equipos cuentan y
tienen opciones. En Rusia hay dos o tres equipos que sobresalen mucho y los demás casi no
tienen posibilidades.
En esta liga cada partido es importante porque nunca sabes cómo puede ser el resultado
final.
-Los rusos tienen fama de carácter frío. ¿Notaste
también diferencias en la afición?
-En Rusia hay mucha afición por el fútbol, gusta mucho, lo que ocurre es
que en España, como en Italia, la afición es mucho mayor, se vive con mucha más
intensidad. La radio, la televisión, la prensa, siguen muy de cerca este deporte. Yo
prefiero la afición española a la italiana, porque en España son más tranquilos.
-Tu fichaje fue en su momento uno de los más polémicos que
ha hecho el Real Oviedo. Hubo que acudir incluso a la FIFA. ¿Qué hizo que al final te
decidieras a venir a este club?
-La situación en mi país era muy difícil, era peligrosa. En España tenía
mejor contrato económico, y más tranquilidad que allí en Rusia. Yo busqué lo mejor
para mi familia.
-Tú que lo viviste en primera línea, ¿cómo describirías
la situación que se está viviendo allí?
-Desde hace unos años las mafias y la corrupción están controlando cada
vez más todo lo que pasa en mi país. Unos pocos tienen casi todo el dinero y los
recursos y la inmensa mayoría de la gente no tiene prácticamente nada. Casi todos los
políticos, banqueros, policías, jueces, están corrompidos.
-¿Cuál crees tú que sería el camino para solucionar esa
situación?
-Lo veo muy difícil. La única forma, creo, sería hacer una gran limpieza y
sacar del poder a todos los que estén corrompidos. Sería un cambio muy difícil de
hacer.
-Volviendo a España, a tu actual equipo, que vive ahora un
buen momento. ¿El éxito se basa en el trabajo en equipo?
-Tenemos una plantilla de mucha calidad, jugadores muy buenos y un entrenador
con las ideas muy claras de lo que hay que hacer.
Pero además tenemos una base sólida entre nosotros, porque llevamos unos años jugando
juntos y ya nos conocemos. Eso es muy importante para un equipo.
-¿Hay buena relación entre vosotros?
-La relación es normal, pero últimamente estamos haciendo cosas que antes
no hacíamos, como cenar juntos, por ejemplo, y eso, convivir fuera del entrenamiento,
mejora la relación.
Si los jugadores de un club son amigos además de compañeros de juego, eso luego se nota
en el campo. Es algo difícil de conseguir porque somos muchos y cada uno tiene su vida,
pero es muy importante.
-En estos años has jugado en varias posiciones en el campo.
¿Dónde te encuentras mejor?
-En la defensa de central, que es donde yo jugaba en el Spartak y en mi
selección. Es donde creo que soy mejor para el equipo.
-¿Puede el Oviedo este año volver a pensar en la UEFA?
-El Oviedo tiene ahora mismo todas las condiciones para jugar la UEFA. Buenos
jugadores, buen entrenador y buen equipo... Pero yo creo que el club todavía se ve como
un club pequeño y cuando sale a jugar fuera de casa muchas veces hay miedo.
Yo creo que podemos ir a la UEFA y hacer grandes cosas si cada jugador piensa y se cree
que podemos hacerlo, si se confía más en nosotros. Lo demás ya lo tenemos.
-Por último Víctor, ¿qué perspectivas tienes para el
futuro?
-Bueno me queda aún un año de contrato. Luego depende de lo que decida el
club. También me gustaría ir a un club grande, si la oferta fuera interesante, pero de
momento me encuentro muy bien en Oviedo, me parece un buen club y la ciudad nos gusta
mucho a mi familia y a mí. Me gustaría poder renovar.