Mantecadas de Astorga
Ingredientes (como pá 5 personas):
150 grs. de mantequilla • 150 grs. de azúcar • 150 grs. de harina • 10
grs. de canela en polvo • 4 yemas y 2 claras de huevo • Una cucharadita
rasa de levadura royal
Me
voy a ir en Carnavales a Astorga. Allí está Manoli, una maragata que me
ha enseñado a hacer las famosas mantecadas. Conocí a su marido haciendo
montañismo. Un día teníamos sed y encontramos un pozo. Le dije: tira una
piedra y si hace ruido, es que hay agua. Lo hizo pero no oímos nada. Así
que le animé a tirar una piedra más grande. La tira y a continuación
viene una cabra corriendo y se tira al pozo. Al rato llega un pastor, y
nos pregunta por la cabra. Le contamos que había pasado corriendo y se
había tirado al pozo. El hombre se lleva las manos a la cabeza y dice:
"No puede ser. ¡Si la había atado a una piedra así de grande!".
Lo primero es hacerse con las cajitas de papel para las mantecadas. Como
veréis es una receta barata, ideal para los tiempos que se avecinan. El
marido de Manoli, le contaba a Manolín, su hijo, qué es la crisis:
-¿Ves esas chicas que salen en la tele en bañador, que son tan guapas y
que papá siempre se queda mirando…?
-Sí, papá.
-¿Y recuerdas ese vino que papá guarda en la bodega, que está riquísimo
y sólo saca en Fin de Año?
-Sí, papá.
-Pues la crisis son tu madre y la gaseosa.
Batimos la mantequilla y el azúcar hasta conseguir una pasta espumosa,
añadiendo las cuatro yemas a intervalos sin parar de batir.
Con explicaciones como éstas el niño tiene encima un fregado curioso:
-Papá, ¿dónde está Rusia?
-Pregúntale a tu madre, que es la que ordena la casa.
Añade la harina, la levadura y la canela. Bate las dos claras a punto de
nieve e incorpóralas a la pasta. Llena los papelitos y cuécelos a horno
moderado hasta que se doren.
Me despido con una historia de Carnavales. Una pareja estaba invitada a
una fiesta de disfraces, pero a ella le dolía la cabeza y le dijo al
marido que se fuera solo. A la mujer se le pasa el dolor y decide ir a
la fiesta, aunque su marido no sabía cuál era su disfraz. Enseguida le
ve bailando en la pista con cada chica con la que se cruza, así que se
le acerca y comienza a seducirlo. En un momento él le hace una
proposición al oído que ella acepta. Salen, entran en un coche y tienen
sexo en todas las posiciones. A medianoche, y sin desenmascararse, ella
se escabulle. Vuelve a casa, se saca el disfraz y se mete en cama,
preguntándose qué explicación le dará su marido:
-¿Cómo fue?
-Bueno, lo de siempre. Ya sabes que no lo paso bien cuando no estoy
contigo.
-¿Bailaste mucho?
-Ni una sola pieza. Cuando llegué, me encontré con Pedro, así que nos
fuimos a jugar al póquer toda la noche. ¡¡¡Lo que no vas a creer es lo
que le pasó al tipo al que le presté mi disfraz...!!!
/ El Cuñao |