|
| |
|
Foto: Fundación Oso Pardo
|
FEBR ERO 2005
FUNDACION OSO
PARDO
Entre las comunidades de Asturias, Cantabria y Castilla y León viven las
dos únicas poblaciones de oso pardo que existen en nuestro país. Un
tesoro natural que hay que cuidar, y con el que están comprometidos
desde ecologistas hasta administraciones. Se trata de una lucha
incansable que encabeza desde el 92 la Fundación Oso Pardo, a través de
su presidente Guillermo Palomero.
|
Foto: Valvanera |
C ontra todo
pronóstico, puesto que nadie de su familia tiene conexión alguna con la
naturaleza, Guillermo se apasionó por los osos a través de los
documentales de Félix Rodríguez de la Fuente. Estudió, compró libros y
los buscó incansablemente: "Tardé años en ver el primero, fue en el 82 y
mi primer encuentro no me defraudó. Fue muy bonito, era una hembra con
pequeñitos y disfruté enormemente viéndolos. Luego seguí buscando osos
al tiempo que hacía otras cosas, porque me gusta mucho la ordenación del
territorio y he trabajado con otras especies, como ciervos, urogallos y
lobos. Pero siempre me ha apasionado el oso, así que a medida que iba
conociéndoles y disfrutando de ellos iba viendo sus problemas de
conservación. Teniendo tanta información y habiendo disfrutado tanto con
ellos, me sentí muy obligado a ayudarles y por eso en el 92 un grupo de
amigos decidimos crear la Fundación Oso Pardo".
-La Fundación sigue fiel a sus orígenes, ¿en qué líneas trabaja
hoy en día?
-Empezamos con tres frentes que son los mismos que mantenemos
abiertos ahora mismo. Por un lado combatimos la caza furtiva en toda la
Cordillera Cantábrica a través de siete patrullas formadas por 24 chicos
y chicas de las zonas donde está el oso. Luego estamos comprando montes
y fincas para ponerlos a funcionar y demostrar que se puede sacar
rentabilidad a un monte sin perder calidad de hábitat. Y el otro frente
es la formación y la sensibilización, que nos parece fundamental. Los
cambios de actitud suelen ser culturales y mientras que en el entorno
urbano se apoya la conservación del oso, a la gente que convive con él
hay que ir ganándosela.
-¿Cuál es hoy la mayor amenaza para la supervivencia de estos
animales?
-Hay que decir que el oso cantábrico es un oso especial. Los
genetistas lo consideran como la quinta línea genética de oso pardo y en
términos de conservar la biodiversidad sería muy importante que este oso
pardo no desapareciera. Nuestro oso tiene tres puntos débiles: la caza
furtiva -lazos, trampas ilegales, venenos...-, la pérdida de hábitat que
se produce cuando hay un incendio o cuando se hace una carretera que
pasa por su ruta, y luego el tercer problema es el pequeño tamaño de la
población.
-Pese a todos los documentales, ¿seguimos desconociendo el mundo
animal?
-Sí, falta mucho por conocer y ésa es una de las cosas que me
mantiene activo y con energía. La naturaleza siempre te enseña, así que
si vas con ganas de aprender todos los días ves cosas nuevas en el
monte. ¿Cómo es posible que nunca haya visto esto, si he pasado cien
veces por este sendero? Pues así es la naturaleza, y eso te sigue
manteniendo apasionado. Por eso el mío no es un trabajo rutinario, ni
una pasión rutinaria, es una pasión que se mantiene encendida siempre./
Marta Iglesias |
| |
|
