En la reciente reunión del G-8 se anunció la cancelación de la deuda a dieciocho de los países más pobres del planeta, situados en África y Sudamérica. José Luis García Barahona, Coordinador de la Región Norte en ACTIONAID-Mozambique, nos indica qué consecuencias reales va a tener esta decisión para esos países.

-Es real este anuncio sobre condonación de la deuda que ha anunciado el G-8 el mes pasado?
-Efectivamente el G-8 anunció -ya antes de su reunión- la condonación total de la deuda a 18 países. Está muy bien y todos aplaudimos bastante esto porque es una reivindicación que las ONG venían haciendo desde hace mucho. Lo que pasa es que este anuncio de condonación es publicista por varias razones. Primero porque es una deuda que ya sabían que no iban a poder cobrar y segundo porque el anuncio es muy superficial. Estamos esperando a que salga el documento que explique cómo va a ser esa condonación, si va a ser a plazos y sobre todo cuál es la condicionalidad que van a poner para condonar esa deuda. Porque siempre se han aprovechado las condonaciones para imponer políticas neoliberales.

-¿Cuáles son las condiciones que se suelen imponer a un país a cambio de condonar su deuda?
-Por ejemplo rebajar los subsidios a la parte de la economía que estaba subsidiada; privatizar empresas que eran del estado o en las que el estado tenía una gran participación; abrir los mercados a los productos de fuera; reducir el papel del estado; reducir la inversión directa del estado en los países... Toda la economía neoliberal de Thatcher y Reagan de los 80, se ha impuesto en los países del sur sobre todo cuando pedían nuevos créditos y cuando tenían que negociar la deuda.

-Esas condiciones no benefician al país...
-Pero se venden como que sí es beneficio para el país, porque la economía neoliberal se basa en que el estado entorpece el desarrollo económico normal. Entonces hay que reducir el papel del estado para que la economía se pueda desarrollar. Pero cuando vas a ver lo que ha ocurrido en países de África y América Latina, pues te das cuenta de que prácticamente todas las empresas que se han obligado a privatizar las ha comprado España -en el caso de América Latina- y el antiguo colono británico o francés -en el caso de África-. Y no digamos cuando obligan a quitar las tarifas o a reducir los subsidios a sus productos, y cuando obligan a reducir las tarifas de la importación. Eso beneficia totalmente a los países ricos que de repente consiguen meter mucho más sus productos en el sur.

-¿Cómo va a influir realmente la condonación en ese país?
-Cuando se condona una deuda no se está mandando dinero a ese país. Cuando dices que a Mozambique le vas condonar 18.000 millones de dólares no se los estás mandando, estás diciendo que no tiene que pagarte ese dinero que de otra forma tampoco podría pagarte. Digamos que en la economía del país se nota un subidón de fondos, pero no es un impacto. En realidad lo que esos países no van a pagar son las deudas que mantenían con los estados de esos ocho países que forman el G-8, pero la condonación no afecta a la deuda privada con bancos o empresas, ni a la deuda con otros estados. De hecho hay unos 28 países ricos en el mundo con los que los países pobres tienen deuda, entre ellos España. Y a mí me queda por preguntar qué está haciendo el gobierno español o los otros gobiernos de los países ricos que no están dentro del G-8 con sus respectivas deudas, porque en América Latina hay países que tienen deudas enormes con España y nuestro gobierno no ha dicho ni media palabra todavía.

-Vayamos a los orígenes, ¿por qué hay países con una deuda tan impagable?
-Por la máxima pobreza en la que están metidos y porque los pocos productos que tienen no los pueden llevar al mercado mundial. Pero no se ha hablado nada del tema de los subsidios al algodón en EEUU que hace tanto daño a las economías de África del Oeste, ni del azúcar en la UE, o los aranceles del cacao... Hay un montón de productos claves en los que no se ha entrado porque afectarían negativamente a la economía del norte. Condonar la deuda no nos afecta, ninguna vida de ningún estadounidense o europeo va a sufrir nada porque condonen la deuda de Mozambique, pero si le permiten a Ecuador exportar sus plátanos a la UE la cosa cambia. Ahí no podemos hacer concesiones porque tenemos que defender los plátanos de Canarias antes. Si países como Ghana o Costa de Marfil pudieran exportar el chocolate en tabletas a la UE, cambiaría mucho su economía pero ahora no pueden hacerlo porque tienen unos aranceles fuertísimos. Sólo pueden pagar los aranceles del cacao en bruto -para que luego lo preparen en Alicante o Suiza- porque son más baratos que los del chocolate elaborado.

-Cuarenta y dos países considerados muy pobres se quedan fuera de esta medida. ¿Qué criterios ha seguido el G-8 para la condonación de la deuda?
-Esa pregunta es muy interesante, a mí también me gustaría saber qué criterio han elegido. Sólo sé que los 18 elegidos están entre los más pobres del mundo pero no son los 18 más pobres del mundo. Son también los que mayor porcentaje de deuda tienen respecto al PIB.