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BUÑUELOS DE CALABAZA
Ingredientes: 1/2 Kg de
harina • 1/2 litro de agua • 50 grs de levadura prensada • 100 grs de
azúcar • 150 grs de puré de calabaza asada • Aceite
A
Alex le conocí un día en un restaurante en el que trabajé de camarero.
Aún recuerdo la conversación:
-Buenos días, ¿qué va a tomar el señor?
-De entrante nos va a poner usted una ensalada templada de cogollitos
con champiñones y camarones, y unos rollitos de salmón ahumados con
queso. De segundo, para mí el hojaldre relleno de cordero y setas. Y
para beber nos trae un Protos cosecha 1990.
-¡Excelente elección, señor! Y a su señora, ¿qué le pongo?
-¡A mi señora le pone usted un fax, y le dice que me lo estoy pasando de
p.m.!
Ponemos en un tazón el agua templada y disolvemos en ella la levadura,
para ir añadiendo la harina poco a poco, removiendo y amasando con la
mano.
Alex es cubano y llegaba a España huyendo de más cosas, aparte de su
mujer:
-¿Cómo te va la vida por Cuba?
-Muy mal, compadre, vengo a comprar pan.
-¿Y por qué?
-Porque el pan cubano es una mierda.
-¿Y Fidel?
-Fidel es un cacho de pan.
Pero no quiero contaros nada de Alex, sino de lo que vi y aprendí de
camarero. Había mucha gente que se hacía la simpática:
-Camarero, ¿qué tapas tiene?
-Tengo los Callos a la madrileña, los Riñones al Jerez, unas Ancas de
rana, los sesos revueltos, las mollejas al ajillo y las orejas con
tomate.
-Oiga le he preguntado el menú, no cómo se encuentra.
Cuando hayamos terminado con la harina se puede añadir un poco de
azúcar, dejando el resto para espolvorear los buñuelos. Lo tapas con un
lienzo y lo dejas reposar en un lugar templado hasta que haya crecido la
masa.
Pues sí, simpáticos había muchos y tenías que hacer de tripas corazón:
-Camarero, ¿tiene sacarina?
-Sí.
-Pues póngame el Baúl de los Recuerdos.
O aquel otro que se sentó en una mesa y me acerqué:
-Aquí tiene la carta.
-¡Acabo de llegar, y ya me han escrito!
Se añade el puré de calabaza asada y se remueve bien. Después se pone a
calentar el aceite y, cuando está bien caliente, se van tomando pequeños
trocitos de la masa a los que se les hace un agujero con el pulgar. Se
echan en el aceite hasta que estén bien dorados.
A veces te hacía gracia lo que hablaban:
-¿Qué es lo que más te gusta de Madonna?
Y el otro le responde:
-El Big Mac y el Mac Pollo.
Por último, espolvoréalos con el azúcar y recuerda que deben tomarse
bien calientes y acompañados de un buen chocolate. Bien, me despido con
una anécdota de borrachos, cómo no...
-Doctor, me siento mal, todo me da vueltas, además me arde el corazón.
-Mire señora, en primer lugar no soy doctor, soy camarero. Usted no está
enferma, sino borracha y en tercer lugar no le arde el corazón, sino que
tiene una teta en el cenicero.
/ El Cuñao
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