DICIEMBRE  2003

LA CONSTITUCION

Un año más se va a celebrar el cumpleaños de la Constitución.
Y lo hace en un momento de especial relevancia, marcado por el "plan Ibarretxe" y la respuesta del gobierno con su impugnación ante el Tribunal Constitucional.
Podríamos rellenar este artículo con un análisis del "plan Ibarretxe" y si es o no anticonstitucional, pero eso ya lo estamos leyendo y oyendo todos los días. Por eso, mejor vamos a hacernos algunas preguntas sobre la Constitución, su uso y abuso, su manejo intencionado y su olvido premeditado cuando interesa.
Y en unos momentos en los que al gobierno se le llena la boca con la Constitución, habría que preguntarles cuántos artículos se saltaron con el caso Prestige, que también anda de cumpleaños.
Es momento de recordar los despropósitos, las faltas de responsabilidad política, las contradicciones, la falta de respeto a los gallegos, las declaraciones fascistas de Fraga, Cascos y demás responsables de tal desastre.
Es momento de recordar que mintieron deliberadamente y que aún lo siguen haciendo, algo que en cualquier democracia occidental les costaría automáticamente el puesto.
Hablemos de la guerra de Irak. ¿Es constitucional que un presidente del Gobierno mienta en el parlamento al pueblo soberano? ¿Es constitucional que con casi un 90% de ciudadanos en contra de la guerra, el gobierno dé la espalda al pueblo y meta al país en un asunto de consecuencias impensables?
Cuando ahora uno escucha a Aznar hablar del "plan Ibarretxe", parece que es el "dios" de la verdad, de la legalidad, de la justicia.
Sin embargo aún en la calle, a él y a los suyos, les siguen llamando "asesinos". ¿No escucha esas voces...?
Vayamos al pueblo, a la calle. Según unas cifras reconocidas por el Ministerio de Trabajo, 19 de cada 100 españoles viven por debajo del umbral de la pobreza. ¿No contempla la Constitución que todos los españoles tienen derecho a un trabajo digno, a una vida digna? ¿Qué pasa con la vivienda? ¿Tienen acceso los españoles, todos, a una vivienda digna...?
Según el recurso presentado por el gobierno ante el Tribunal Constitucional, el "plan Ibarretxe" vulnera más de cien veces la Constitución.
Y es posible que así sea, no lo dudamos. Pero ¿cuántas veces la vulneró y vulnera el Sr. Aznar y su gobierno? ¿Alguien quiere tener la paciencia de contarlas?
¿Está moralmente autorizado el gobierno de Aznar a utilizar la Constitución como excusa para alegar contra Ibarretxe?
Por supuesto que no, ni Aznar ni nadie, porque nadie la cumple, porque es papel mojado, porque sólo sirve como disculpa para obrar impunemente desde la aparente "legalidad" que confiere.
Tal vez el "plan Ibarretxe" sea importante para los vascos, tal vez también lo sea para Aznar, el Opus Dei y algunos directamente interesados más, del gremio. Pero... ¿por qué no se les pregunta a los gallegos, por ejemplo, si les importa más el "plan Ibarretxe" que la seguridad de sus costas? ¿Por qué no se les pregunta a los catalanes qué opinan del asunto? ¿Por qué no se les pregunta a los españoles, en general, si les preocupa más el "plan Ibarretxe" o el hecho de que estemos en la lista negra del terrorismo internacional porque nuestro iluminado presidente se bajó los pantalones ante Bush y desde entonces sufre delirios de grandeza?
Me parece que Ibarretxe se equivocó totalmente en, al menos, una cosa, y es que dio una buena excusa al gobierno para desviar toda la atención de los españoles hacia "su plan", para convertirse en los caballeros de la defensa de la Constitución, en los salvadores de la España, una, grande y libre, cuando por detrás están haciendo lo que les sale de sus santas partes con la Constitución, con los derechos del pueblo soberano, con la verdad y con la justicia.
Pero, estén atentos al día del cumpleaños de la Constitución. Será como un cerrar filas ante los acosos que sufre por parte del nacionalismo, y nadie hablará de las permanentes violaciones a que la somete el nacionalcatolicismo.
¡Cuánta hipocresía!/ MC