JUSTICIA YANKEE
EE.UU. quiere imponer en el mundo un sistema policial que haría
morir de envidia a las SS o la Gestapo de Hitler.
|
En Guantánamo hay 598 presos
supuestamente terroristas. Al menos eso dicen Bush y los suyos, porque
nadie sabe exactamente quién hay allí, no lo permiten Bush y los
suyos, quienes saltándose a la torera todas las leyes existentes sobre
prisioneros de guerra, se inventaron sus propias leyes para destruir
física y moralmente a estos seres humanos, porque, a pesar de lo que
digan sobre ellos, siguen siendo seres humanos.
Pero Bush también se ha autorizado a sí mismo a decidir sobre quienes
son o no seres humanos. Se ha autoproclamado "dios", con decisión
sobre la vida y la muerte, aunque eso ya le venía de atrás, de su
época como adicto a la silla eléctrica.
En Guantánamo los prisioneros de guerra intentan suicidarse por
cualquier medio posible. No soportan la "vida" en aquel lugar. En
realidad a nadie le importa lo que viven, ni tampoco si se suicidan.
En realidad Bush y los suyos quieren que mueran lentamente, despacio,
saboreando cada paso hacia el final, disfrutando de su agonía.
Entienden que es el justo precio por lo que dicen que han hecho, o
sea, lo del 11-S. Aunque ya hay muchas voces que dicen que no fueron
ellos, que los terroristas están dentro de casa, cerca de Bush, al
lado de Bush.
Mientras, Bush y lo suyos siguen preparando campañas de guerra. Tienen
sed de sangre, aunque ellos le llaman "libertad duradera".
A este paso convertirán el mundo en campos de concentración, con la
bandera de la "libertad" yankee ondeando al viento, un viento que
arrastrará olor a muerte y también los lamentos desesperados de los
prisioneros de la justicia yankee, quienes buscarán la muerte para
liberarse de sus heroicos carceleros.
Y el mundo observa todo eso y se calla. Los aliados se callan, el
propio pueblo americano se calla.
EE.UU. quiere imponer en el mundo un sistema policial que haría morir
de envidia a las SS o la Gestapo de Hitler.
EE.UU. quiere combatir el terrorismo con el terror, con la represión.
Todos somos ya "supuestos" terroristas. Ellos no, ellos actúan en
nombre de la justicia, de la libertad, de la dignidad humana. Ellos
son los "salvadores" de la humanidad.
Sus atrocidades son errores tácticos. Sus asesinatos son aplicación de
la justicia. Sus guerras y amenazas de guerra son pasos necesarios
para liberar a la humanidad del terrorismo.
Pero... ¿Quién va a liberar a la humanidad de ellos?
¿Cuántas víctimas ocasiona el terrorismo en el mundo y cuántas la
maquinaria de guerra yankee?
Estamos ante la declaración de principios fascistas más absoluta de la
historia de la humanidad.
Si la razón y el sentido común no se impone en los aliados europeos y
se oponen frontalmente a los planes de Bush y los suyos, el mundo se
verá inmerso en la represión más brutal de la historia.
Pero, es bastante dudoso que los ciudadanos del mundo se queden con
los brazos cruzados ante tal recorte de libertades.
En EE.UU., por ejemplo, ya han nacido colectivos que han declarado su
absoluta oposición a los métodos y planes del Gobierno, los
antiglobalización del mundo, una fuerza creciente y cada vez más
poderosa han declarado la guerra a tales pretensiones.
Nunca la humanidad vivió momento tan delicado a nivel global.
Están en juego las libertades y los derechos humanos. Está en juego la
independencia política de las naciones, porque dar carta blanca a Bush
supone bajarse los pantalones ante sus obsesiones y sus manías.
Lo que pasa en Guantánamo debería de servir de referencia sobre lo que
puede pasar en todo el mundo, porque el planeta entero se puede
convertir en un campo de concentración vigilado por los perros
guardianes de Bush, con una silla eléctrica que no para de funcionar
mientras el "emperador" lee la biblia y escucha atentamente las
instrucciones de su padre.
Si se permite que Bush ataque Irak, ya no hay vuelta atrás../
MC
|