as reformas que el Ministerio de
Educación quiere introducir en la Enseñanza, han puesto en estado de alerta
a la comunidad educativa de nuestro país. La nueva Ley que prepara el
Gobierno ha suscitado numerosas críticas por considerarla regresiva, y se ha
denunciado que pretende ser impuesta y no elaborada desde el diálogo y el
consenso. Antonio Soto Blanco es presidente de Federación de APA de Asturias
"Miguel Virgós".
-Cómo calificáis esta Reforma educativa?
-Para nosotros, con el borrador que hay encima de la mesa en estos
momentos, es una Ley regresiva. Nuestra Federación siempre entendió que
había aspectos de la LOGSE que tenían que revisarse, pero desde luego, según
el borrador que tiene la Ministra encima de la mesa, hay aspectos que son
enormemente preocupantes, fundamentalmente para lo que nosotros
representamos.
-¿Qué aspectos destacaría como preocupantes?
-Fundamentalmente, que a edades tan tempranas, (entre los 12 y 14
años) los alumnos tengan que empezar a predeterminar qué va a ser del futuro
de su vida académica, y que además esa decisión esté en función de su
rendimiento académico. La Ley era una ocasión magnífica para haber corregido
temas como el fracaso escolar, que tanto preocupaban al Ministerio y a
nosotros. Esto se ataja de una forma absolutamente errónea, marcando
itinerarios y donde los alumnos tendrán que decidir, a esas edades tan
tempranas, a dónde van a dirigirse. Desde luego, no es de recibo dejar esa
responsabilidad a las familias de los alumnos. Creo que es un desatino en el
siglo XXI en el que estamos.
-Con esta Reforma, ¿qué va a ser de la Formación Profesional?
-La FP era la asignatura pendiente de la LOGSE. Todos los gobiernos
siempre han defendido la necesidad de dar más prestigio a la FP, pero la
realidad es que hemos ido en dirección contraria, al revés que el resto de
Europa, porque los alumnos preferían la Universidad. Ahora, resulta que se
vuelve a proponer que los alumnos que no sirvan para ir a la Universidad,
tengan como alternativa la Formación Profesional. Eso nos parece que es un
error enorme.
-Toda reforma lleva aparejada una cuantiosa financiación. ¿Cómo se
contempla esto?
-Lamentamos que la señora Ministra haya puesto eso en el último
apartado, al decir que una vez que se tenga el anteproyecto encima de la
mesa se hablará de financiación. En ningún momento ha puntualizado que para
llevar esto adelante el Ministerio o el Gobierno estuviese dispuesto a poner
encima de la mesa los medios económicos imprescindibles. El retroceso que
tuvo la LOGSE fue porque no tenía una Ley de Financiación, y creemos que
ahora se va en la misma dirección. Nosotros seguimos planteando que
cualquier medida que se adopte, fundamentalmente en el sistema educativo,
tiene que llevar aparejada medidas económicas.
-La aprobación de la Ley de Calidad va a suponer que se deroguen la LODE,
la LOGSE, y la LOSE.
-Pues sí, hay aspectos importantes de las tres leyes que
evidentemente quedan fuera. Una cuestión que nos afecta de forma directa es
que, como en esta sociedad se demanda que las familias tomen parte de la
responsabilidad, estábamos representados en los consejos escolares, únicos
órganos de gobierno ejecutivo del sistema educativo. Ahora estos pasarán a
ser unos órganos menores que no van a tener responsabilidad directa en la
elección del director. Eso es un error total.
-¿Es entonces una ley más de imposición que de diálogo?
-Pues sí, al parecer tomaron como norma aplicar lo que hicieron con
la LOU. Creo que a la Ministra y al Gobierno les falta el carácter
dialogante, tomarse un tiempo con las comunidades educativas y con los
agentes sociales para poner en práctica una ley que diera respuesta a las
necesidades de la sociedad del siglo XXI.
-¿Esta reforma va a favorecer más a la escuela privada o concertada que a
la pública?
-Yo creo sinceramente que sí. Este Gobierno tiene una tendencia
absoluta a que también la educación pase a formar parte de los sistemas de
agentes privatizadores, cuando el tema de la educación debería ser lo
contrario. Hay que apostar de forma decidida por la escuela pública, para
todos y en igualdad de condiciones.
-¿Cree que esta reforma educativa deja más incertidumbres que
soluciones?
-Pues sí, la verdad es que nos deja a todos con una incertidumbre.
Teníamos expectativas, pero la verdad, es que se ha desaprovechado una
ocasión magnífica para haber puesto en práctica todo lo que tenemos encima
de la mesa y poder dar una respuesta satisfactoria a todos. Es una pena. Por
el contrario, el hecho de imponer criterios selectivos y segregadores nos
llevará seguramente a tomar alguna medida, y que tengamos que salir a
manifestar de forma pública nuestro descontento con las medidas adoptadas.
Es lo que menos hubiésemos deseado. ∆