Revista Fusión

 Subscripción RSS

FUSION también eres tú,  por eso nos interesan tus opiniones,  tus reflexiones y tu colaboración  para construir un  mundo mejor

Recibe nuestras noticias en tu correo

 


 

 

EL ALEPH

 

 

 

Que abandonen las armas y dejen que sea el pueblo vasco quien decida si quiere o no la independencia, que dejen de matar y permitan a su pueblo decidir, porque son ellos, y no otros, quienes lo impiden.

 

 

aleph.jpg (11914 bytes)
ENTRE ETA Y LA OTRA
POR JOSE ROMERO SEGUIN

Es ETA una organización de fanáticos que no busca otra cosa que no sea la mera imposición de sus ideas. Ideas por cierto ya caducas. Pero eso qué le importa a ellos. Eso podía importarle algo a los anteriores miembros de esta organización, aquellos que se vieron en la necesidad de poner un toque de marxismo en las rancias verdades nacionalistas con que se le habían envenenado el alma. A ellos se les embarcó en una revolución en nombre de unas ideas que olían a viejo, a xenófobo, a cutre y descabellado,  y ellos las adornaron de ideales marxistas para no sentir en sus bocas el repugnante aroma a insolidaridad e intolerancia que éstas exhalaban. Pero eso eran los de antes, los históricos asesinos,  que también lo eran, que soñaron una Euskadi libre, independiente y marxista, para habitar la que de verdad les enseñaron y exigieron desde todos los púlpitos. Y lo hicieron, eso sí, desde una perspectiva abierta siempre a abandonar el proyecto, pues casi todos tenían tras de sí y en sus manos algo más que el terror y el sueño revolucionario: tenían capacidad para ser otra cosa que un mero puñado de criminales.

Los actuales miembros de ETA, sin dejar de ser fanáticos, son menos románticos y por supuesto nada cuidadosos con las formas. Les importa un carajo la ideología y hasta la rancia patria. Ellos buscan el poder, se han acostumbrado a tenerlo, a ser temidos, a vivir de un negocio que se llama extorsión y muerte,  y ese es un vicio difícil de abandonar, y más cuando no se tienen escrúpulos intelectuales ni ideológicos. Y lo que es peor,  cuando se sabe que al margen de ese poder no se tiene nada, que no se es más que un pobre hombre escondido tras las siglas de una organización que es tan fuerte y respetada como temida por inconsciente y criminal. Hoy también son jóvenes quienes responden a la llamada de la cruzada, pero estos jóvenes no aportan al sueño independentista sino la fórmula fascista de imponerse a los demás, y para ello no necesitan ya complicadas teorías políticas, sino que les basta con quedarse a la mayor,  es decir, independencia, territorios y libertad a los presos.  Es más, en un principio se dedicaron a actuar de gendarmes del terror, eso sí, que igual mataban a los ingenieros de una central nuclear, que volaban el puente de una autopista o ajusticiaban sin juicio a cualquiera que ellos tachaban de narcotraficante.  Pero ahora ni eso, ahora han decidido que cuando no hay problemas deben ser ellos quienes los organicen, para atemorizar como mafiosos que son y exigir luego a los demás como los políticos que se pretenden soluciones. Absurdo, pero así es, y lo es así porque tienen detrás a un importante número de vascos que al menos así lo quieren creer, o que cuando menos les viene bien que esto sea así, que sean siempre los demás culpables de sus propios desmanes, y que se le deba estar pagando continuamente por ello.

Es muy bonito y cómodo decirles a los que se rigen por las reglas democráticas que los tienen subyugados, cuando son los otros,  los de ETA, quienes realmente lo hacen. Y cómo no, esconder el egoísmo y la insolidaridad que contiene todo movimiento nacionalista, tras la idea de que se te niega el derecho a decidir, a tener una patria y una bandera.

No obstante el mensaje cala y cuela y no sólo allí, fuera aún hay quien sostiene que ETA ha hecho mucho por la democracia en este país. Son cosas que se dicen sin pensar, porque ETA ni ahora ni antes ha hecho otra cosa que luchar por ellos mismos. El proceso democrático vino dado por razones que poco tienen que ver con la barbarie de este grupo de fanáticos e insolidarios, y si a alguien se le debe algo es a todos esos jóvenes que desde el sindicalismo y la militancia política y pacífica propiciaron que la oligarquía de todo el ámbito territorial se decidiese acelerar la apertura. Por lo demás, ETA en su continua lucha por crear razones para seguir existiendo, no ha hecho sino poner en peligro una y otra vez el sistema democrático, impidiendo con la fuerza de las más reaccionarias ideologías que el proceso democrático tuviese un desarrollo mucho más amplio y profundo. En el que se hubieran depurado y modernizado muchas de las instituciones que si estaban necesitadas de esas medidas. Sin ETA se podría haber profundizado aún más en la democracia, pero ella se ha cuidado muy mucho de que esto pudiera ocurrir, porque es a ella y no al resto de los hombres y mujeres de España, a quien no le interesa que esto ocurra, para así poder seguir maldiciéndonos con su presencia. Ellos y no otros son los imperialistas, los reaccionarios y los asesinos. Los demás los sufrimos con resignación. Y si no que abandonen las armas, y dejen que sea el pueblo vasco quien decida si quiere o no la independencia, que dejen de matar y permitan a su pueblo decidir, porque son ellos, y no otros, quienes lo impiden.

Me gustaría pedir a los vascos que se definan, que sean ellos los que decidan, los que exijan, quienes ejerzan la soberanía, que dejen de delegar o dejársela robar por un puñado de fascistas.  Que entiendan que las medias tintas no caben cuando hay vidas humanas y derechos inalienables en juego. Si para ellos ETA tiene un sentido, que se hagan cargo de ese sentido y en el ejercicio de su responsabilidad lo expresen en las calles y las urnas.  Se lo pido porque sólo ellos pueden acabar con ETA sin romper aún más este tiempo de evolución hacia la revisión, que es por cierto la más cabal y plural de las formas de revolución social.
 

   

   
INDICE:   Editorial Nacional, Internacional, Entrevistas, Reportajes, Actualidad
SERVICIOS:   Suscríbete, Suscripción RSS
ESCRÍBENOS:   Publicidad, Contacta con nosotros
CONOCE FUSION:   Qué es FUSION, Han pasado por FUSION, Quince años de andadura

 
Revista Fusión.
I  Aviso Legal  I  Política de privacidad 
Última revisión: abril 07, 2011. 
FA